CAPITULO NUEVE Todo lo que Armorhide siempre querido era hacer - TopicsExpress



          

CAPITULO NUEVE Todo lo que Armorhide siempre querido era hacer reír a la gente. El era de la casta de artistas y por lo tanto tenía cierta libertad generalmente prohibida a las otras castas. La comedia había sido el arte que el había elegido, y había encontrado su audiencia en Altihex –específicamente en el Gran Salón del Casino de Altihex. Una estación orbital, colgaba inmovible camino a Iacon y las otras ciudades del norte, el Casino de Altihex era solo para aquellos que tuvieran una forma voladora. Pululaba con artistas, inconformes sociales, aquellos que preferían ver como trabajaba la ciudad desde el exterior. Esa era la gente de Armorhide, y era su vida el trabajar para darles a ellos un momento para olvidar las mundanas carencias de las castas y el aislamiento de un planeta que vagaba por el espacio, alejado de todas aquellos asentamientos Cybertronianos desde el colapso de los puentes espaciales hace muchos ciclos atrás… El estaba contando una broma sobre los puentes espaciales, una elaborada historia que involucraba los precios cargados por una fuerza inventada de colectores de herramientas. La broma estaba fallando, y empezaba a improvisar de una horrible manera para repararla. La multitud reía porque era su multitud. El había estado con ellos en el Gran Salón de Altihex docenas de veces. Ellos podrían cortarlo, o bombardearlo de vez en cuando. Pero el estaba frustrado porque esa noche –de todas las noches!- el gran distante líder Sentinel Prime estaba entre el público. Sentinel prime! La noche mas importante de su vida, y si tiempo se estaba acabando. Incluso su antiguo repertorio, garantizado para hacer reír, no estaba teniendo efecto. La audiencia debía saber que Sentinel prime estaba ahí. Y también estaba nerviosa. Después sucedieron un par de cosas. La primera fue que Sentinel prime, quien mantenía el sistema de castas, Mariscal de la Armada de Cybertron, el líder que (se rumoraba) Cybertron mismo le había dado la Matrix del Liderazgo- rio. Con una broma que Armorhide creía que fallaría. La segunda cosa fue que la muralla que se encontraba en el exterior de la estación voló como una enorme avalancha, precedida por el inconfundible sonido de explosivos detonando. Starscream asumió su forma alterna –como un reflejo, cuando las explosiones sonaron dentro del Gran Salón- pero entonces se forzó a regresar a su proto forma, arrastrando a Sentinel prime lejos de la trayectoria de una columna que colapsaba. La gravedad artificial de la estación se balanceo con el disparo inicial. Entonces la atmosfera se vació al espacio, succionando a gran parte de la audiencia. Por los agujeros en el muro llego un numero de Cybertronianos, algunos aun cambiando de su forma alterna. Uno de ellos arrojo un aparato dentro de la muralla. Eso inmediatamente escalo a uno de los altavoces conectados al sistema general de audio del salón. “Somos Decepticons,” resonó una voz desde los altavoces. “Reclamamos Altihex en el nombre de los que no tienen casta, en el nombre de un Cybertron libre –en el nombre de Megatron!” Reclaman Altihex? Pensó Starscream. Como podría una fuerza terrestre operarlo correctamente? La voz se fue desvaneciendo así como la toda la atmosfera que salía del Gran Salón. Starscream se dirigió hacia Sentinel prime. “Líder,” dijo. “Debemos-“ Detonaciones de cohetes y estallidos de energía lo detuvieron. Los Cybertronianos que invadían, aun en medio de su conversión a protoforma de sus formas alternas de Seekers, continuaban llegando atravez del agujero en las murallas exteriores de altihex. “Peleare!” grito Sentinel prime, las palabras vibraron en los sensores auditivos de Starscream. “Quienes son esos Decepticons? Quien se atreve? Quién es ese Megatron?” Una descarga de iones golpeó el torso de Sentinel prime, mandándolo a una fila de asientos. Starscream abrió fuego, reteniendo y protegiendo a Sentinel prime. El líder se veía conmocionado – y, Starscream se sorprendió al notar, miedo? De ellos? A esa turba? Despectivamente Starscream disparo a uno de ellos regresándolo al agujero del que había salido, y entonces guio a Sentinel Prime a un lugar aislado, golpeando y ordenando retirarse al resto de la audiencia que no había sido dañada o destruida por la irrupción inicial. El empujaba a Sentinel prime por delante, manteniendo contacto físico con él. “Líder, te protegeremos. Ahora no es el tiempo de que luches.” Y Sentinel Prime lo siguió Starscream se sintió feliz por el ahora, Megatron no podría haber llevado a cabo esta operación. El tiempo de Sentinel prime había pasado desde hace tiempo. El no lo sabía, pero Starscream sí. Al igual que Megatron. Y ahí estaban dos de sus subordinados, Skywarp y Thundercracker. Esperando en el corredor mecánico donde la presión atmosférica estaba funcionando en su máxima potencia. Starscream empujo a Sentinel prime al frente. “Ellos son mis confiables lugartenientes,” dijo Starscream. “ellos te protegerán mientras sacamos a los otros fuera. Sentinel prime asintió. “Ve, Starscream. Si puedes encontrar ayuda, hazlo. Si no, al menos esparce la verdad sobre lo que paso aquí.” Alguna vez, el había sido un gran guerrero. Starscream había oído esas historias. Ahora, el había perdido si potencial, había sido cómplice del congelamiento y lenta muerte de la sociedad Cybertroniana, la muerte de miles de castas. Era tiempo de un nuevo liderazgo, uno que reconstruyera lo que había sido perdido y olvidado. Esta operación, la toma de Altihex, era una declaración a Cybertron y simultáneamente el primer signo evidente de que lo Decepticons eran mas que solamente retorica. Skywarp y Thundercracker se encargarían de cuidar de él, en lo profundo de Kaon, fuera de la vista. Donde pertenecía. Explosiones distantes y alarmas resonaron atravez de la formación torus en Altihex. Nunca más seria una resistencia problemática para los Decepticons; eso era parte del porque habían escogido ese tiempo y lugar para su primer acto de revolución. Starscream logro salir del Gran Salón sin encontrar resistencia. El único movimiento en el Salón era el comediante cuyas pobres bromas habían sido misericordemente cortadas por el ataque. El caminaba de un lado a otro en el escenario, haciendo gestos de furia. Cuando se fijo en Starscream, lo tenía en la mira con un lanzacohetes montado en sus hombros. Starscream aunque tenía tiempo no tenía intención alguna de pelear. Asumió si forma alterna y resonando a lo lejos, los cohetes del comediante explotaron silenciosamente. El tenía un asunto que atender, abajo y todo el camino sobre Badlands, y en la ardiente ciudad de Altihex había un indicio de la forma en que sería el futuro, no sería tarde. Había algunas decisiones que finalizar… y Starscream tenía algunos planes para él en movimiento. Megatron no era el único Cybertroniano con una visión sobre lo que Cybertron debía ser. Al final de el anuncio de los invasores en el Salón de registros, ningún sonido de escuchaba excepto las alarmas distantes cuyas vibraciones llegaban atravez del piso a los pies de Armorhide. El miro alrededor, sosteniéndose de uno de los soportes que sostenían las luces del escenario. Una invasión? En Altihex? Y había iniciado aquí, durante su show? No era divertido. Todos evacuaron el Salón en una oleada de fuego defensivo mientras los invasores los presionaban –ignorando completamente a Armorhide. Eso tampoco era divertido. Solo tomo unos pocos ciclos. Los invasores dispararon atravez de una de las murallas interiores, su menta era desestabilizar la estación. Armorhide como uno de los residentes permanentes y visitante frecuente de Altihex, tenían sensores especialmente retroalimentados para los continuos y drásticos cambios en la presión y temperatura. Y sus sensores se estaban recalibrando, miro al último de su audiencia desaparecer. Sentinel Prime fue uno de los últimos dentro de la estación, guiado por la amenazante figura de su guardia. Quien no había reído en ninguna de las bromas de la rutina de Armorhide. Algo inusual estaba sucediendo ahí. Inusual mas allá del hecho de que una célula de renegados atacara y matara a otros Cybertronianos. Todo parecía como si hubiese sido planeado, como si hubiese algo en específico sobre Altihex y el Gran Salón para haberlos hecho sus blancos. Armorhide era solo un comediante. El nunca había querido pensar sobre política. Pero este era el tiempo en que todos los Cybertronianos necesitaban ser enfrentados con lo que se necesitaba ser enfrentado. Que podría decir él? No había guardias en el agujero en la pared exterior. No todos los Decepticons - esa era la manera en que ellos se habían nombrado?- eran Seekers. Ellos tenían que haber venido en algún otro vehículo. Manteniéndose vigilante por su posible regreso. Armorhide camino hacia el agujero y asomo su cabeza al espacio vacío. A si derecha, veía las estrellas, y pequeños pedazos de la estación flotando a lo lejos. Abajo, veía los signos de la guerra en Torus States, en el centro de Altihex. Las explosiones brillaban, las estelas de los Seekers cruzaban los cielos sobre la ciudad. A su derecha, el vio un vehículo de orbita superficial de bajo alcance magnéticamente unido a la estación. “Perfecto” dijo Armorhide, aunque no hubiese nadie más ahí que pudiese oír, y aun si lo hubiera no podría por el vacio, y si alguien lo hubiese oído no habría dicho nada porque él no quería que ningún otro Cybertroniano pensara que él hablaba para sí mismo. Excepto… “Entra a la nave, xxx,” se dijo a sí mismo, y lo hizo. Alguien en Iacon necesitaba oír sobre esto. Si él podía pasar atravez del caos y el terreno de Torus States primero. Bandlands se estrechaban interminablemente alrededor de Megatron y Starscream y ellos se conocieron cara a cara por primera vez. “La operación en Altihex salió bien,” dijo Megatron. “Jugaste tu papel perfectamente.” “Era un papel fácil. He estado cerca de Sentinel Prime como su protector por algún tiempo.” Starscream deseo que ellos pudieran ver Altihex desde las Bandlands, pero los únicos objetos visibles eran las bases lunares y el brillo de el único puente espacial que aun existía. Ninguno sabia quien lo había dejado ahí, o si seguía funcionando. Tal vez nadie lo sabría. Además de eso Starscream quería algo más. El quería llevar a los Cybertronianos al universo nuevamente… y tal vez el guiar a los Decepticons sería el primer paso hacia eso. El primer pasó guiar a los Decepticons, por cierto, incluía el aliarse con Megatron, y asegurarse de que esa alianza se realizara con los mejores términos posibles. Starscream había planeado por mucho tiempo el remover a Sentinel prime de su posición porque eso pondría su posición en disputa. La naturaleza final de esa disputa aun no estaba determinada. Megatron los miro viendo hacia el cielo. “Altihex es nuestro. Ahora cada Cybertroniano sabrá que los Decepticons son una fuerza que debe ser reconocida, y que su oposición será débil, desorganizada e incapaz de resistir.” Añadió. “Cuando la nueva historia de Cybertron sea escrita. Seré yo quien la escriba. Que parte querrán ustedes desempeñar?” “No puedes amenazarme. Megatron.” Dijo Starscream. “Si tu quieres una guerra, debes buscarla; pero si quieres ganar una guerra, me necesitaras a mí y a mis fuerzas. El Consejo desplegará su fuerza aérea, y justo ahora tu solo tienes un montón de gladiadores que no saben nada del combate aéreo.” “Estamos empates, entonces.” Dijo Megatron. “Muy bien, puedo retirarme ahora, y tu puedes tomar tus propias decisiones. Pero te advierto. La próxima vez que nos veamos la oferta no será la misma.” “Lo que hare será ir a la Estación Trypticon.” Dijo Starscream. “Trypticon?” pregunto Megatron. “y que obtendrás yendo ahí?” No lo sabes, o si? Starscream estaba complacido. Mientras el supiera algo que Megatron no, el podría mantenerse en una mejor posición… y finalmente, era el camino más corto para controlar a los Decepticons. “protegerla,” dijo. “hay mucho en Trypticon que podría ser peligroso para Cybertron si cayera en las manos equivocadas.” Megatron encaro a Starscream. Se miraron a los ópticos, sin retroceder, Starscream sabía que eso era solo bravuconería de parte de Megatron. Aun así, el podría jugar su papel. “ y estas insinuando que mis manos son las manos equivocadas?” dijo Megatron. “Yo insinuó,” dijo Starscream. “Que Cybertron necesita cambiar, pero este cambio no debe ser por aniquilación. Vigilare sobre Trypticon para asegurarme que no se llegue a eso.” Megatron se veía por un momento como si fuera a pelear. Algunos de sus sistemas de armamentos tintinaron, pero se contuvo. “Te preguntare claramente,” el dijo cuando hubo controlado su temperamento. “Starscream, estas con nosotros?” “No estoy contra ti. Megatron.” Fue la respuesta de Starscream. “No creo que debería decir más que eso. El Consejo tal vez este escuchando.” “ Aun sigues manteniendo tu apuesta? Esa es una buena manera de perder no importa que suceda. El alto consejo nunca habría imaginado que un gladiador de baja casta pudiera tener alguna ambición mas allá de la siguiente batalla,” dijo en burla Megatron. “Aun tienes rencor?” Starscream sacudió su cabeza. “Megatron si quieres ir a batalla debes pelear con la cabeza clara. Muchos Cybertronianos –aun quienes no están de acurdo contigo- no les importa de ninguna manera el sistema de castas. Te volverás contra ellos porque no comparten tu obsesión?” “Me enfrentaría con todo el universo si eso significa dejar las líneas en claro,” dijo Megatron. “Cuidado, Starscream, de que no te encuentres en el lado equivocado de esa línea.” El salto hacia atrás, asumiendo su forma alterna en la misma maniobra y se fue resonando a lo lejos. Starscream lo miro marcharse. Entonces envió un mensaje a todos los Seekers que él conocía y en quienes podría confiar. Reúnanse en Trypticon inmediatamente. Desconcertado, Megatron leyó el mensaje interceptado. Trypticon? Esa pila de desechos semiconsciente? Que podría haber ahí para Starscream que preferiría sentarse ahí en vez de tomar parte en la guerra por Cybertron? Era tiempo de algunas investigaciones. Ypara eso. Megatron penso. necesitaria la ayuda del bibliotecario
Posted on: Sun, 17 Nov 2013 21:04:44 +0000

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