HISTORIA DEL CONSEJO GENERAL DE HH. Y CC. DE LA CIUDAD DE - TopicsExpress



          

HISTORIA DEL CONSEJO GENERAL DE HH. Y CC. DE LA CIUDAD DE ECIJA JOSE MIGUEL TIRADO RUIZ (SECRETARIO DEL CONSEJO 2002-2004). Desde el siglo XVI las calles ecijanas han podido contemplar el discurrir de numerosas cofradías en las que los penitentes acompañan fervorosamente a sus amantísimos Titulares. Algunas desaparecieron con el transcurrir de los siglos, otras por el contrario, han perdurado hasta nuestros días. Pero ese caminar devoto, podríamos decir que en ocasiones no fue “de rosas”, y es numerosa la documentación existente sobre desfiles procesionales de las hermandades ecijanas que terminaron de forma inversa a como comenzaron, con disputas entre hermandades por derechos de paso y mil y un argumento más basados en la cabezonería más que en la razón. Desde sus fundaciones, las hermandades incluían en su Regla el día de la Estación de Penitencia, y aunque el paso del tiempo lleva a infinitos avatares, con algún cambio que otro, desde hace mucho tiempo Écija ha podido disfrutar de una Semana Santa completa en sus calles llenas de historia. Pero cada desfile, cada hermandad, se guiaba por sí misma, sin que hubiese ningún nexo de unión, que no fuese, claro está, la propia fe en Jesucristo y la Santísima Virgen. Así, unas veces a trancas y otras a barrancas, cada hermandad realizaba su estación penitencial. Hemos de esperar cuatro siglos para que a un grupo de ecijanos y mejores cofrades tuviesen la determinación de crear el Consejo General de Hermandades y Cofradías de la Ciudad de Ecija. Fue el veintitres de marzo de mil novecientos setenta y cuatro, cuando en el archivo de la Parroquia de Santa María Nuestra Señora, se reunieran los Hermanos Mayores de todas las Hermandades de Penitencia, Sacramentales y de Gloria de la época (Soledad y Santo Entierro, Exaltación y Piedad, Jesus Nazareno y Misericordias, Jesus Abrazado y Amargura, Cristo de la Sangre y Dolores, Cristo de Confalon y Esperanza, Cristo de la Salud y Dolores, Cristo de la Expiracion y Dolores, Cristo de la Yedra y Caridad, Jesus Cautivo y Lágrimas, Virgen del Valle, Virgen del Rosario y Virgen del Rocío), junto con algunos cofrades, el párroco de Santa María, Don Esteban Santos Peña y el Sr. arcipreste en aqullos días, Don Rogelio Rodríguez Naranjo. En el acta de aquel día se menciona que el fin primordial de aquella reunión era la creación de un Consejo General de HH. Y CC., que sirviera para “dar más impulso a las mismas cofradías así como consecuencia, que sea mayor el esplendor de nuestra Semana Santa en cada año, así como el aumentar el fervor de los ecijanos hacia sus veneradas Imágenes”. En esa primera reunión se acordó crear una comisión gestora “.... para iniciar los trabajos y llevar a feliz término esta idea .....”. Así quedan nombrados los primeros cargos de nuestro Consejo: Don Fernando Ojeda Osuna, Presidente; Don Francisco Sáchez Ayllo, Tesorero; Don Victor Losada Galvan, Secretario y Don Esteban Santos Peña, Asesor Religioso. Esta comisión se puso manos a la obra y tras algún tiempo redactó los primeros estatutos del Consejo, que contaban con cinco Títulos y sesenta Artículos y que fueron aprobados en la reunión celebrada el catorce de octubre del mismo año. Mientras dichos estatutos eran tramitados en el Arzobispado de Sevilla para su aprobación eclesiástica, la Comisión sigue trabajando y es en enero de 1975 cuando en una nueva reunión se propone llevar a efecto la celebración del Pregón de Semana Santa. Esta idea culmina el 19/02/1975 cuando en una nueva reunión se aprueba que sea Don Joaquín Nogueras Rosado, el encargado, siendo presentado por el letrado Don Juan Gamero Soria en el desaparecido Teatro Cabrera, el 19 de Marzo, festividad de San José, a las once treinta de la mañana. Anecdótico podría ser hoy día el precio fijado para las entradas a dicho acto: 50 pesetas de la época (0,30 €). En la reunión del día 15/12/1975 se da a conocer que los estatutos están aprobados por el Arzobispado de Sevilla, por lo que en este día concluyen los trabajos de la Comisión Gestora y se convocan elecciones a Junta Superior del Consejo para el día 20/01/1976. Pero las cosas de palacio, van despacio, y para la fecha prevista no estuvo acreditada toda la documentación necesaria en el Palacio Episcopal, por lo que las elecciones no se celebraron hasta el día 22/07/1976 donde fue elegido Presidente Don Fernando Ojeda Osuna y como Secretario Don Rafael Pradas Rojas, así como el resto de cargos de la Junta Superior del Consejo. Comienza aquí la andadura del Consejo General de HH, y CC, de Écija que como consta en el acta del día 30/10/1976 en palabras del presidente de honor de aquella reunión y asesor esclesiástico del Consejo, el párroco Don Esteban Santos Peña: “...este Consejo está formado para coordinar y unir a las Hermandades, y todos unidos por Dios, fomentar la vida religiosa en las mismas,......hacer vida espiritual, no olvidar la caridad y un sinfin de cosas encaminadas a dar culto a Dios....”. Y comenzó a caminar nuestro Consejo con un presupuesto de 200.884,83 pesetas de aquella época (1.207,34 €) que habían podido reunirse mediante rifas benéficas, tómbolas, donativos y esfuerzo personal de su Junta Superior. Se significa este detalle económico por cuanto ya desde su inicio, la flaca economía de esta institución se convertirá, a lo largo de los años, en uno de sus principales problemas; incompresible situación dado el carácter aglutinador socio-religioso, mediador y caritativo tan importante que desde siempre ha tenido el Consejo en nuestra ciudad. Podemos dar muestra de ello, por ejemplo con lo reflejado en el acta del día 25/11/1976 en la cual se proponen ideas para que “....con la colaboración de todas las Hermandades ... poder allegar fondos para el Consejo.... y con el beneficio para todos” estableciéndose que todos los beneficios se compartirían al 50% con Cáritas de Écija. Otra muestra, esta vez del papel mediador la encontramos en el mismo acta. En ruegos y preguntas, el por entonces Hermano Mayor de la Hdad. del Stmo. Cristo de la Yedra, presenta su queja, (ruego más bien), por la situación que pasa su hermandad. Ya que por decisión del Cura Párroco de San Gil, se ha cerrado al culto la Iglesia de Santa Ana, dejando las imágenes abandonadas en el interior y aunque se intentó “... por todos los medios pacíficos convencer a dicho Párroco para que les dejase entrar....” , “..o no deseamos llegar a métodos violentos alguno....se han recogido pliegos de firmas de más de un millar de ecijanos y cofrades, pidiendo sea abierta dicha iglesia...”, “...y que este pliego será entregado hoy al Sr. Arcipreste, para que él tome la determinación que corresponda...”, “...dando conocimiento a este Consejo, para que se dé por enterado y tomase cartas en el asunto, si llegase el caso.”. Al parecer la mediación de una Comisión del Consejo creada para este asunto resolvió el problema, pudiendo la hermandad celebrar sus cultos al siguiente año, como se refleja en el acta del 7/03/1977 donde el Hermano Mayor de la Hdad. de la Yedra, agradece al Consejo su participación, aunque el polémico Párroco se negó a celebrar Misas en aquella iglesia. Una nueva muestra del carácter altruista y caritativo que desde un principio ha tenido nuestro Consejo la encontramos también en el acta del 25/11/1976, donde se propone que las Hermandades hicieran una donación de sangre “... pues es cosa nunca hecha en esta ciudad y para lo cual se harán las gestiones pertinentes con el Delegado de Sanidad y Cruz Roja ...”. En aquellos años las dificultades florecían por doquier. Era la época de los “costaleros pagados” y donde sólo teníamos una banda de música. Y grande fue la polémica en la Semana Santa del año 1977 pues como está en el acta del día 7 de marzo de dicho año: “....exponer el problema que había este año con los precios que se oían decir iban a pedir los costaleros y el que pensaba pedir tambien la Banda Municipal.”. Resultaba que ese año había que pagarle a cada costalero la inalcanzable cifra de 2000 ptas (12,02 €). Y muestra del pensamiento de la época sobre este asunto son los siguientes extractos recogidos de la voz del Vicepresidente del Consejo y Hermano Mayor de la Hdad. del Silencio: “...el otro día le visitaron en su casa unos 70 costaleros.... que eso que decían.... no era verdad en cuanto a ellos, pues estaban dispuestos a sacar los pasos gratis si fuese necesario....”, “Yo... le contesté.... que ninguna hermandad podía permitir que un costalero fuese gratis y a fuerza de insistir de que cuanto llevarían, me dijeron que como máximo cobrarían unas 1.100 ptas.”. En cuanto a la Banda de Música, se llegó al acuerdo de rebajar 5.000 ptas (30.05 €) a todas las hermandades, con lo aquel año cobró a cada hermandad 30.000 ptas. (180.30 €). Durante este período, hubo momentos agradables, se pudo ver el nacimiento de la Hermandad de Jesús Sinsoga y otros que no lo fueron tanto, pues el desacuerdo entre las hermandades y la desidia ante las convocatorias del Consejo se convirtió en moneda de uso común, por lo que eran muy pocos los acuerdos que se conseguían alcanzar. Esto llevó al entonces Presidente a presentar su dimisión en dos ocasiones, en las que no le fue aceptada continuando en el cargo, limitándose el Consejo a la organización del Pregón de Semana Santa y a duras penas seguir su andadura en la que sin embargo se pusieron en marcha algunos proyectos que han perdurado a lo largo de los años. Entre ellos podemos destacar: - 9/02/1980 Primer Via Crucis Cuaresmal del Consejo. Se celebra anualmente hasta hoy día. Cada año corresponde a una hermandad, por órden de Salida. - 9/02/01980 Primer Concurso de Carteles de Semana Santa. Se celebra anualmente hasta hoy día. Cada año corresponde a una hermandad, por órden de Salida. El declinar del Consejo fue a más. Ello obligó en 1983 a crear una nueva Junta Gestora que velase por la continuación de la institución. Así en este año, y con 4.503 ptas (27,06 €) como único recurso económico, comienza una nueva etapa, en la que al frente del Consejo encontramos como Titular al Rvdo. D. Estaban Santos Peña, como portavoz al Letrado D. Juan Gamero Soria y a D. Enrique Caldero Bermudo como Secretario. Por aquel entonces era Arcipreste de la ciudad de Ecija y su partido, el Rvdo. D. Francisco García Gallardo, de imperdurable recuerdo. Esta Junta Gestora estableció en dicho año, (concretamente el 14/03/1983), el llamado “Cabildo de Toma de Horas” que ha perdurado hasta nuestros días, en el cual se acuerda unánimamente los horarios y recorridos de todas las cofradías en la Semana Santa. Así como se impusieron las primeras pautas de seriedad y comportamiento, tanto en la estación de penitencia como fuera de ella, de los cofrades ecijanos. Este año, el Excmo. Ayuntamiento concedió una subvención al Consejo que ascendió a la cantidad de 20.000 ptas (120,20 €) y se celebró por primera vez el “Pregón de las Siete Palabras”. Así también en aquel año, por acuerdo del Consejo, se modificó el recorrido del Corpus Christi y las Hermandades montaron altares en diferentes lugares de la ciudad. Ambos acontecimientos han perdurado hasta nuestros días. Pero el mal económico perduraba y en el pleno del día 25/11/1983, podemos ver como la Junta Gestora solicita “.... a las Hermandades que colaboraran económicamente a los gastos del Consejo, porque este no tenía ningun tipo de ingreso...”, “...se aprobó que cada Hermandad contribuyera con 2.000 ptas. mensuales de Diciembre a Abril...”. Y no sólo afectaba al Consejo en sí, algunas hermandades pasaban por dificultades económicas, Tal fue el caso de la Hdad. de la Soledad, que aquel año no hizo estación de penitencia y estaba a punto de desaparecer. Pero aquellos problemas no eran lo bastante como para hacer desfallecer a estos hombres y siempre se pensaba en el futuro. Un proyecto de futuro era la Coronación Canónica de nuestra Patrona. Y fue en este mismo pleno, en 1983, cuando se acordó la misma previo acompañamiento de una obra social “...para que tuviese significación....”. Nuestra Patrona fue Coronada el día 8 de septiembre de 1999, dieciseis años después. En 1984, en el pleno del día 2 de abril, comienza a hablarse de la necesidad de crear la carrera oficial, aunque no será hasta varios años más tarde cuando se haga realidad. Agotada la labor de esta Junta Gestora, se convocan elecciones a la Junta Superior y el 18 de Febrero de 1985 es nombrado Presidente D. Juan Gamero Soria, teniendo como Secretario a D. Antonio Sarmiento Viera. La nueva Junta Superior lleva a cabo su labor, siempre con los problemas económicos a cuestas, (se seguía solicitando las cuotas a las Hermandades y éstas no las aportaban y no se tenía otra ayuda o subvención oficial), pero también con problemas de otro carácter. Como ejemplo tenemos la suspensión del pregón de Semana Santa del año 1986 que tuvo que suspenderse al negarse el pregonero entonces nombrado, D. Juan M. Diaz Baena, a que se tocase el Himno de Andalucia al término del mismo. Vanos fueron todos los intentos de convencer al pregonero para que cambiase su postura. Aquel año, el Ayuntamiento se hizo cargo de la publicación del Cartel de Semana Santa con la imagen del Cristo Yacente sobre el mosaico romano de la Sala Capitular. Y la Hermandad de la Soledad estaba en plena reorganización. Poco a poco fueron cambiando las costumbres, las mentalidades y la forma de hacer que hasta entonces imperaba. Las negociaciones con el Ayuntamiento dieron sus frutos y en 1987 se concede una subvención de 600.000 ptas (3.606,07 €), así como la colocación de una tribuna frente al consistorio, gérmen de la actual carrera oficial. En aquel entonces proliferan las primeras cuadrillas de “Hermanos Costaleros” y el Consejo firma un seguro colectivo para todos ellos. Poco a poco la holgura económica del Consejo fue ampliandose, con la colaboración del Excmo. Ayuntamiento y los actos culturales fueron creciendo en número y calidad. Por ejemplo, la Exposición de Arte cofradiero Ecijano “El Bordado en las Cofradías Ecijanas” de 1989, los programas cofrades de las televisiones locales, los conciertos, la Presentación del Cartel de Semana Santa, la distribución de itinerarios al público, exposiciones de orfebrería, la Tribuna Oficial, Conferencias cuaresmales, etc. Y la sociedad ecijana, al igual que el resto de España, evoluciona, crece cultural, social, política y económicamente; comienza a despertar y a aportar nueva savia al mundo cofrade. Otra muestra la tenemos en 1989, cuando una comisión del Instituto San Fulgencio queriendo que los jóvenes de nuestra ciudad participe con las actividades del Consejo propone la ejecución de un Pregón Juvenil. La idea arraigó rápidamente y el primero de ellos tuvo lugar el 18 de marzo de 1990 y estuvo a cargo, del entonces estudiante de 2º de BUP, Tomás Peña. Desde entonces y con alguna variante se ha venido celebrando este pregón juvenil. En esta década se produce un resurgir en las hermandades ecijanas. Aparecen las Cuadrillas de Hermanos Costaleros, desapareciendo “los pagados” o profesionales. Se restauran numerosas imágenes, pasos, las hermandades comienzan a editar boletines y carteles. Cada vez más personas acuden a los ejercicios espirituales que cada año organiza el Consejo y se realizan convivencias entre hermandades. Se organizan bolsas de caridad en navidad y surgen lazos de colaboración con los Consejos de Hermandades de otras ciudades. (Cabe destacar el envío de una aportación económica a los damnificados por las inundaciones que hubo en Málaga en 1989). Se potencia y organizan encuentros de Hermandades y Consejos de la zona Sur de Sevilla. Y se sigue con la idea de la Carrera Oficial intentandose que todas las hermandades hagan estación de penitencia en Santa Cruz. Esto aún no se ha logrado. Transcurrieron los años de mandato de esta Junta Superior entre avatares habituales hasta el día 2 de diciembre de 1991, fecha en la cual, y tras la aprobación de los nuevos estatutos del Consejo, se proponen elecciones a nueva Junta y pasa aquella a la interinidad. En febrero de 1992 el Consejo recibe la noticia de la creación de una nueva Hermandad, última que se ha creado en nuestra ciudad hasta el momento. La Hermandad de la Sagrada Mortaja se incorporó al Consejo en marzo de dicho año y realizó su primera estación de penitencia en la tarde del Viernes Santo. Se celebran elecciones y es elegido nuevo Presidente D. Jesús Ostos Aguilar, siendo Secretario D. Alberto Santos, celebrando su primer pleno el 24 de Septiembre de 1992. Este año, 1992, marca una nueva era en nuestro país. Dos grandes acontecimientos sociales se llevan a cabo en este año, la Exposición Universal de Sevilla (Expo’92) y las Olimpiadas de Barcelona. Acontecimientos que si bien parecen no terner relación alguna en el relato histórico en el que nos encontramos, vienen a colación por cuanto son la muestra más palpable de la evolución social de nuestro país, y como se sabe, todo cambio social afecta a aquellas instituciones que estan formadas por masas sociales, y siendo nuestro Consejo de Hermandades una de las instituciones, por no decir la primera de nuestra ciudad, con mayor masa social, está claro que sus cimientos se vieron afectados o más bien enriquecidos por esta evolución de la sociedad. En nuestra ciudad y a través de las hermandades se prepara la próxima venida de Su Santidad Juan Pablo II a Sevilla el 13 de Junio de 1993, visita de recuerdo imborrable. Se prepara el XLV Año Eucarístico, se organiza el I Encuentro de Hermandades de la Zona Sur donde se dieron cita 53 Hermandades con una asistencia de 350 congresistas, además del clero ecijano y la presencia del Sr. Arzobispo de Sevilla Fray Carlos Amigo Vallejo. Se depura aún más la idea de la Carrera Oficial y surge en nuestra ciudad una gran expectación alrededor de la Semana Santa. Muestra de ello es el ruego que en el acta del 8 de marzo de 1993 realiza el Presidente del Consejo: “.... Hay una gran expectación por parte de los medios de comunicación ante la proximidad de la Semana Santa, tanto las televisiones locales como las radios han invitado a las distintas hermandades a participar en los mismos. Desde la presidencia de este Consejo se demanda toda la colaboración posible encaminada sobre todo al engrandecimiento de nuestra Semana Mayor”. Fue en el año 1993 en el Pleno del Consejo celebrado el 8 de marzo, y aún no habiendo una carrera oficial establecida, tan sólo la Tribuna o Palco del Consejo, cuando se crea la figura del Delegado de Día en nuestra Ciudad. No será hasta la reunión celebrada el 8 de noviembre, cuando se apruebe la primera Carrera Oficial de nuestra Ciudad que quedó establecida como sigue: “... Inicio en la esquina del Excmo. Ayuntamiento, Tribuna frente al edificio consistorial, Calle Mas y Prat, Calle Santa Cruz y Plaza Nuestra Señora del Valle (Plazuela de Santa Cruz)”. Y muchos han sido los intentos por hacer estación dentro de la Parroquia Mayor de Santa Cruz, al igual que en Sevilla lo hacen en la Catedral. En el Pleno celebrado el 16 de enero de 1995 se aprobó definitivamente por unanimidad en su punto único “...hacer estación de penitencia con entrada en la Parroquia de Santa Cruz en las salidas procesionales de Semana Santa y como culminación de la Carrera Oficial fijada con anterioridad por este Consejo”.... “...el período mínimo de cumplimiento de este acuerdo será de quince años, a contar desde la finalización de las obras de acondicionamiento a realizar en la Parroquia de Santa Cruz...” . Pero en Écija hay un dicho popular que se aplica cuando algo tarda en hacerse: “va a durar más que la obra de Santa Cruz” en alusión a que dicha iglesia no está terminada en su totalidad dejando al descubierto parte de su techado. Y parece ser que aún en nuestros días, en pleno siglo XXI, cualquier obra que afecte a esta parroquia ha de impregnarse del dicho popular y tantos han sido los inconvenientes para el inicio de las mencionadas obras de acondicionamiento, que aún hoy día, ese anhelo de muchos cofrades ecijanos aún no se ha visto cumplido, conformandose hasta el momento, con llegar a sus puertas y desde allí hacer voto de fe a nuestra Patrona, la Santísima Virgen del Valle. Es en 1995 cuando otro asunto destacado afecta a nuestro Consejo. Pues ya con bastantes años de vida, el Consejo aún no tiene una Sede Permanente, celebrando sus Plenos en las Parroquias o Casas de Hermandad que se ofrecían para ello. En el Pleno celebrado el 30 de enero de 1995 se aprueba establecer la primera Sede Oficial en las dependencias de la Iglesia de Santa Barbara. Y se sigue con el proyecto de Coronación Canónica de nuestra Patrona, la Santísima Virgen del Valle. Proyecto iniciado desde hace muchos años atrás. Y en el pleno del Consejo del día 10 de Junio de 1996 se da un paso muy importante, pues se aprueba por Aclamación unánime “... la adhesión de todos y cada uno de los miembros del Consejo para este proyecto de Coronación Canónica...”. Pero aún faltarán unos años para hacerlo realidad. Mientras tanto, el tiempo pasa y la Junta Superior de 1992 llega al fin de su legislatura. En el pleno del 23 de septiembre de 1996 se convocan elecciones y el 28 de octubre del mismo año es elegida una nueva Junta Superior cuyo presidente es D. Santos L. Valseca Montaño y Secretario D. Manuel T. Elena Madrid junto con el resto de miembros toman posesión del cargo el 9 de noviembre de 1996. En el horizonte, los problemas habituales, la Coronación de la Patrona, la Canonización del Beato Francisco Diaz de Écija, el Santo Entierro Magno de 1999 y el Año Jubilar del 2.000 y una firme aptitud mostrada en las palabras del nuevo presidente en el día de la toma de posesión “...queremos ser, como decía San Francisco, un instrumento de corcordia, que donde haya odio pongamos amor, donde haya guerra pongamos paz, donde haya problemas pongamos soluciones...”. Uno de los grandes proyectos del Consejo de HH. y CC. de Écija comienza a fraguarse, el Santo Entierro Magno del Sábado Santo 3 de Abril de 1999. Ya en el pleno extraordinario del día 22 de mayo de 1997 se pusieron las bases para la celebración del mismo y como queda puesto en el acta de dicho día “...presentar un gran proyecto, que fuera capaz de entusiasmar ... a todo el mundo cofrade. Que fuera capaz de contagiar en ese entusiasmo a vuestras Juntas de Gobierno y de transmitir esa ilusión a las autoridades para que apoyen nuestro proyecto con su colaboración...”, “...en una sola y única procesión por las calles de Écija, donde pongamos a reflexión los Misterios de la Pasión Redentora de Nuestro Señor Jesucristo...”, “... y nos sirva de preparación para el Jubileo del Año 2000...”. El trabajo para llevar a cabo todos los proyectos es incesante. Se realiza el Acto de Apertura del Año Santo Jubilar del III Milenio, ante la Stma. Virgen de la Fe; se redacta el manifiesto “Las Hermandades de Écija ante el III Milenio”; se llevan a cabo las Misiones Populares de 1998, la Asamblea Diocesana de HH. y CC. en Sevilla, celebración de 1998 como Año de la Esperanza. Y se sigue con la acción social para con nuestra Ciudad. Ello quedó demostrado con la Ayuda humanitaria, espiritual y económica que el Consejo dio a la población en las inundaciones producidas el 18 de diciembre de 1997, en la que todas las Hermandades de forma individual y en conjunto a traves del Consejo pusieron a disposicion del pueblo todo el personal requerido, la acción social y humanitaria posible y la aportación de 6.000 € (1.000.000 ptas) para los dannificados. En 1998 se complementa la Carrera Oficial con la instalación de los Palcos en cinco tramos de la misma. Ello suspuso un avance para el engrandecimiento de nuestra Semana Mayor que se vió coronado por la consideración de nuestra Semana Santa como de INTERES TURÍSTICO NACIONAL Y DE ANDALUCIA. Se inicia el mítico año 1999 con la participación de nuestras hermandades en la Feria de Arte Cofrade MUNARCO de Sevilla en el mes de febrero. Se celebró la Semana Santa y el Santo Entierro Magno con un total éxito de organización y participación, alcanzándose la cifra de 100.000 personas que visitaron nuestra ciudad para contemplar el evento. En septiembre de este año, el día 8, la festividad de nuestra patrona fue celebrada de manera extraordinaria pues en dicho día se vió culminado el anhelo que desde tanto tiempo atrás todo el pueblo de Ecija tenía: la Coronación Canónica de la Stma. Virgen del Valle. El acto presidido por el Arzobispo de Sevilla. Monseñor Carlos Amigo Vallejo fue la culminación de de un año que perdurará en el recuerdo de los ecijanos para el resto de la Historia. Y se continúa con el día a día. En enero de 2000 se firma el acuerdo de cesión para la nueva Sede del Consejo en la Casa e Iglesia de Santo Domingo. En diciembre de este año finalizó su gestión la Junta Superior convocandose elecciones. Surge una nueva Junta, tomando posesión el día 1 de Febrero de 2001, presidida por D. Mariano Oñoro López y como Secretario D. Javier Rojas Bersabé, que fue sustituido al año siguiente por D. José Miguel Tirado Ruiz. En esta legislatura se logra el nombramiento por parte del Arzobispado de Sevilla de los Patronos del Consejo, San Pablo y Ntra. Sra. del Valle. Se abandona la Sede de Santo Domingo, al ser rehabitada por frailes, abriéndose de nuevo al culto habitual, quedando como sede eventual la Casa Hermandad de Ntra. Sra. del Valle. Se instaura la celebración del Concierto Anual de Música Cofrade del Consejo de HH. y CC. de Écija; se establece el protocolo de celebración del Vía Crucis Cuaresmal del Consejo y el Reglamento de uso y disfrute de los Palcos de la Carrera Oficial. El día 11 de marzo del año 2004, se celebra un Pleno Urgente Extraordinario motivado por los Atentados Terroristas de Madrid de dicho día. En él se mantuvo un minuto de silencio por las víctimas y se rezó una oración por la paz. Se acordó celebrar una misa Funeral al sábado siguiente en Santa Barbara a la que asistió un gran número de ecijanos abarrotando la iglesia, incluso quedando gente fuera de ella.
Posted on: Sun, 06 Oct 2013 08:07:12 +0000

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