Con todo respeto señora Presidente… el Himno Nacional no se - TopicsExpress



          

Con todo respeto señora Presidente… el Himno Nacional no se baila y Belgrano no sería kirchnerista Todos, estamos a una distancia sideral de ese hombre, abogado como usted, que llegó rico al Generalato y murió pobre. Un hombre que no hubiera bailado el himno al ritmo de cumbia ni multiplicado por 1000 su fortuna personal. Ningún argentino que conozcamos está a la altura de ese hombre. Y debe haberlos, pero no lo conocemos. Quizás, ese pibe de 12 años de Córdoba que vendía copos de azúcar en la cancha (ver en “Buenas Noticias” de esta Web) y que uso todos sus ahorros para que su hermana jure con una bandera deshilachada. Señora… alguien le debe haber dicho que versionar el ritmo del Himno Nacional con ritmo de cumbia es progresista y que bailarlo también. Y no es cuestión de ser conservador o progresista. Ni siquiera es cuestión de las distintas versiones del himno. Aún la de Charlie García es sumamente respetuosa. Se trata de que el himno no fue escrito ni compuesto para que sea un show. Y que sus párrafos como… “o juremos con gloria morir”…, no fueron pensados para darles ritmo de cumbia y que la máxima investidura de la República, o sea usted, lo contonee mientras se toca el corazón. Todo el país sabe de su especial aprecio por el grupo “Choque Urbano”, sus tamboriles y sus reminiscencias con la cumbia. Música de origen colombo pañameño que desde 1940 se metió en las venas de toda la América latina con sus propios estilos desde el Brasil, Uruguay y Argentina. Pero esto no viene al caso. El himno cuando se interpreta exige un especial respeto tanto desde las formas como desde el fondo de su representación. Un viejo dicho dice… “las formas no hacen al fondo pero ayudan a construirlo”. Siempre. Y más aún si lo que se conmemora es la muerte de ese gran abogado, político y militar que fue rico y murió pobre porque uso su propia plata para financiar el ejército del Norte, nunca le pagaron los salarios de General y encima fundó escuelas. Este hombre ni siquiera pudo pagar el médico en sus horas finales. Señora, en esta argentina, cruzada por odios, agresiones, descalificaciones, un oficialismo de obediencias debidas, una oposición con pocos gestos de grandeza y una historia militar reciente de asesinatos y perdida de libertades básicas, decir que Belgrano habría sido kirchnerista, es de una falta de respeto que solo se puede entender cuando se baila el Himno Nacional. Señora, usted como abogada debería ser la primera en saber que Belgrano, al igual que San Martín se negó a usar el ejército patrio para combatir a sus propios conciudadanos. A pesar de las órdenes. Para este hombre habría sido más fácil la “obediencia debida”, recibir el dinero del gobierno central y no gastar su fortuna personal, antes que negarse a matar argentinos. Debería reflexionar profundamente sobre esto. Por usted y por los jóvenes que la ven y esperan su opinión para construir la propia. Esa es una responsabilidad muy grande. No es solo la ventaja de tener una quinta presidencial, aviones y protocolos que el resto de los argentinos no tienen. Es también saber que el impacto de sus palabras y de sus acciones se reflejará en las vidas cotidianas de quienes la aman y de quienes no la aman. Oid mortales el grito sagrado, libertad, libertad, libertad. Oid el ruido de rotas cadenas… ¿Le parece señora Presidente que estás son palabras para bailar al son de un Himno con ritmo de cumbia? Y no es que no me guste la Cumbia. De hecho me encanta. Es que es el Himno Nacional. Ese que nos conmueve, el que cantamos cuando son los actos patrios o cuando alguna situación nacional de esas impensadas nos provoca a cantar el Himno porque sentimos que es casi la única música y letra que nos totaliza a todos, que no pregunta signos partidarios ni ideológicos. Como si supiéramos que mientras se canta nada nos pasará. En resumen señora Presidente, bailar el Himno Nacional no es progresista ni moderno. Ni con ritmo de cumbia, ni de rock ni con un minué. No es divertido verla bailar el Himno cumbia contoneándose mientras se toca el corazón y el vicepresidente Boudou se sonríe abiertamente, como si fuese un espectador de su show personal. Lic. Rodolfo Patricio Florido pdeqdigital/index.php/analisis-de-las-noticias/noticias/editorial/5454-con-todo-respeto-senora-presidente-el-himno-nacional-no-se-baila-y-belgrano-no-seria-kirchnerista
Posted on: Sat, 22 Jun 2013 22:24:11 +0000

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