Es el nombre de la sagrada voluntad de nuestros gobernantes la desdicha de miseria que opaca nuestra nublada visión. Consideran la rebelión como un síndrome desmesurado que roba el ejercicio y lo contrapone a los derechos establecidos antes que a nuestros propios derechos. Nuestra integridad es lo que se enfrenta a muchos de los méritos que parecieran ser fracturados. Estamos tan ocupados protegiendo ese centímetro de espacio en el que nos consideramos libres que no nos damos cuenta que las mentiras que hemos aceptado están siendo vueltas verdad. ¿Cómo se les ocurre llegar al extremo de una rebelión sin tomar en cuenta los ideales que nunca en la historia han muerto? Llámense como se quieran llamar, los ideales son más importantes que un mísero luto a las verdades corrompidas. Somos la viva imagen de una mentira artística... una verdad, escrita antes de contemplar el conocimiento de nuestros años, en un encuadernado blanco y discreto que fascinó al mundo por escuchar la última escencia de nuestros ideales. A tal grado hemos llegado que... hemos perdido el significado de este escrito antiguo que traduce el actuar de nuestras propias metas... Somos el libre albedrío de una sociedad tambaleante que sollosa ante el incierto futuro y seduce con ganas los escobros del presente. Ojalá no llegue el momento en que debamos tener miedo de la verdad... ¿Valor o miedo? He ahí la cuestión... .:[Victor Hugo]:.
Posted on: Wed, 18 Sep 2013 03:31:25 +0000
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