(Fe)2 x esperanza = victoria Hoy vamos a explorar una ecuación - TopicsExpress



          

(Fe)2 x esperanza = victoria Hoy vamos a explorar una ecuación matemática que el Señor puso en mi mente, la cual nos ayudara a resolver un sin número de situaciones y dificultades según se presenten. Hoy vamos a resolver: (Fe)2 x Esperanza = Victoria. Pasemos ahora a la Palabra de Dios para encontrar nuestra ecuación. Texto Biblico: Hebreos 11:6 En esta pequeña porción de las escrituras encontramos la ecuación matemática que nos ayudara a resolver cualquier situación o dificultad que se presente en nuestra vida. ¿Cuántos la pueden ver? Analicemos ahora la ecuación en secciones para que todos puedan entender. I. La fe nos confiere el poder para lograr. Desdichadamente, cuando se habla de la fe, no todos logran entender el significado tan grande de esta palabra. La razón por la que muchos no logran entender el significado tan grande de esta palabra es porque muchos usualmente le definen de la manera que el mundo la interpreta. ¿Cómo la interpreta el mundo? Según el diccionario de la Real Academia Española, la fe es definida como: Conjunto de creencias de alguien, de un grupo o de una multitud de personas. Pero como todos nosotros sabemos, le fe es mucho más de un conjunto de creencias religiosas. Y es por eso mismo que aquí encontramos que se nos dice que: ...sin fe es imposible agradar a Dios. Pero si la fe no es estrictamente un conjunto de creencias religiosas de un grupo de personas, entonces: ¿qué es la fe? La respuesta a esta pregunta es fácilmente encontrada en Hebreos 11:1. La fe es mucho más de un conjunto de creencias. La fe es estar completamente seguros y confiados de esas cosas que no podemos ver. Pero desdichadamente, muchos no logran obtener este tipo de convicción o certeza, y es por eso que la primera parte de nuestra ecuación es: (Fe)2. Para aquellos como yo que se nos ha olvidado un poco los principios matemáticos, permítanme explicarles lo que significa el cuadrado en una expresión. En términos matemáticos cuadrado quiere decir multiplicado por el mismo número. Por ejemplo, el (5)2 es igual al 5 x 5, que es igual al 25. ¿Qué les estoy diciendo con esto? Lo que les estoy diciendo con todo esto es que para lograr obtener el resultado final deseado, en otras palabras, la victoria, tenemos que multiplicar nuestra fe en Dios. Nuestra fe no está libre de toda imperfección; la realidad de todo es que nuestra fe en ocasiones flaquea. En ocasiones nosotros cedemos al pecado, y le faltamos a Dios. Decir cualquier otra cosa es simplemente mentirnos a nosotros mismos (1 Juan 1:10; 1 Juan 2:4). ¿Qué les estoy diciendo con todo esto? Lo que les estoy diciendo es que por muy poderosa que pensemos que nuestra fe es, siempre existe espacio para multiplicarla (Lucas 17:6). Tenemos que elevar nuestra fe al cuadrado. ¿Por qué tenemos que elevar nuestra fe al cuadrado? Tenemos que elevar nuestra fe al cuadrado porque la fe multiplicada, es lo que nos confiere el poder para lograr servir a Dios como Él desea que le sirvamos. La fe multiplicada es lo que nos confiere el poder para lograr acercarnos a Dios. La fe multiplicada es lo que nos confiere el poder parar poder rechazar las mentiras del enemigo. La fe multiplicada es lo que nos confiere el poder para poder obtener la victoria que Dios desea que obtengamos (1 Juan 5:4). Continuemos ahora a la segunda porción de la ecuación. II. La esperanza nos inspira a perseverar Para iniciar debemos primeramente examinar la definición de la palabra esperanza. Según el diccionario de la Real Academia Española, la palabra esperanza es definida como: estado del ánimo en el cual se nos presenta como posible lo que deseamos. El problema que existe es que muchos han perdido la esperanza. ¿Por qué ha sucedido esto? Esto ha sucedido porque nosotros estamos viviendo en un mundo donde Dios está siendo eliminado de la ecuación. Estamos viviendo en un mundo que pretende explicar lo divino a través de la ciencia; estamos viviendo en un mundo que pretende convencer a todos de que Dios no existe. ¿Cuál será el resultado final si el mundo logra su propósito? El resultado final será que todos quedaran sin esperanza alguna. Dile a la persona que tienes a tu lado: un mundo sin Dios, es un mundo sin esperanza. Pero como todos nosotros sabemos, el creyente fiel nunca puede perder su esperanza. Y es por eso que en el versículo que estamos estudiando en el día de hoy leemos: %u2026porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay... La realidad de todo es que perder la esperanza en ocasiones se nos hace fácil. La razón por la que se nos hace fácil es porque en ocasiones se nos presentan situaciones o dificultades que aparentan insuperables. En ocasiones a nuestro alrededor se levantan fuertes tormentas y recios vientos que nos hacen pensar que todo está perdido. Fíjense bien como esto es algo que queda muy bien reflejado cuando leemos acerca de cuando Pablo fue enviado a Roma y se presento la gran tempestad en el mar. En Hechos 27:20 encontramos que cuando Pablo estaba relatando lo acontecido dijo: Y no apareciendo ni sol ni estrellas por muchos días, y acosados por una tempestad no pequeña, ya habíamos perdido toda esperanza de salvarnos. Dile a la persona que tienes a tu lado: Pablo perdió la esperanza. Ahora pregunto: ¿si esto le sucedió a Pablo, no nos podrá suceder a nosotros igual? Claro está en que si nos puede suceder. Como seres humanos al fin, todos nosotros podemos ser influenciados a pensar que nuestros problemas o situaciones son tan difíciles que no tienen solución. Esto es la gran verdad acerca de todo aspecto en nuestra vida; un esposo o esposa pueden ser influenciados a pensar que su pareja no tiene solución; un padre o una madre pueden ser influenciados a pensar que los hijos no tienen remedio; todos podemos ser influenciados a pensar que la obra que hacemos no tiene resultado; en si, todos podemos ser influenciados perder la esperanza. Pero cuando estas cosas sucedan en nuestra vida, siempre debemos tener en mente lo que encontramos en Romanos 15:13 . Como fieles creyentes nosotros no podemos permitir que la esperanza sea arrebatada de nuestra vida. Fíjense bien que en lo que acabamos de leer se nos dice: %u2026para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo. Fortalecer nuestra esperanza con el poder del Espíritu Santo significa que tenemos una meta a cumplir. Cuando fortalecemos nuestra esperanza con el poder del Espíritu Santo, entonces tenemos propósito. Cuando fortalecemos nuestra esperanza con el poder del Espíritu Santo, entonces tenemos un lugar hacia donde movernos, tenemos una expectativa de un nuevo comienzo, tenemos una expectativa de un nuevo y brilloso futuro, tenemos una promesa de cual agarrarnos. III. La victoria nos conduce a laborar En el versículo que estamos estudiando en el día de hoy leemos: %u2026que es galardonador de los que le buscan. La palabra clave aquí es: galardonador. Dios premia a todo creyente que genuinamente le busca. ¿De qué forma nos premia Dios? Dios nos premia de numerosas maneras; examinemos ahora solamente cuatro. Primero de todo nos premia con el premio supremo cual es la salvación y vida eterna (Juan 3:16). Segundo; Dios nos premia asegurándonos que nuestra labor y esfuerzo, en otras palabras, nuestra perseverancia en la fe no es en vano (1 Corintios 15:58). Tercero; Dios nos premia al entregarnos la potestad para poder echar fuera de nuestra vida todo poder de las tinieblas (Lucas 10:19). Cuarto; Dios nos premia al protegernos para que a nosotros no nos llegue una tentación más grande que la que podamos resistir (1 Corintios 10:13). Conclusion Hoy hemos explorado una ecuación matemática que nos ayuda a resolver un sin número de situaciones y dificultades según se presenten. La ecuación es (Fe)2 x Esperanza = Victoria. Pero, ¿por qué hemos explorado una ecuación matemática? La razón por la que hemos hecho esto es porque la matemática es el único método exacto que existe. La matemática es el lenguaje universal; no existe área gris en ella. Dos más dos siempre son cuatro; cinco por cinco siempre es veinticinco; no hay otras respuestas; no hay otras soluciones. Las soluciones en la matemática son verdades absolutas, esto quiere decir que es imposible que el resultado de un problema sea falso. Dios es de la misma manera. Dios es la verdad absoluta; Dios es, fue, y por siempre será el mismo. El Señor deja esto bien claro en Lucas 21:33 cuando leemos: El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. Dile a la persona que tienes a tu lado: Dios es la verdad absoluta. ¿Quieres solucionar ese problema que afecta tu vida? ¿Quieres obtener la respuesta a esa inquietud o situación? Entonces cuadra tu fe, multiplícala por esperanza, y pronto obtendrás la victoria. Recuerda la ecuación: (Fe)2 x Esperanza = Victoria.
Posted on: Fri, 29 Nov 2013 01:06:51 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015