Esfuerzo y Perseverancia Dos ranitas, en su andar, entro en una quesería. En el centro de la gran sala había una enorme tina de leche. Desde el suelo hasta su borde, un tablón permitió a ambas ranitas, trepar hasta la gran olla, en su afán de ver cómo era la leche. Calculando mal el último saltito, se fueron las dos de cabeza dentro de la tina, zambulléndose en la leche. Lamentablemente pasó lo que suele pasar siempre: caer fue una cosa fácil; salir, era el problema. El líquido no ofrecía apoyo, ni para erguirse ni para saltar. Comenzó el pataleo. Pero luego de un rato una de las ranitas se dio por vencida. Constató que todos los esfuerzos eran inútiles, y se tiró al fondo. Lo último que se le escuchó fue: "Glu-glu-glú", que es lo que suelen decir todos los que se dan por vencidos. La otra Ranita no se rindió. Se dijo que mientras viviera seguiría pataleando. Y pataleó, pataleó y pataleó. Tanta energía y constancia puso en su esfuerzo, que finalmente logró solidificar la nata que había en la leche, y parándose sobe el pan de manteca, hizo pie y salto para afuera.
Posted on: Fri, 30 Aug 2013 10:08:50 +0000
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