¿Descubriendo el agua tibia? Por: Francisco Javier Saldarriaga "Estamos convencidos que lo que necesita el país es la paz, pero no a cualquier precio". Esta es la frase de la semana en la revista que dirige el pariente del que en un alarde de creatividad e ingenio descubrió que los colombianos queremos vivir en paz y lanzó esa sentencia lapidaria y llena de novedad. También el mismo personaje se refirió a su primo como un ser que tiene "sida en el alma", intentando ofenderlo y de paso denigrando de los enfermos de ese virus. Muy seguramente no ofendió a su primo pero sí se lastimó él en su calidad humana y mostró el talante propio de personas insensibles ante la adversidad humana. Desde ahora está mostrando los dientes, como las fieras acorraladas que, cuando no pueden huir, gruñen para intentar atemorizar a quien consideran los está amenazando. Los asesores para su campaña de reelección lo están aconsejando, muy posiblemente creen que están en Venezuela, en donde el agravio o el insulto es la mejor manera de adelantar una campaña para conseguir el favor del pueblo y acceder nuevamente al poder presidencial. Se dedica a desmentir o a menospreciar a quienes no comparten su forma de dirigir al país de esa manera centralista tan obvia que hasta el ministro Carrillo, otro creativo que encontrará puesto en las páginas de los clasificados afirma muy novedosamente: "Vamos a desbogotanizar el gobierno", para demostrar lo indemostrable, puesto que pretenden engañarnos de nuevo con anuncios, sin hechos que lo comprueben de las grandes ejecutorias del gobierno del nunca antes como lo llamó Fernando Londoño H. Las encuestas lo castigan, el pueblo no le cree, los empresarios, exceptuando a unos pocos de escasos principios y mucha gana de plata, ven con incertidumbre el futuro económico del país, los inversionistas se retraen, los agricultores amenazan con paros y los llevan a cabo, lo mismo hacen los mineros, los camioneros y el país en general está convulsionado con acciones de protesta social, debido a las muchas promesas y pocas acciones reales de solución a las dificultades del diario vivir. Estamos de nuevo secuestrados y extorsionados por las bacrim que se incrementaron en proporciones geométricas durante estos tres largos y duros años de un mandato insulso y promesero, que ha tenido como campanas de resonancia a los medios bogotanos que, nunca antes, como todo lo de este gobierno, se han visto tan untados de mermelada oficial. Es tan poco lo que han hecho que tienen que salir a cacarear a las provincias lo que se debiera ver sin necesidad de que los altos funcionarios del Estado tengan que proclamar en la provincia lo que han hecho en Bogotá. Ni los bogotanos se han dado cuenta de las inmensas ejecutorias, en las palabras, de este creativo gobierno de mucho tilín y nada de paletas. Pero para defenderse dice que el expresidente Uribe le hace mucho daño al país cuando menciona en las redes sociales todas las embarradas de un personaje funesto que llegó al poder con banderas ajenas que arrió inmediatamente logró su cometido. Para finalizar pregunto: ¿Entonces, cuál es el precio del que habla este señor, si le está entregando al país a los narcoterroristas? ¿Será muy poco lo que ha cedido? ¿Es que le están pidiendo más y no nos han contado?.
Posted on: Fri, 16 Aug 2013 22:53:44 +0000
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