DESDE ÉL INFIERNO FUCHU TOKIO---------------------------------------------------------------------- No tenemos derecho acostarno durante el día. A las ´6`45 de la mañana nos despiertan a todo el mundo. Hay que levantarse, hacer la cama, lavarse y comer muy rapido.No tenemos derecho acostarno durante el día...Un dos, tres cuatro cínco... catorce horas de caminatas. Para adquirir el automatismo de ese movimiento continuo, hay que aprender a bajar la cabeza, ponerse firme no andar ni demasiado de prisa ni de masiado despacio, los pasos exactamente iguales y girar automaticamente, y sobre todo a pedir disculpa o perdón por el sólo mero de ser un hombre.El presidiario que incluso cuando está en libertad oye sus grilletes y cree en todo instante que alguien lo vigila, que todo cuanto he visto y pasado y aguantado todo lo que he sufrido, todo lo que me conducia a ser un hombre tarado, corrompido, peligroso en todos los momentos, pasivamente obediente en la superficie y tremendamente peligroso en su reveldía ¿ Uno cree que podrá aguantarlo volverse loco por el completo aislamiento? Yo ahora en está celda donde estoy sólo sín libros, sin salir sin poder hablar...un dos, tres, cuatro, cinco, media vuelta... un dos tres, cuatro, cinco, medía vuelta. Llevo ya varias horas dando vueltas, desde la puerta a la ventana.El más absoluta silencío.De vez en cuando, u leve > en la puerta. es él policia qué, calzado con zapatillas para no hacer ruido. Está celda, este silencio te lleva a la locura. De golpe, un grito de desesperación, agudo horriblemente angustioso, logra a trvesar la puerta de mí celda ¿ que pasa? Estos gritos en la noche me han sobrecogido. hablo sólo en voz alta y pregúnto. Muy impresionado por él grito desgarrador doy vueltas como una fiera enjaulada. En verdad tengo la plena sensación de estar literalmente enterrado vivo. Sí, estoy muy sólo todo lo que me llega no sera nunca más que un grito. Todavía estoy en el camino de la podredumbre, pero aúnque en el fondo de mi celda de castigo. Resulta duro. Mí cerebro vagabundea, sueña con el pasado y recrea proyectos de color de rosas para el porvenir. A mí alrededor, muchos suicidas y locos furiosos a los que peor suerte no tardan en llevarse.Es deprimente oír gritar, lamentarse o gemír durante horas y días enteros. Aquí con las manos moratadas por el frío y por las heladas, aquí él miedo nos puede hacer ver las cosas al revés. Sí aquí el aislamiento en este momento, es más dificíl aún de soportar que antes. Estoy en un estado de ánimo tal que ni siquiera necesito cerra los ojos para vagabundear tanto en el pasado como en el presente. Nada adsolutamente nada psíquico o material impediria mis viajes deliciosamente teñido del rosal de la felcidad cuando despliego las alas hacia las estrellas.Despacio, muy despacio, van pasando las horas los días las semanas, los meses.
Posted on: Sun, 15 Sep 2013 11:01:56 +0000
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