¿AJUSTE DE CUENTAS? Esa es la pregunta que gira entorno al esfuerzo inicial del Gobierno de Maduro por inspeccionar las empresas para que apliquen “precios justos”. Parece que esa fue la intención, pero el tema agarró tanta fuerza que se les salió de las manos. Tomemos el ejemplo del primer gran objetivo: Daka. Hace varias columnas alerté sobre la intención de un sector del Chavismo de investigar a las empresas de Paraguaná que reciben dólares preferenciales como parte de una guerra interna. También dije que había varias de dichas empresas que eran protegidos de un poderoso grupo de militares que tienen grandes negocios. El tiempo confirmó aquel mensaje que recibí, porque a todas luces la primera parte de la operación “precios justos” fue un ajuste de cuentas entre los grupo de poder del Chavismo. En el caso de Daka se señala que al parecer todo es una conspiración contra el Gobernador de Aragua, Tareck El Aissami, por sus supuestos vínculos con los dueños de Daka, quienes por cierto viven desde hace mucho tiempo en Panamá. Se dice que uno de los socios de Daka se salió y por eso la andanada de acciones contra ellos. Me dicen que el Gobierno viene duro contra la marca Siragon, porque recibe dólares Cadivi y los precios no son nada preferenciales. La estrategia inicialmente tuvo dos propósitos. El primero golpear a ciertos poderosos del Chavismo a través de sus negocios con “amigos. Y segundo, presionar para acelerar la aprobación de la Habilitante que había entrado en un letargo inducido.
Posted on: Sun, 17 Nov 2013 14:09:57 +0000
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