CARTA DE UN PRIMO A OTRO Agustín Chale Estaba escribiendo una - TopicsExpress



          

CARTA DE UN PRIMO A OTRO Agustín Chale Estaba escribiendo una crónica de todo lo sucedido durante estos siete días pero la borré y decidí expresarme desde el corazón. Ayer se fue Santi, digo ayer porque para mí durante estos días él estuvo vivo, más vivo que nunca. Si se hubiera ido el martes 6, como dicen los "papeles", nada de lo que voy a escribir habría pasado. Primero, quiero abrazar agradeciendo a cada persona que aportó a esta causa que seguramente cambiará mi vida. Nunca imaginé que existía tanta gente solidaria. Nunca creí que una persona que no conozco, con el sólo hecho de estar presente en cierto lugar, a cierta hora, intentando lograr un objetivo en común, podía encender mi motor, el motor de la esperanza. Aprendí que ayudar es compartir, y recibir ayuda es lo más lindo que te puede pasar en el mundo. A todos ellos sólo puedo decirles GRACIAS. Sepan que a partir de hoy Santi está en cada uno de ustedes. Porque se acercaron sin conocerlo, no les importó que fueran las 12 de la noche, que al otro día tuvieran que trabajar, estudiar, cursar. Se arrimaron por el sólo hecho de ser solidarios. NUNCA me voy a cansar de agradecerles, se nos hace imposible hacerlo con cada uno de los tantos que se acercaron, o apoyaron de cualquier manera. Cada uno de ustedes sabe quiénes son y deben sentirse orgullosos de si mismos. Lo único que les importó fue colaborar con un pibe que estaba "perdido" y con su familia. Y ahora que digo esa palabra, familia, voy a referirme a ellos. A TODOS los que conocimos y quisimos a esta personita que tanto nos dejó. Porque en los siete días de búsqueda incansable fuimos una familia, la mejor y más grande de todas las familias. Eramos todos padres, hermanos, hijos, primos, tíos, cuñados y amigos. Una familia bastante loca. Y como en toda familia, siempre hay algún personaje que en el momento justo te saca esa sonrisa que necesitamos para descomprimir ese dolor que cada tanto asoma. O ese abrazo que no necesita palabras para darte fuerzas y aliento para seguir buscando a un GRAN hombre que nos enseñó tantas cosas. No hizo falta que Santi estuviera presente físicamente para hacer lo que hacen los maestros, ENSEÑAR. Primo, vos me enseñaste que en la vida hay que ser solidario. Me enseñaste que en la vida hay que ser agradecido. También me enseñaste que existe gente de verdad. Pero por sobre todas las cosas, despertaste mi corazón. Nada fue en vano, ni un segundo me arrepiento de haberte buscado. Yo estoy seguro que vos podías salir de ese lugar sano y salvo. Pero también estoy seguro que no saliste de ahí por ayudar a otra persona. Y eso es lo que me deja tranquilo. Porque ni en el peor segundo de tu vida dejaste de ser esa enorme persona que sos. Porque nunca vas a dejar de ser. Marcaste un antes y un después no sólo en mi vida, sino en la de muchos. Por algo las dos últimas personas en aparecer fueron vos y tu vecina. Justamente eran las dos personas por las que había esperanzas de que estuvieran afuera. Eso no fue casualidad. Pasó porque nadie tenía que perder las esperanzas para demostrarle a todos que cuando estamos unidos no hay barrera que no se pueda superar. Ayer te buscamos más vivo que nunca, hoy te lloramos y extrañamos, pero mañana, mañana te agradeceremos por enseñarnos, MAESTRO. Descansa en paz.
Posted on: Wed, 14 Aug 2013 18:37:11 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015