El beso de Frida Kahlo Eran esos besos, cuando mi alma se acercaba a la tuya. Se detenía generoso el tiempo, desistía en mí, los pensamientos. te pintaba una luz púrpura en la boca, bebía de tus labios, y volcaba en tu paladar, bocanadas azules de agua de mar. Enrojecías mis mejillas, de un tibio rojo tenue, y penetrabas en la piel, candente de emociones. Abría mis alas y te sostenía, en un sin fin de silencios, solo los latidos acompasados, de nuestros corazones, nos traían de vuelta, al mundo real, ese que del que escapábamos en un abrazo contemplativo. Era mi admiración por ti, mi sostén de la cordura, era mi locura la que sostenía, tu inspiración. Eramos solo eso, dos almas libres. Te tenía en mí en esos instantes, eternos en mi memoria. Dulce niño grande, eso eras para mí. Te besaba, en ese mismo instante, creabas en mi cabeza mil acuarelas de figuras angelicales, elevabas en mí la inspiración, plasmándola hacia mi alma. Atesoré tus besos como un regalo, qué más podrías ofrendarme, si ese era todo mi anhelo, tan solo tú
Posted on: Sat, 02 Nov 2013 05:05:45 +0000
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