"... El presidente que soñó con ser el Roosevelt colombiano y la - TopicsExpress



          

"... El presidente que soñó con ser el Roosevelt colombiano y la versión contemporánea de López Pumarejo, se parece cada vez más al predecesor que ha combatido por todos los medios. … los sueños requieren trabajo y constancia, hay que merecerlos. La ambivalencia permanente de Santos — que coquetea al mismo tiempo con Petro y con la extrema derecha uribista — lo ha convertido progresivamente en un preso de este último sector, del que no logra zafarse por completo. El presidente que podría ingresar por méritos propios en los anales de la historia — si se alcanza un acuerdo que selle el proceso de paz con las FARC y si logra poner en marcha una transición política hacia el post–conflicto — se encuentra atrapado en la misma dinámica de incompetencia de su predecesor: parece incapaz de comprender las tareas históricas de un gobernante que se autocalifica liberal, en un contexto continental marcado por el clamor incesante de sectores sociales excluidos que exigen ser tratados como ciudadanos de primera categoría. Santos y su mediocre gabinete enfrentan de manera incompetente diversos paros y huelgas, que revelan asignaturas pendientes del Estado colombiano. La perspectiva estrecha de estos señoritos santafereños — que ignoran el drama de la mayoría de los colombianos — les impide comprender la magnitud del fracaso de un proyecto que no se limita a Santos y a Uribe, sino al conjunto de la clase política que ha gobernado este país a espaldas de las grandes mayorías, definidas a priori como condenadas a ser subalternas eternas. El ejemplo cumbre de la incompetencia política y la miseria moral de este régimen se encarna majestuosamente en el ministro Fernando Carrillo. Si utilizáramos su propio rasero para acusar de “subversivos” a los campesinos, mineros y cafeteros que reclaman derechos acordes con la Constitución y las leyes vigentes, habríamos calificado como “subversivos” a quienes, como él mismo, hace 23 años forzaron un cambio constitucional que contravenía las normas vigentes en el momento. Pero de nuevo hay una diferencia de estatus: una cosa fueron las manifestaciones estudiantiles de los señoritos bogotanos, otra cosa son las manifestaciones de campesinos sucios y desarrapados. Los unos son ciudadanos de pleno derecho y sus protestas merecen el reconocimiento histórico, los otros son “sub–humanos” inferiores y subversivos..."
Posted on: Tue, 23 Jul 2013 14:02:05 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015