En Mexico durante más de 55 años hemos intentado, con más fracasos que éxitos, promover el desarrollo rural basado en el paternalismo gubernamental. Por esta razón de fondo, ya no tiene ningún sentido seguir derrochando recursos escasos ni ilusionándonos con utopías paternalistas que, a todas luces, han demostrado ser no factibles y no eficaces. Necesitamos ser más objetivos, realistas y pragmáticos en el sentido de entender que, en la era de la globalización de los mercados, el éxito económico de los productores rurales depende cada vez más de conocimientos adecuados que de créditos abundantes; asimismo depende cada vez más de las correctas decisiones y desempeños productivos, administrativo-gerenciales y comerciales de los agricultores/ganaderos, que de los improbables/insuficientes apoyos materiales o crediticios gubernamentales. De los endeudados y debilitados gobiernos de los países latinoamericanos es muy poco lo que los productores rurales pueden esperar. Porque los gobiernos, aunque quieran/quisieran, no están en condiciones de solucionar a través de reiterados subsidios, créditos, refinanciaciones y condonaciones de deudas, todos los problemas de todos los agricultores/ganaderos, año tras año; esta afirmación es categórica pero inobjetable. Insistir en el ineficaz y agotado paternalismo gubernamental significa perder tiempo e ilusionar a los productores rurales con utopías. Consecuentemente solo nos queda la alternativa seria y realista de "eficientizar", profesionalizar y "cooperativizar" a los productores rurales para emanciparlos de la dependencia de las ayudas materiales y financieras de sus gobiernos. Dicha emancipación se logra formando, capacitando y organizando solidariamente a los agricultores/ganaderos para que sepan y puedan progresar económicamente, aplicando de manera correcta y gradual medidas "eficientizadoras" que sean acordes a los recursos que ellos realmente poseen.
Posted on: Wed, 31 Jul 2013 14:43:44 +0000