Cuando una sociedad se ufana del delito o festeja a quienes lo cometen, se sumerge en el peor de los desamparos y acepta con sumisión un destino miserable. Porque cuando se subvierten los valores, aquello que la conciencia nos imponía como repudiable, termina siendo un mérito más en el camino a la Presidencia. Tal vez los países, al igual que el hombre, puedan tropezar dos veces con la misma piedra, y perdida la virtud , ya no interese qué tan bajo se caiga. Porque si los vulgares delincuentes de ayer se dan el gusto de gobernarnos hoy , quizás los vulgares delincuentes de hoy se den el gusto de gobernarnos mañana. HENRY FORD _____________________________________________________________ Ancap gastó 4 veces más de lo previsto en la nueva planta El 27 de agosto pasado, se inauguró con gran pompa la planta desulfurizadora de ANCAP. Al acto asistió la Presidenta Argentina Cristina Fernández, acompañada por una comitiva de La Cámpora y sus bombos, y su cohorte encabezada por el Presidente Mujica sus ministros, legisladores, embajadores y todo aquél que se precie de”estar”. Bajo una enorme carpa, al mejor estilo de las grandes fiestas burguesas, todo era sonrisas y anuncios grandilocuentes. Así, nos enteramos que estábamos en el primer mundo en cuanto a la calidad de nuestros combustibles y el cuidado del medio ambiente por la drástica disminución de gases en la atmósfera. El 7 de setiembre, 11 días después de inaugurada, se informaba que “el sector gasoil de la planta está paralizado y permanecerá inactivo por lo menos un mes y medio por la rotura de un intercambiador” La planta, más allá que su construcción es necesaria por la compra del petróleo a Venezuela, de pésima calidad, frente a los livianos que se adquirían con anterioridad, tuvo una proyección de costo entre 80 y 100 millones de dólares. En resumen: La planta fue realizada por una subsidiaria de YPF y su costo final fue de casi 400 millones de dólares. financiados por ANCAP (por nosotros) No se sabe que garantías existen sobre su funcionamiento y sus repuestos. Es obvio que si fuera normal o esperable esa rotura- como puede ser una lamparilla en un automóvil- habría repuestos en la planta ANCAP. El Presidente de ANCAP, Raúl Sendic no ha dado mayores explicaciones, y tiene razón en no darlas, porque tendría que explicar lo inexplicable.
Posted on: Sun, 15 Sep 2013 21:09:18 +0000
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