• SABIDURÍA • La sabiduría es singular porque es - TopicsExpress



          

• SABIDURÍA • La sabiduría es singular porque es integradora; es la capacidad de vislumbrar la totalidad. La sabiduría nos hace visionarios y nos hace entrar en el territorio del alma, mucho más allá de la intuición; solamente adquirimos la sabiduría cuando nosotros despertamos en el corazón la sensibilidad a la intuición; es nuestro corazón el que la despierta. En nuestro corazón aprendemos emocionalmente que las emociones no solo no son obstáculos al crecimiento o al conocimiento como nos han enseñado; sino que las emociones son tan importantes al conocimiento como el intelecto. Hay cosas que solamente podemos conocer emocionalmente. No podemos atrapar una emoción en palabras, las palabras son las prisiones de las emociones; hay emociones tan hondas, tan profundas, tan totales como la emoción mística; un místico no puede describir su vivencia de Dios en palabras. Cuando nuestra vida recupere la capacidad de leer desde el código de las emociones que nos permiten contemplar la belleza, no como algo externo sino como algo que nos conmueve interiormente; entonces estamos accediendo a la sabiduría, la sabiduría es algo vivo que se vive desde el corazón, desde el silencio, más que desde las palabras. Solamente cuando conquistamos la sabiduría, estamos accediendo al sendero de la libertad. Creemos que somos libres pero si fuéramos libres tendríamos ya alas, seríamos ángeles y no estaríamos aquí. Realmente el proceso de humanización es progresivo, de contínua liberación y ese proceso no es posible sin liberarnos de la prisión de los sentidos y de la mente; no es posible si no accedemos a ese destino interior que es la intuición, que nos permite inspirarnos para adquirir la sabiduría que nos conduce a la genuina libertad. La libertad es aquello que nos integra y nos libera del separatismo o separación, de la falsa creencia de que éramos seres indispensables o separados. La libertad es aquello que nos lanza más allá de la independencia e interdependencia, nos lleva a la integración con el mundo. Cuando nos integramos con el mundo somos realmente libres; en ese momento nuestro corazón es el centro de la galaxia. Es decir, más allá del sol, de la luna, de las estrellas y de otras constelaciones. El centro de la galaxia, el agujero negro que representa el centro de la conciencia, está en el mismo corazón de un hombre que ha alcanzado la sabiduría de sentirse el universo. De sentir que él, cuando tiene conciencia en su corazón, es el centro del universo; en ese momento ve el universo desde los ojos espirituales, desde el ojo del alma que llamamos el ojo de la intuición. El ojo de la intuición es el ojo de la integridad y de la totalidad en nosotros. Para ir más allá del maestro, más allá del discípulo y del profesor, para ser el sabio interior que habita en nosotros, es necesario que despertemos al ojo de la intuición. Abrir el ojo de la intuición es simplemente abrir desde adentro las puertas de nuestro corazón al amor, porque lo único que escucha la intuición, es la palabra del amor. Una iniciación es una expansión de la conciencia; es una puerta que se abre; un camino que se empieza a transitar. Para ser genuinamente humanos tenemos que conquistar el territorio de la intuición en nuestro corazón, que es el territorio de la genuina sensibilidad. Cada vez que tengamos una corazonada y nos resulte; cada vez que seamos conscientes que una casualidad no es una casualidad sino una causalidad; y que además más que una causalidad es una finalidad y una sincronicidad. Cada vez que descubramos el significado de las cosas, detrás de los accidentes o detrás del azar, cada vez que nuestra vida y nuestra historia se vuelva significativa, entonces todos los momentos del día empiezan a tener un significado para nosotros, de esa manera estamos entrando en el universo de la sincronicidad que es el universo de la intuición. Cuando empecemos a ver que todo tiene sentido, que el dolor tiene sentido, que el rechazo la renuncia y la crisis tienen sentido, que aún lo absurdo tiene sentido, si nosotros lo leemos con el ojo espiritual, empezamos a entrar en una vía muy bella del sendero espiritual, que se llama: La lectura espiritual. La lectura espiritual es leer el significado de las cosas con el ojo del corazón que refleja la luz del alma. La lectura espiritual es entender que en el momento están vivas las sagradas escrituras. Que las sagradas escrituras no solo son la Biblia, el Corán o las demás escrituras sagradas de la humanidad; sino que es también la huella que un hombre consciente produce en el momento presente, porque esa huella va a permear y fecundar el espacio infinito y se convierte en una semilla que ya jamás va a dejar de germinar. No lo veamos como una cosa teórica, podemos entrar en el universo de la intuición ya, ahora y aquí, siempre que tengamos consciencia de que cada momento puede ser significativo. Si nosotros lo hacemos significativo y si somos aprendices dispuestos a aprender la lección del momento, entonces podemos aprender que la vida no es sino un proceso de creciente y continua fusión que nos lleva a la liberación. Esa liberación solamente la obtenemos a través de la intuición que le da significado y sincronicidad a cada momento. Cuando un momento se vuelve significativo, ese momento se vuelve eterno y deja una huella permanente en nuestra vida.
Posted on: Thu, 19 Sep 2013 15:22:55 +0000

Recently Viewed Topics




© 2015