Espíritu: Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructifiquen y multiplíquense; llenen la tierra y sojúzguenla. y señoreen en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. Gen. 1.28. El Padre nos creó a su semejanza, nos colocó en la tierra para gobernarla y nos dio el mandato de multiplicarnos, de procrear hijos para Él. Desde el principio el Padre se propuso poblar la tierra con hijos suyos. Dios puso en tu corazón la necesidad de trascender, de ir más allá de los límites conocidos y experimentados, esto sólo se cumple al volver a Él a través de Jesucristo. Cuando te reencuentras con el Padre comprendes que tu verdadera razón de ser y vivir por la eternidad es Él mismo. Padre celestial, gracias porque eres rico en misericordia y por el gran amor con que me has amado, porque soy salvo por medio de la fe y soy hechura tuya, creado en Cristo Jesús para buenas obras, que has preparado para que ande en ellas. En el nombre de Jesús. Amén.
Posted on: Wed, 17 Jul 2013 13:09:19 +0000
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