Desde ayer, tengo una inconformidad, un disconfor profesional… Desafortunadamente, hay unos procesos asistenciales, que seguir y respetar cuando se es dependiente, así una se sienta capaz y sepa que es lo correcto. No es el diagnóstico lo importante en algunos casos, lo vital es conocer y saber cuando, como se debe actuar para preservar la vida de un paciente. Paciente con emergencia hipertensiva, por procesos, debe ser conocida por el especialista en turno. Este, estaba cansado (era la hora del final de turno), presento el paciente y muestro el electrocardiograma, sin levantar la mirada del teclado, la respuesta: “Si alcanzo, lo veo”. Hice el comentario característico: “Y eso que Cobo es la única grosera, detrás de ella la fila es larga”. Cuando ya tenía todo ordenado, tratamiento iniciado y ordenes dadas, en forma imperativa me solicita le traiga el EKG que ya le había mostrado, y que él en su prepotencia ni siquiera miró. Ni siquiera un gesto de cortesía, ni de respeto como profesional, como ser humano, como colega, como mujer le inspiré al señor en comento. Conclusión, como solía decir mi mamá: “Lo que natura no da, Salamanca, no lo presta”
Posted on: Fri, 30 Aug 2013 14:45:23 +0000
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