Fiesta Familiar La casita es café y todavía puede verse en el - TopicsExpress



          

Fiesta Familiar La casita es café y todavía puede verse en el pequeño pueblo. Cuando hace años (hastiados del mal olor) los vecinos forzaron la puerta y descubrieron cual era la misteriosa familia de la anciana cuya encontraron muerta en su sillón. Desde los dientes blancos y los cabellos negros hasta los cabellos blancos y los dientes negros, Doña rosario (la anciana) había sido una vecina demasiado amable: conversaba con cuantos avistaba en la calle, preguntándoles cosas sin importancia... y sus oyentes terminaban por dejarla, inventando apuros y compromisos urgentes. Se rumoreaba, bromeando, que era bruja: tenía decenas de gatos y prefería no usar luz eléctrica, sino velas. De cuando en vez (si los niños no se tomaban la sopa) las mamá los amenazaban con llevarlos donde la vieja Rosario: ellos, entonces, se acostumbraron a odiar a esa señora decrepita, algo sucia, que insistía en ofrecerles dulces. Un sábado doña Rosario compró alimentos para la semana y, comentando al almacenero que iba a recibir a unas familiares, unas hijas, se retiró a su hogar. No se le vio salir en varios días, aunque en el interior de su casita se escucharon voces de niñas junto al maullido de los gatos. El viernes siguiente pidió fiado para el mes, explicando que debía atender a los suyos y no podía conversar más porque tenia apuro. Esa noche hubo risas, rondas y bullicio como nunca en su hogar. Al contrario, los días siguientes fueron silenciosos. Fue a la semana que alguien percibió un olor desagradable, y días después (liderados por el almacenero) los vecinos forzaron la puerta y hallaron a la anciana, putrefacta en un sillón. A su lado, en sillas o sobre la mesa en que se advertían restos del último banquete, varias muñecas antiguas (con trozos de torta en la boca) miraban a los invasores de su paz. Si fue por demencia o por magia que esas muñecas vivieron, rieron a alegres y acompañaron los últimos momentos de doña Rosario, si fue una fiesta de terror o de alegría, si alegraron a la anciana o la mataron, únicamente los gatos podrían contarlo. Pero, en los maullidos que aún se oyen en el pequeño pueblo, no es posible leer una respuesta. *PaOLa*
Posted on: Mon, 22 Jul 2013 18:56:12 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015