¿SOMOS TODOS HIJOS DE DIOS? - EL REINO DE DIOS - TopicsExpress



          

¿SOMOS TODOS HIJOS DE DIOS? - EL REINO DE DIOS En el principio del mundo, era el Reino de Dios. Todo en la Tierra estaba en perfecta armonía: el Creador, la naturaleza y la criatura humana. Creemos que el objetivo divino en la creación, era establecer en la Tierra el mismo sistema de vida existente en los Cielos, y que en el proyecto inicial la única diferencia entre los Cielos y la Tierra estaría en sus habitantes: en los Cielos habitarían los seres espirituales, y en la Tierra los materiales; todos bajo la soberanía infinita del Todopoderoso. El orden y disciplina existentes en los Cielos serian las mismas en la Tierra. La disposición jerárquica celestial, en la cual hay arcángeles, ángeles, querubines y serafines, seria idéntica a la de nuestro planeta. Adán y Eva, los primeros padres, serian inmortales y generarían hijos con la misma característica para habitar en la Tierra. Dios había creado y constituido Adán como Su representante en el planeta Tierra. Su autoridad seria extendida hacia las criaturas humanas para el desarrollo de Su Reino en la Tierra. Vemos el mapa del plan divino para la criatura humana dibujado en los siguientes versículos: ¨Entonces dijo Dios: hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer.¨ ( Gn. 1: 26-29) Ese texto bíblico llama la atención para acontecimientos extremadamente importantes: 1- Dios hizo al hombre a Su imagen y conforme a Su semejanza. Él lo creo del barro con las propias manos, y no lo engendró a través del Espíritu Santo, como en el caso de Jesús. 2- El dominio entregado a Adán sobre todos los animales y sobre toda la Tierra, se trataba de autoridad total, es decir, Dios constituyó a Adán como embajador de Su Reino en la Tierra. 3- La Tierra necesitaba ser desarrollada, y para ello era necesario que Adán y Eva fueran fértiles, y se multiplicaran para llenar la Tierra. Ellos no podrían estar solamente en un lugar, mas tendrían que esparcirse. 4- No había el pecado, y, por esa razón no había la muerte. Adán y Eva como todos los animales, vivían solamente del fruto de la Tierra. Aun los animales salvajes no necesitaban cazar para sobrevivir, una vez que su alimentación era estrictamente se origen vegetal. La imagen de la Tierra antes del pecado original expresaba el paraíso, el reino de Dios en el planeta Tierra. No había el reino de las tinieblas. Pero, en el momento en que Adán y Eva rehusaran obedecer a Dios para rendir obediencia al diablo, surgió ese reino maldito. A consecuencia de eso, el mal, se volvió señor de ellos, desde entonces se dio inicio al reino de las tinieblas. A causa de todo eso, la naturaleza se rebeló en contra de los seres humanos, y la tierra ya no suplía la necesidad de los hombres y de los animales, el hombre tuvo que empezar a comer a través del sudor de su rostro, en razón de tener que trabajar con la fuerza de su propio brazo, para sacar de la tierra el pan de cada día. La muerte pasó a existir y los animales se volvieron carnívoros para sobrevivir. Con la rebeldía del hombre hacia el Creador, la naturaleza dejó de ser aliada de sus habitantes instalándose el desorden y el mal en la faz de la Tierra. Los ángeles rebeldes, que habían sido expulsados de los Cielos, se volvieron espíritus inmundos sumisos a satanás. Con la instalación del reino de las tinieblas en la Tierra, los ángeles caídos de unieron al diablo para desarrollar el reino de la rebeldía hacia Dios. Así los seres humanos se volvieron vulnerables a todo ataque de los espíritus inmundos, pues los mismos tenían total libertad para poseerlos. Al final, Adán y Eva habían abandonado el territorio de su Creador. Cuando alguien rechaza la Luz, las tinieblas ocupan ese lugar. Pero, cuando se rechaza las tinieblas, la Luz empieza a reinar. Y cada quien debe decidirse por si mismo a cual quiere servir, la Luz o las tinieblas. La desobediencia de Adán causó la perdida del dominio y de la autoridad. Lo peor es que esa perdida automática, fue la transferencia de su autoridad para satanás, que acabó entrando al Jardín del Paraíso sin tener, hasta ese momento, poder o dominio en el mundo. La prueba de esa falta de poder es la muerte, que todavía no existía. Pero, cuando el diablo tomó posesión de la autoridad que Adán le había entregado, la muerte pasó a existir en la Tierra, exactamente como dijo el Señor Jesús: ¨El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir…¨ (Jn. 10:10). De esa manera nació el reino de las tinieblas en este mundo, es decir, el reino del mal comenzó con la rebelión de alguien que hacia parte del bien: Adán. Dios, aun viendo todo eso, en Su infinita compasión y misericordia, hizo un plan de rescate para aquellos que lo desearan. Escogió a un hombre fiel a la propia esposa para que a través de ellos fuera formada una nación separada de las demás. De esa nueva nación Él escogió una joven virgen desde el punto de vista físico y pura desde el punto de vista espiritual, para servir como instrumento de la venida de Su Hijo Jesús al mundo y, por medio del sacrificio de Su Hijo, pudiera eliminar la culpa de todos los que creyeran en Él. De esa manera, los que se tornaran obedientes a Su Palabra pasarían del reino de las tinieblas para el Reino de la Luz, el Reino de Dios. Esa es la razón por la cual el Señor al iniciar Su ministerio terrenal, anunció: ¨Ha llegado a vosotros el Reino de Dios¨. Así el reino del orden y disciplina divina reinició con el nuevo ¨Adán¨ también llamado de Segundo Adán. Aquellos que nacieron del reino de la rebelión del primer Adán, a pesar de, no haber escogido dicha opción, tenían, basados en ese anuncio del Señor Jesús, la oportunidad de salir del reino del mal para transferirse para el Reino de Dios, siguiendo a Su Hijo.
Posted on: Thu, 08 Aug 2013 04:38:54 +0000

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