Dos Cosas Te He Demandado Dos cosas te he demandado; no me las niegues antes que muera: vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; no me des pobreza ni riquezas; manténme del pan necesario; no sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? o que siendo pobre, hurte, y blasfeme el nombre de mi Dios. (Proverbios 30:7-9 RVR60) Las palabras de Agur, encierran una sabiduría que merece hacer una pausa y meditar en ella. Le dice a Dios: "Dos cosas te he DEMANDADO". Primeramente tenemos que comprender y entender qué es DEMANDAR. Demandar, significa "pedir, rogar".1 y Rogar significa "instar con súplicas".2 Parafraseando de otra manera: DIOS TE SUPLICO QUE... Notemos que su primera petición es que Dios aparte de él la vanidad y la palabra mentirosa. El ser vanidoso implica ser arrogante y presuntuoso. En otras palabras es alguien que utiliza palabras vanas, inútiles e insustanciales. Es decir, posee una vana representación, ilusión o ficción de la fantasía.3 El vanidoso vive en su propio mundo, donde él es el centro de atención de todo y para todo. Al mismo tiempo le pide a Dios que le ayude a hablar siempre la verdad. San Pablo nos dice: "No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos, (Colosenses 3:9 RVR60)". Sí, cómo nos cuesta hablar con la verdad. Ignoramos o cerramos los ojos al hecho de que por cada mentira que sale de nuestra boca, cavamos nuestra propia tumba. La segunda petición de Agur, es un balance económico. Las finanzas es algo que debiera ser una prioridad. El aprender a administrar los recursos que Dios pone en nuestras manos es una prioridad como buenos administradores que Dios desea que seamos. Señor, dice Agur, dame exactamente lo que necesito. ¡Cuánta sabiduría! Ahora leamos lo que nos dice Jesús, cuando enseño a sus discípulos a orar. "El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy."4 En esa misma línea, el apóstol San Pablo nos dice: "No lo digo porque esté necesitado, pues he aprendido a estar satisfecho en cualquier situación en que me encuentre. Sé lo que es vivir en la pobreza y lo que es vivir en la abundancia. He aprendido a vivir en cualquier circunstancia: tanto a quedar satisfecho como a pasar hambre, a tener de sobra como a sufrir por no tener nada. Todo lo puedo en Cristo que me da fortaleza."5 Hablamos de un balance donde lo más importante es la voluntad de Dios para mi vida. En el Reino de Dios, hay ricos y pobres. Material y espiritualmente. Por lo general el rico materialmente es pobre en lo espiritual y el pobre en lo material es rico espiritualmente. No es una regla, pero, en su mayoría así parece. En Dios no existe el rico y el pobre. Unos necesitan ser pobres y otros necesitan ser ricos para que ya sea por uno o por el otro, ÉL sea siempre glorificado. Ricos: Abraham, Isaac, Jacob, David, Salomón, Juana6, Zaqueo, José de Arimatea, Cornelio7, etcétera. Pobres: Jesús, Juan el Bautista, la mayoría sino todos los 12 apóstoles8, Pablo, etcétera. Tanto unos como otros glorificaron a Dios con todo lo que tenían. Quiero dejar claro que el dinero no es el problema. El grave problema es EL AMOR AL DINERO.9 Cuando llegamos a reconocer que nuestra verdadera riqueza es Cristo, todo lo demás sobra. Por eso Pablo dijo: "Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos. (2 Corintios 8:9 RVR60)" PRÁCTICA: Señor líbrame de la vanidad, de tener una lengua mentirosa y ayúdame a reconocer la verdadera riqueza en Tí. 1 - DRAE - Diccionario de la Real Academia Española. 2 - DRAE - Diccionario de la Real Academia Española. 3 - DRAE - Diccionario de la Real Academia Española. 4 - S. Lucas 11:3 RVR60 5 - Filipenses 4:11-13 NBD 6 - Juana, mujer de Chuza intendente de Herodes, y Susana, y otras muchas que le servían de sus bienes. (S. Lucas 8:3 RVR60) 7 - Había en Cesarea un hombre llamado Cornelio, centurión de la compañía llamada la Italiana, Él, mirándole fijamente, y atemorizado, dijo: ¿Qué es, Señor? Y le dijo: Tus oraciones y tus limosnas han subido para memoria delante de Dios. Ellos dijeron: Cornelio el centurión, varón justo y temeroso de Dios, y que tiene buen testimonio en toda la nación de los judíos, ha recibido instrucciones de un santo ángel, de hacerte venir a su casa para oír tus palabras. (Hechos 10:1, 4, 22 RVR60) 8 - Posiblemente Mateo sea una excepción. 9 - Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores. (1 Timoteo 6:10 RVR60)
Posted on: Sun, 15 Sep 2013 07:36:22 +0000
Trending Topics
Recently Viewed Topics
© 2015