Dios es eterno y no esta restringido o limitado por el tiempo. Dios no tiene principio ni tiene fin y el tiempo no le afecta a El, no lo cambia, ni lo apresura, ni lo atrasa. La existencia de Dios no depende del tiempo porque Dios no esta sujetado a las leyes del tiempo que El creo. Dios creo el tiempo en el universo para su creación, por lo tanto todo lo que ha sido creado por Dios tiene un principio y un fin. Todos en un momento nacimos pero también sabemos que la muerte es una realidad que no podemos evitar pues la vida y la muerte son parte de nuestra existencia terrenal en este mundo. Aun los mismos cielos y la tierra que fueron creados por la Palabra de Dios en el principio llegara el momento que también pasaran porque todo en este mundo es pasajero, temporero, y de corta duración. Dios creo el tiempo por causa del hombre. Por causa del pecado el hombre tiene una existencia temporera aquí en la tierra, pues si no existiera el pecado el tiempo tampoco existiría porque seriamos seres eternos y no experimentaríamos la muerte y por lo tanto el tiempo no importaría. Como la muerte es una realidad ineludible pues el tiempo es necesario para darle importancia a la vida corta que tenemos en este mundo. Reconociendo que tenemos un tiempo corto sobre la tierra, nos hace entender la importancia de la vida y a apreciar cada momento. El tiempo hace que valoricemos la vida que tenemos porque cuando el tiempo se pierde no se puede recuperar. El tiempo puede ser nuestro mejor aliado o puede ser nuestro peor enemigo todo depende de como nosotros manejamos el tiempo y de nuestra actitud. Dios creo el tiempo también con el propósito de glorificarse en la vida del hombre, para dejarle entender Su propósito y para El desarrollar su plan perfecto para la humanidad. Muchos dicen que el tiempo los mata pero la realidad es que el ser humano mata el tiempo porque no sabe redimir, ni aprovechar bien el tiempo que Dios les ha dado. Somos mayordomos del tiempo que Dios nos ha dado y tenemos que utilizar el tiempo sabiamente porque no tenemos una maquina de tiempo para viajar al pasado para cambiar las cosas que nos sucedieron, o para cambiar las cosas que no pudimos hacer o lograr en algún momento determinado de nuestra vida. Debemos invertir nuestro tiempo en las cosas celestiales y eternas de Dios porque vivimos en un mundo en el cual muchos pierden su tiempo en actividades, obras, diversiones, y placeres inútiles que no les permite valorizar el tesoro del tiempo que Dios nos ha dado. En El Salmos 31:15 declara: "En tu mano están mis tiempos;". Debemos depositar nuestra vida y nuestro tiempo en las manos de Dios para maximizar el uso de nuestro tiempo para glorificar y hacer la voluntad de Dios en vez de perder nuestro tiempo absorbidos en las cosas terrenales de la vida. En Salmos 90:12 Moisés dice: "Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, Que traigamos al corazón sabiduría." Moisés le pidió a Dios sabiduría para utilizar sabiamente el tiempo que Dios le había dado. Pongamos nuestro tiempo en las manos de Dios y pidamosle a Dios que nos enseñe utilizar el tiempo que tenemos sabiamente para alcanzar sabiduría. Cada segundo, minuto, hora, día, semana, mes, y año que pasa no se puede recuperar pues ya es parte de la historia. Pero si depositamos nuestro presente y nuestro futuro en las manos de Dios podemos darle el mejor provecho al tiempo. Muchos sienten que el tiempo es como un predador esperando devorar nuestra vida en cualquier momento pero mejor es pensar del tiempo como un compañero que nos acompaña en la jornada hasta la eternidad. Para el justo y el hijo de Dios el pasar del tiempo no es motivo de tristeza ni de temor porque nos acercamos mas a la eternidad con Cristo pero para aquellos que no tienen la seguridad eterna el tiempo es su peor enemigo porque viven inseguros y su vida puede ser cortada en cualquier momento sin salvación. En Efesios 5:15-17 dice: "Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor." El sabio mide su tiempo y lo aprovecha a lo máximo para agradar y hacer la voluntad de Dios, pero el necio y el insensato no es buen mayordomo del tiempo, no lo utiliza para su provecho sino para el mal y para hundirse en el pecado. Estamos viviendo en tiempos malos, y peligrosos en el mundo. Las señales del tiempo en el mundo nos indica y nos deja entender con claridad que Cristo esta a las puertas y pronto ha de levantar a su iglesia. Si podemos discernir las señales del tiempo en el mundo físico tenemos que también discernir las señales del tiempo que por la Palabra nos deja entender que Cristo viene ya. Muchos desperdician su tiempo concentrándose en ellos mismos, en su vida, en sus logros, en sus metas, y en todo lo que quisieran alcanzar materialmente antes de morir pero el tiempo para el cristiano es un tesoro que cuidamos y utilizamos cada día para darle toda gloria, honra, y alabanza a Dios. A Satanás le encantaría que usted perdiera el tiempo enfocado y distraído por las cosas terrenales y materiales de la vida para quitar tu mirada de Dios y de Su propósito en tu vida. Satanás es ladrón y también te quiere robar el tiempo para que no le dediques a Dios tiempo de adoración y comunión intima. Cuantas cosas hay en nuestra vida diariamente que nos desenfoca, nos entretiene, y nos distrae de la voluntad de Dios? Muchos decimos que no tenemos tiempo porque estamos muy atareados y ocupados. Nosotros somos los que tenemos que dominar el tiempo y no permitir que el tiempo nos domine y nos esclavice a nosotros. Que cosas hay en nuestra vida que no nos permite madurar, crecer, y desarrollarnos espiritualmente que están ocupado el tiempo que Dios se merece? Todo aquello en la vida en el cual enfocamos nuestro tiempo se convierte en un ídolo en nuestra vida y la Palabra claramente enseña que los idolatras no heredaran el reino de los cielos. Muchas veces pensamos que tenemos todo el tiempo en el mundo para hacer lo hoy no podemos hacer ni queremos hacer. Muchos creen que el día de mañana esta garantizado pero no saben que nuestra vida es como una flor que se marchita, como la neblina que se disipa, y como la sombra del día que deja de ser. Es hoy que tenemos que entregar nuestra vida y nuestro corazón a Cristo completamente. No hay seguridad ni garantía para el día de mañana. Hoy es el día de salvación pues no malgastes el tiempo creyendo que mas luego podrás arrepentirte porque mañana puede ser muy tarde. Si vives para Cristo el tiempo es tu mejor aliado pero si vives para gastar tu vida en las cosas del mundo el tiempo es tu peor enemigo.
Posted on: Thu, 29 Aug 2013 20:27:54 +0000
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