El Psicoanalista y su hijo. Me lo crucé por casualidad en una librería. Me había cansado de leer a Miller, a Lacan, a Freud y empecé a pensar seriamente en desarrollar la idea del “Destino simbólico” como nueva dimensión de la existencia. Estaba en la etapa de recolección de libros, datos, fuentes, y charlamos de un libro, el del Christopher Bollas, "Fuerzas de destino" que me había dejado impactado. Pero mucho más el de Schopenhauer o el de Simmel y su idea de destino o también Spengler y su idea de que en humanística no podemos hablar de causas y consecuencias, que debemos hablar de Sino, Destino....Me miró con "ojo clínico" y tuve miedo de que haya comenzado su diagnóstico hacia la psicósis, el delirio, ¡Vaya, un delirante sobre el Destino¡. Me dicen si tengo tiempo, asi tomábamos un café mientras debatíamos sobre el psicoanálisis. Me dice que su pasión es la psicósis, que ha leído desde Falret y Pinel hasta el organodinamismo de Ey. ¡Genial¡ me dije, un fanático del psicoanálisis de la psicosis y nada mejor de alguien ducho para dar entender lo que ahora voy a ir explicando. Mientras él y su hijo hablaban desde una posición que no es la un otro simple, ni de amo, sino de una escucha atenta, comencé a indicarle de mi pasión por el destino. Y para sacarlo de la atención flotante y la escucha, les indiqué que la Mayéutica es mi preferido en materia de indagación critica o deconstructiva de un tema. De modo que comenzaron a preguntar. Les dije que Freud había indagado sobre el destino y se miraron sorprendidos. Pero cuando cité "Más allá del principio del placer, capitulo III", la cosa cambió. Además, les dije que los divorcios son producto del automatismo significante, y de su más allá, la compulsión de repetición, de la que sacamos la compulsión de destino.....y que tanto Bollas como otros, incluso Soler, Miller y el propio Lacan creían en el destino como la zona enigmática del psicoanálisis. Me pregunta sobre el divorcio y el destino, que era su problemática reciente, por eso andaba con su hijo buscando rumbo. El rumbo está en tu inconsciente le dije, el lenguaje te pauta una vida...y relaté varios casos de divorcios parecidos al suyo. En cada relato intercalé conceptos psicoanalíticos que confirmaban la existencia del destino como constructo lingüístico y orientaba todo hacia lo imposible de entender a los grandes del psicoanálisis desde una certeza como muchos acostumbra. Comenzó a nombrarme textos, y para cada concepto había un caso, una elaboración y una relativización del discurso del maestro Lacan...hasta él se había divorciado¡¡¡ y había repetido el destino no solo de Freud proscrito sino de Spinoza, y sin contar los detalles de su linaje. El chico se levantó, fue a pedir un libro y buscó la página que yo había dicho: " A propósito del destino de Hamlet"...en uno de los seminarios...Luego seguimos con el destino del famoso "Hombre de las ratas" donde el mito estructurante era el destino escrito de éste sujeto. Mientras él se dedicó a buscar el objeto a, estructuras, síntomas....su destino se había cruzado para llevarlo como a Tancredo a matar dos veces a Clorinda.....luego seguimos pero a nivel epistemológico, otro campo que me apasiona. Aquel psicoanalista divorciado, había dejado de pensar que la estructura histérica de la mujer lo dejó solo: su destino era estar ahí sentado ésa tarde y encontrarme a mí para que pudiera surgir de ése mal encuentro lo escrito en su inconsciente y que era su destino.
Posted on: Sun, 14 Jul 2013 00:08:21 +0000
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