Ese hombre era para poner nerviosa a cualquier mujer. Era cirujano. Y como me gustaba verlo con ese ambo blanco! - esa ropa marcaba su cuerpo musculoso, que despertaba muchas fantasías. No niego que más de una vez me toque pensando en él. Me imaginaba que abusaba de mi...veía sus manos manoseando mis tetas, metiendo sus dedos en mi vagina, mientras yo le daba mi examen... pensar eso me excitaba mucho. Y hoy tendría que estar con el hombre de mis fantasías contestando a sus preguntas. No sabía como iba a vestirme, así que pensé en ir lo mas femenina posible. Me puse un vestido blanco con flores en la falda y un escote discreto, como para mostrar un poco el comienzo de mis senos. Un make up suave, sandalias y por supuesto lo que mas me gusta... perfume! y esta vez de vainilla... por todos lados.. Ya estaba lista. Me mire la espejo y estaba radiante para la ocasión: - Hoy es mi día! me dije. Llego mi turno en le examen y ahí estaba el doctor Martín. Como siempre tan impecable. Me miro fijamente y sus ojos recorrieron toda mi anatomía, me estaba desvistiendo con la mirada. Me pidió que me sentara y obedecí. Me pregunto si estaba bien. Mi corazón saltaba por mi boca y mis manos transpiraban. Sentí el calor subir por mi cuerpo, lo mire y abrí un poco mi guardapolvos, puse mi mano en mi pecho y le dije: - No! - no me siento Bien!- - Usted me pone nerviosa! - Dije Sonrió y me tomo discretamente de la mano. - Ok!- Dijo. - Vamos a hacer algo para que te relajes y veas que no te voy a comer!- -Ahora... te apruebo! - pero antes de irte, quiero que pases por mi oficina..ok? - - Puedes retirarte- me dijo y me guiño el ojo como en complicidad. Respire profundamente, salí rápidamente, mientras todos me preguntaban como me había ido. No podía pensar en otra cosa que no sea en ese hombre. En el calor de su mano tomando la mía y en que querría conmigo después. Fui al pasillo donde estaba su oficina y lo esperé. Estaba dispuesta a todo. El llego después de una hora, me miro y me saludo, saco las llaves y abrió la puerta, invitándome a pasar. Al entrar me di vuelta, me abalance sobre él y lo besé. El respondió de inmediato. Nos abrazamos y besamos apasionadamente.Sus manos ardientes bajaron por mi espalda y apretaron mi glúteos. Sentí su miembro duro apoyarse en mi pubis. Comencé a des vestirle, le saqué la chaqueta y el pantalón, tenía un bóxer blanco, su cuerpo bronceado me invitaba a besar cada centímetro de su piel. Mis labios empezaron a bajar por su cuello, sus hombros, me detuve en sus tetillas, jugaba con mi lengua en ellas y las mordía suavemente, mientras mis manos lo acariciaban, bajando hasta tomar su preciosa pija. Me arrodille y puse su miembro en el borde de mis labios mientras el jugaba con sus dedos en mi cabello, me miraba ansioso por sentir la humedad de mi boca. Empecé a besar y chupar su pene. Mi lengua jugueteaba haciendo círculos en le glande, metía la puntita en su agujerito y el gozaba. Me preguntaba si me gustaba. - Y si me gustaba! - Lo miraba a los ojos con lujuria y le decía: - si amor...me gusta! - Metía sus testículos en mi boca y los chupaba, mi mano lo pajeaba y volvía a meterla toda. Quería toda esa pija bien dura toda para mí. La tomaba con una mano y pasaba mi lengua de la base hasta la punta como saboreando un helado. Estaba disfrutando ese momento. Era mi juguete, mi bombón lleno de dulce de leche... El me levanto y arranco mi vestido, me tiro sobre el escritorio abrió mis piernas, separo con sus dedos mi cola less y comenzo a chuparme. Su lengua era muy buena jugando en mi vagina...mordisqueaba mi clítoris con suavidad y me hacia delirar, le suplique con locura que me penetrara, pero él más me chupaba, estaba la límite, mojada...entregada. Sentí como un orgasmo intenso subía por mi cuerpo. Quería más!....más... Volví a tomar la iniciativa y lo mire a los ojos, busque su pene erecto, lo hice acostar en el suelo y comencé a masturbarlo, con mi boca y con mis manos. Me pidió que me diera vuelta para seguir chupandome.. le gustaba el oral y era bueno para eso!...metía su lengua en mi vagina y en mi ano, me hacia delirar de placer. Nos paramos nuevamente, apoye mis manos en el escritorio, separe mis piernas y le pedí que me cogiera. Puso la punta de su pija en mi concha y empezó a penetrar me suavemente. Mis caderas se movían al ritmo de ese miembro entrando y saliendo a mil. Me gustaba nuestros movimientos, comencé a sentir como mis orgasmos comenzaban a venir uno tras otro. Le pedí que mordiera mi espalda. Me gusta esa mezcla de placer y dolor. Mis gemidos eran mas intensos, quería gritar, me estaba mordiendo los labios. Lo senté en una silla y me monte sobre su pija, me besaba las tetas, mordisqueaba mis pezones y mi ritmo aumentaba más.. estaba enloquecida, otro orgasmo estaba estallando en mi interior, quería gritarlo y lo bese y lo bese más... Me recoste nuevamente sobre el escritorio, cerré mis piernas alrededor de su cuerpo y volvió a penetrar me, mi concha estaba ardiendo de placer. Sus manos masajeaban mis tetas. Era interminable y quería más.... Me pidió acabar en mi cola y acepté, iba a probar todo con ese bombón, estaba dando mi mejor final. Me pare, separe las piernas y volvía apoyarme boca abajo sobre el escritorio, el puso saliva en sus dedos y empezó a jugar en mi ano. Suavemente comienza a introducir su dedo para lubricar me, apoyo la cabeza de su pija y comencé a moverme suavemente, ayudando a penetrar, cuando sentí el dolor, ya estaba todo su miembro dentro de mí. Comenzamos a movernos juntos, con mis dedos frotaba mi clítoris, estaba disfrutando esta cogida. Él me tomaba de los glúteos y los apretaba mientras entraba y salía de mi culo. Me estaba matando, y como lo disfrutamos. Mi gemidos eran intensos. Estábamos llegando al límite y los dos acabamos estallando en un orgasmo interminable. Nuestros cuerpos se abrazaron y nos besamos nuevamente.
Posted on: Sun, 18 Aug 2013 00:50:39 +0000
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