Hallar consuelo en medio de la aflicción "PERO DIOS, QUE CONSUELA - TopicsExpress



          

Hallar consuelo en medio de la aflicción "PERO DIOS, QUE CONSUELA A LOS ABATIDOS, NOS CONSOLÓ..." (2 Corintios 7:6 NVI) Seguramente piensas que Pablo era demasiado maduro espiritualmente para sentirse decaído; pero no es verdad. El apóstol por antonomasia y dirigente de la iglesia sufrió desaliento, tensión, inquietudes, y hasta miedo. "Cuando llegamos a Macedonia, nuestro cuerpo no tuvo ningún descanso, sino que nos vimos acosados por todas partes; conflictos por fuera, temores por dentro" (2 Corintios 7:5 NVI). Entonces, ¿adónde acudimos para reponer nuestras fuerzas en tiempos de aflicción? Consideremos algunas de las formas en las que Dios nos envía aliento y consuelo: 1) Nos alienta con su presencia "...Dios nuestro Padre, el cual nos amó y nos dio consolación eterna y buena esperanza por gracia, conforte vuestros corazones y os confirme en toda buena palabra y obra" (2 Tesalonicenses 2:16-17). La naturaleza de Dios es estar con nosotros, y darnos consuelo cuando estamos emocionalmente destrozados (Salmo 147:3), en duelo (Mateo 5:4), abrumados (Salmo 154:14), preocupados (Isaías 41:10) o enfermos (Salmo 41:3). Pero es necesario que reconozcamos Su presencia y aceptemos Su consuelo. 2) Nos alienta con Su Palabra. "Acuérdate de la palabra dada a tu siervo, en la cual me has hecho esperar. Ella es mi consuelo en mi aflicción, porque tu dicho me ha vivificado" (Salmo 119:49-50). 3) Nos alienta por medio de la oración: "El día que clamé, me respondiste; fortaleciste el vigor de mi alma" (Salmo 138:3). 4) Nos alienta por medio de buenos amigos cristianos. Escribe Pablo: "...Nos consoló con la venida de Tito" (2 Corintios 7:6).
Posted on: Fri, 26 Jul 2013 04:33:21 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015