Cada vez que me pongo a pensar en lo que son los amigos, me hago mas profunda la pregunta… ¿Quiénes son, verdaderamente, amigos? AMIGOS ERAN LOS DE ANTES No tengo una respuesta cabal a eso. Creo que es sabia la Palabra que dice “No hagas a otros lo que no quieran que te hagan”, “Haz aquello que quieres recibir” y otras tantas mas del mismo tenor y calibre. Me examiné a conciencia con respecto a mi actuar como amigo. Me puse a pensar, con sobrada razón, sobre cómo me he comportado con ellos. Y vinieron a mi, claramente, algunas anécdotas que refrescaron gratamente mi memoria. Creo que amigo es mucho más que una persona que está a tu lado por cualquier circunstancia que la vida haya puesto. Creo que amigo de verdad es estar en TODO MOMENTO Y CIRCUNSTANCIA. Es cuando no es un obstaculo insalvable el hecho de la distancia. Es cuando te la juegas, literalmente, por la persona que aprecias. Hace ya algunos años, una amiga necesitaba unos lentes nuevos para poder estudiar. El problema es que yo estaba a exactamente 13,500 Km de distancia. Así y todo, logré juntar una cantidad aceptable para apoyarla y se le envió prestamente la ayuda necesaria. Otra vez un amigo que reside en otro estado de la República Mexicana, me solicitó apoyo. La ayuda no se hizo esperar, se movió cielo y tierra y se ayudó a quien lo necesitó. El amor no sólo se manifiesta a través del dinero. La actitud es la que cuenta. Parece ser que en estos días, donde si no hay dinero de por medio NO se consigue nada, el ayudar a una persona es algo que raya en la utopia. Aquellos que considera uno “amigos” resulta que no lo son tanto. Es que el amor personal, puede mas que el amor hacia los demás. Y esto me recuerda otras sabias palabras: “Aquel que quiera salvar su vida, la perderá y aquel que la pierda por causa de mi, la ganará”. Poderosas palabras, Jesús. Suicidas diría yo. Porque bajo este plan no nos queda de otra que servir a los demás sin mayor objetivo que el de brindar un poco del amor que recibimos cuando llegamos, temblando de dolor y terror, a Sus pies para clamar por misericordia. Por eso,cuando recuerdo los amigos ganados en la infancia, infaliblemente nace una sonrisa en mi rostro. Es que esos, eran amigos. Se ponian delante de uno para recibir el golpe, esquivaban chancletas a la par tuya, esas que te tiraba tu mamá cuando hacias cosas totalmente improbables en su mente y estadística. Tramaban junto a ti, los más ingeniosos planes para salir adelante en las complejas situaciones que enfrentabas en tu diario vivir. Y al final del día, si sobrevivían a la campal batalla, todo se arreglaba con un vaso de leche chocolatada y unas facturas (pan dulce) en la mesa. Tristemente los “amigos” de hoy NO son así. Se miden según la capacidad de tu billetera, o de la cantidad de gente “importante” que conoces o te codeas. ¿Dónde quedaron esos amigos? En mi caso particular, están en los recuerdos de mi memoria. Triste, pero cierto! Ya no me gusta · · Compartir · Hace aproximadamente una hora · Cada vez que me pongo a pensar en lo que son los amigos, me hago mas profunda la pregunta… ¿Quiénes son, verdaderamente, amigos? AMIGOS ERAN LOS DE ANTES No tengo una respuesta cabal a eso. Creo que es sabia la Palabra que dice “No hagas a otros lo que no quieran que te hagan”, “Haz aquello que quieres recibir” y otras tantas mas del mismo tenor y calibre. Me examiné a conciencia con respecto a mi actuar como amigo. Me puse a pensar, con sobrada razón, sobre cómo me he comportado con ellos. Y vinieron a mi, claramente, algunas anécdotas que refrescaron gratamente mi memoria. Creo que amigo es mucho más que una persona que está a tu lado por cualquier circunstancia que la vida haya puesto. Creo que amigo de verdad es estar en TODO MOMENTO Y CIRCUNSTANCIA. Es cuando no es un obstaculo insalvable el hecho de la distancia. Es cuando te la juegas, literalmente, por la persona que aprecias. Hace ya algunos años, una amiga necesitaba unos lentes nuevos para poder estudiar. El problema es que yo estaba a exactamente 13,500 Km de distancia. Así y todo, logré juntar una cantidad aceptable para apoyarla y se le envió prestamente la ayuda necesaria. Otra vez un amigo que reside en otro estado de la República Mexicana, me solicitó apoyo. La ayuda no se hizo esperar, se movió cielo y tierra y se ayudó a quien lo necesitó. El amor no sólo se manifiesta a través del dinero. La actitud es la que cuenta. Parece ser que en estos días, donde si no hay dinero de por medio NO se consigue nada, el ayudar a una persona es algo que raya en la utopia. Aquellos que considera uno “amigos” resulta que no lo son tanto. Es que el amor personal, puede mas que el amor hacia los demás. Y esto me recuerda otras sabias palabras: “Aquel que quiera salvar su vida, la perderá y aquel que la pierda por causa de mi, la ganará”. Poderosas palabras, Jesús. Suicidas diría yo. Porque bajo este plan no nos queda de otra que servir a los demás sin mayor objetivo que el de brindar un poco del amor que recibimos cuando llegamos, temblando de dolor y terror, a Sus pies para clamar por misericordia. Por eso,cuando recuerdo los amigos ganados en la infancia, infaliblemente nace una sonrisa en mi rostro. Es que esos, eran amigos. Se ponian delante de uno para recibir el golpe, esquivaban chancletas a la par tuya, esas que te tiraba tu mamá cuando hacias cosas totalmente improbables en su mente y estadística. Tramaban junto a ti, los más ingeniosos planes para salir adelante en las complejas situaciones que enfrentabas en tu diario vivir. Y al final del día, si sobrevivían a la campal batalla, todo se arreglaba con un vaso de leche chocolatada y unas facturas (pan dulce) en la mesa. Tristemente los “amigos” de hoy NO son así. Se miden según la capacidad de tu billetera, o de la cantidad de gente “importante” que conoces o te codeas. ¿Dónde quedaron esos amigos? En mi caso particular, están en los recuerdos de mi memoria. Triste, pero cierto!
Posted on: Thu, 22 Aug 2013 18:21:40 +0000
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