Es el momento de partir. Desde hace tiempo estoy persuadido de eso: Debo partir. Estoy en esa búsqueda ya. Mas no sé a qué lugar partiré. Eso lo desconozco por completo. Y creo incluso que es un lance de dados que se dará en el margen del tiempo, en un chispazo, en un golpe. Será como estar en los muelles de Liverpool, en vigilia, rodeado de gaviotas curiosas, y solo en espera del primer barco que se despegue de los embarcaderos. Ese barco es el elegido sin importar el destino. Esto, porque tengo muchas cosas por hacer que son de alto valor para mí. Es mi tiempo. Escribir no solo es habilidad para escribir. La habilidad para escribir solo nos da la posibilidad de ser buenos escribanos o apuntadores del gran Faraón. Escribir exige además una gran riqueza de imaginación para construir estructuras vitales ingeniosas a partir de la experiencia acumulada. Este es el quid de escribir. Replicar el mundo con una intencionalidad personal en una gran estructura imaginaria. Cuando hablo de estructura general del ingenio, me refiero a: exordio, arranque, desarrollo general y cierre. Con cierre me refiero a la dirección y contenido de tu mensaje. Lo que viene después de esa estructuración o esbozo es la trama en la escritura con estilo determinado. Es tejer los hilos de las palabras a partir de la estructura general. A lo largo de los años he acumulado una cantidad ingente de estructiras o esbozos. Supongo que cada día esbozo una trama y la mando al archivo, donde mis sueños son la materia prima fundamental. Y ahí están. Ahí permanecen. Hoy, mi sueño, que ya describí abajo, me dio otro esbozo. Y el de ayer me dio otro a tal grado que hasta lo bauticé por adelantado: "Los impredecibles". Un fragmento de la realidad de nuestro país al estilo de lo que que yo llamo antiutopía. Jamás he podido poner manos a la obra en los esbozos acumulados por múltiples causas: la mayor parte de mi vida por exceso de trabajo, la otra parte por exceso de problemas. Mas nunca ha llegado ese momento de paz y serenidad que me permita empezar a tomarlos. Hoy en día tener que escribir para mis ex amos y la idea de mi página de internet también me robaron espacio. Sin embargo, y a pesar de esto último, parece que la vida me lleva poco a poco a una situación favorable por lo que dije al abrir este comentario: Tengo que partir. Y tal vez sea lo mejor. Tal vez es el momento de estar lejos de todo, trabajar en algo muy concreto y sencillo que solo te robe un horario determinado en tu vida, y el resto dedicarlo a lo que pretendo desde tiempo ha. Por eso no me asusta ni me conmueve saber que tengo que partir. Solo me dejaré llevar por el viento de la tarde, cual si fuera un ramillete de listones en el pelo de Rebeca.
Posted on: Sat, 20 Jul 2013 18:57:05 +0000
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