(Increíblemente) ENALTECIENDO AL PSICOANÁLISIS Psicoanálisis, una farsa Palabras de Lacan Para una persona que no maneje el diccionario psicoanalítico, usaré los términos más parecidos para que entre mi idioma (Lacaniano) y el de ustedes, puedan darle un significado muy SINÓNIMO y se darán una idea de qué se trata este tema que sale siendo muy simple. Comencemos con el idioma matemático que todos podemos entender Fórmula matemática: 7=14+3-5+8-6 (Observen muy bien el orden de los números) Es simple ver una fórmula que en este género el resultado de los números, de las sumas de las restas subsiguientes a siete nos dan siete (matemáticas de cuarto grado) pero muy difícil quisiera decirlo yo, que me den esta fórmula exacta dándoles como base 6 que está en cualquier sitio y 3 que es el cuarto de atrás hacia adelante, para decirles que me dé resultado 7, o sea, que les doy 6, les doy 3 y tiene que darme 7en una operación de 6 números. Sabiendo que 7 es el primero, 3 el tercero y el 6 mire a ver dónde lo acomoda… Léalo y vuélvalo a leer, sin comparar la fórmula original y trátenlo de entender y después me cuentan cuántas veces les tocó leerlo para poder desarrollarlo; de adelante hacia atrás. Sólo se lo podrá saber aquél que se inventó la fórmula o la tiene anotada en su libreta de apuntes porque también se enredaría de esta manera. Pero estos son simples números. Cuando son en vez de siete números, siete enunciados para ordenarlos en una forma lógica o ilógica (como se me dé…) la cosa se complica un poquitico más. Para decirlo mejor, no complicadamente porque eso prometí al iniciar la conferencia, los años que llevo analizando al sicoanálisis me hicieron llegar al número inicial, o sea a la fórmula, ustedes analícenlo, piénselo y discútanlo para que lo juzguen. Comencemos por los sentimientos de Nietzsche, el temperamento y la forma de ser del mismo: obsesivo, muy ensimismado, con la sicosis que en su tiempo se llamaba “absoluta locura”, con una educación religiosa adquirida en su infancia, sociedad y cultura. Chocado y enojado con la religión que lo hizo, hasta la médula de sus huesos, agnóstico- relativo, por no decir ateo, bien sea por su condición o bien sea por su primera educación. Enamorado de Marx, Lenin y sus seguidores y obsesionado con la verdad. Para completar, pensador de lo que piensa el pensamiento, o sea, buscador de fórmulas para vencer la batalla creada en su interior con ese Dios que lo aplastaba. Agobiante por un mundo que le exigía algo innovador en filosofía y letras. Su OBRA MAESTRA tenía que aparecer de algún sitio y en su lucha tenía que descubrir ese retroceso de la locura a la cordura, para sí mismo encontrar el secreto del reto a Dios, que le exigía sus sentimientos internos y decirle al mismo Dios: “podré morir y devolverme también de tu castigante muerte”, este yo interno que Nietzsche manejaba fue el que le heredó a sus lectores, a sus aprendices y a todos los que se querían revolcar entre su propia mierda, ¿cuál? La que él en su cabeza tenía porque la batalla era muy dura, una pelea con el mismo Dios y no sólo eso, una cultura de 1900 años que también lo aplastaba. Este hombre tenía un cerebro tan brillante y tantas ideas en su cabeza (varias) que no le encajaban la una y la otra para una sola obra. Ya su sistema nervioso lo traicionó, su capacidad mental se desgastó, sus neuronas no resistieron y se quedó en la sicosis que tanto temía porque era un mundo doble, triple o quién sabe cuántas veces más grande que el que le tocó a él y prefirió exteriormente entregarle al mundo una depresión y él quedarse viviendo en esta, su trabajada sicosis. No diferente estaba por pasarle a Freud, con la diferencia de que tuvo más elementos de distracción, síntomas físicos que lo distrajeron y lo previnieron contra quedar en las mismas condiciones de Nietzsche, pero terminemos con este último. Él sabía que existían unas fórmulas pero no osó a usarlas porque él necesitaba su verdad, no su protagonismo. Él sabía cuál era la ley y tenía, así no quisiera, QUE CUMPLIRLA; esa ley que le habían regalado a él por los 1900 años de los que hablamos antes. Ya se estarán dando una idea de la fórmula así que pasemos a Freud. Aquel de los 5000 apuntes llamados libros, aquel de los 5000 análisis, de las 5000 lógicas, de los 5000 enunciados y de los 5000 resultados. Una persona protagonista, una persona que además de ser muy pensadora, brillante y si se puede decir calculadora, prefirió practicar una fórmula porque él si encontró el verdadero significado de los apuntes de su maestro Nietzsche. Él sí supo que eso era el pensamiento del pensamiento del pensamiento y que así mismo, funcionaba como una lógica y en retroceso, podíamos jugar a la fórmula y podíamos lograr eso que alimentaria ese súper, como él lo llamó, súperyo. Ese súperyo, como lo describió, indomable, intransigente, atrevido y sin control, venido de esa alguna otra parte de atrás del cerebro, venido de algún aparente, de aquello que no es más que convincentemente él podría llamarlo lo real. Eso a lo que cada cosa se le podría dar un resultado y a ese resultado otra cosa y a esa cosa otro resultado y a ese resultado otra cosa. O sea, de la fórmula que inicialmente hablábamos porque ya estaba la banda de “MOEBIUS” porque ya estaba la geometría y la volveríamos tridimensional o cuatridimensional o como lo quisiéramos porque las ideas es más fácil con las palabras y sin profundizar mucho en su análisis. Vamos a pasar a su discípulo Lacan, que vino siendo casi lo mismo que Freud pero multiplicado por lo que quiso y que casi le pasa lo de a quien descuidó , “Nietzsche”. En todo caso, estos tres hijos del pensamiento nos dejaron una herencia, se puede decir casi que fantástica: EL PENSAMIENTO TIENE UN SIGNIFICADO, sí pero también nos dejaron una fórmula que es la que yo les vengo a mostrar y usaron esta fórmula muy sencilla, basados en la cosa sagrada, increíblemente. La cosa religión, asombrosamente. El número siete, sagrado todos los tiempos, entonces, se iban a basar sobre la mejor verdad, la religión y su ley. ¿Cuál religión? de la que hemos venido hablando, la católica, 1900 años encima, agobiando y apretando. Para no ir muy lejos y para que ustedes los sicoanalistas puedan seguir leyendo, también aquí está la ley y la fórmula mágica, se llama: los siete pecados capitales o los siete padecimientos en los cuales el hombre se revuelca en su propia mierda. Vamos a reunir a Freud y a Lacan que fueron los formuladores, los que alimentaron su ego y su soberbia o vanidad a esperanzas y sueños de hacer historia. Estamos hablando de la soberbia, lujuria, envidia, ira, pereza, gula, avaricia. El principio de la fórmula que encierran al ser como tal, lo cual Freud no se atrevió, sino Lacan a enunciarlo como lo simbólico, lo real y lo imaginario , para abarcar en esto un todo, incluyendo la misma filosofía que tenía que ser su amiga y aliada. De ultimas usaremos la palabra “Dios”. Si enumeramos cada uno con su sinónimo o lo organizamos explicando el qué, significa cada uno de los significantes dentro de cada uno de los “pecados” duraríamos un tiempo muy considerable, entonces, voy hacer el enunciado con su respectiva fórmula con cada termino y explicación sicoanalítica generalizada que se usó para cada pecado capital. Revolviendo en si todos los sinónimos que Freud y Lacan le dieron para que hoy se llame psicoanálisis que por cierto, no son muchos y es de agregarle algunos y por ahora no lo voy hacer. Soberbia o vanidad = lugar del otro, fantasma. Definición: ser lo que no se puede Lujuria = ausencia de la mujer, histeria. Definición: no lograr lo que se quiere. Envidia = Transferencia, sujeto. Definición: desear y absorber. Ira = Verdad, significante. Definición: no aceptar lo poco que es. Pereza = Real, síntoma .Definición: miedo a enfrentar. Gula = Simbólico, discurso. Definición: conoce y quiere ingerir. Avaricia= Deseo, plus del gozar. Definición: anhela untarse de la corporeidad. Es una combinación que nos da 678 mil billones y algo de ideas que podemos sacar de esta sencilla combinación. En este momento, el final de esta fórmula entra la palabra sublime = Dios, definición: lo que no podemos igualar. = lo universal del delirio,,, “para Freud todo es un sueño”, el actual conferencista Jacques Alain Miller, llamó aquí esquizofrénico al sujeto que no evitaría lo real,,, esto es el hablantecer (cuadrados pârletre)(9), a quien lo simbólico no le sirve para evitar lo real porque lo simbólico mismo es real. Si no hay discurso que no sea des semblante, hay un delirio que es de lo real, y es del esquizofrénico. Por eso puede construirse lo universal del delirio (tomado de Juan José Scorzelli, en un grupo de psicoanálisis) Seguiría este diccionario dándonos significantes, en donde nuestra fórmula cambiaria de acuerdo a los síntomas que encontremos en nuestros pacientes, claro, cada significante con un nombre como por ejemplo, nombre del padre = incesto = padre violador = hijo degenerado = YO o paciente y entonces, tiene que ver con el amo y entonces, tiene que ver con la madre y entonces, otra vez, y otra vez y otra vez. Cualquier camino ha de coger y entonces, viene siendo de aquel hijo del padre, un caucho que rebota hasta el YO degenerado o hasta el paciente degenerado que tiene graves problemas y van a rebotar a otro sitio, depende el nombre que le queramos bautizar a tal o cuál síntoma. Entonces, hay un subdiccionario, más simple y sencillo de aprender pero que nos dan un tal vez como la no armonía de este mundo. Lo podríamos llamar, castración, el desacuerdo de nuestra sociedad, un malestar; que se convertiría en ese malestar en función de muerte y entonces, por transferencia, llegaría Yo a la misma envidia y entonces, puedo mirar qué desea esto o lo otro mi paciente, con apenas cinco palabras he “ brincado” de una manera que a nadie se le ocurriría brincar porque no bastó sino un diccionario muy paradójico para que a todo se le encuentre un propio camino. Entonces, la fórmula se dividiría en mil caminos que están en manos del analista, los cuales él (el analista) escogería para llegar lo más rápido posible al síntoma y dar una cura, explicación lógica ésta, que no se ha dado en 100 años porque el no reconocimiento a un Dios y a su ley y a la soberbia de dos analistas inventores e inquietos, no nos ha dejado reconocer que duraron 1900 años para poner la ley básica en la cual se engendraban toda clase de debilidades humanas y debilidades humanas es = síntoma y síntoma es = siete debilidades capitales y siete debilidades capitales = síntoma. No obstante, las notas de pie de página también tenían que resolverse: PRIMERA NOTA, ya citada la castración que en definitiva encierra la no armonía de cualquier ser humano; SEGUNDA NOTA, el malestar es esa punción de muerte que todos sentimos para que no nos toque semejante monstruo; TERCERA NOTA, la política está atada al modo y método para la lucha y superación humana. Si analizamos estas tres notas muy profundamente estarán atadas a la pereza, en este caso, el quinto pecado capital, claro, está el placer el ,Yo, el súperYo, el ello, está lo oral, está lo anal, está, está, está, está… Freud comenzó con la fórmula un poco tarde y un poco temeroso, como lo dijimos en la conferencia 1, muy basado en la lógica y en el soporte de su carrera profesional que para su época era supremamente delicado no ser expulsado de ella, entonces, su fórmula fue más sencilla sin comparación a la de Lacan. Lo podemos poner en una balanza: Lacan, hizo la fórmula de la fórmula que no la entendió sino él y aquellos viejos pensantes y analistas quisieron ser profesionales de….. y digo viejos porque el más joven doctorado lo encontraremos de 45 en adelante, lo cual nos dice que más va por convencimiento que por entendimiento lo adquirido y que por ser estas fórmulas usadas tan complicadísimas , no se ha podido opinar en los estamentos médicos para el grado de veracidad que en esta misma conferencia se pone, a unos no sé cuántos graduados que ni siquiera saben si son ateos o no si no que todo lo entienden o nada lo saben, únicamente unas no sé cuántas conferencias, de no sé cuántas hojas cada una ( no menos de 40) y unos no sé cuántos libros, con unas no sé cuántas negaciones entre el uno y el otro, que lo único que pasa es que necesitan tener el analista una excelente memoria o un computador a mano para poder sostener cualquier clase de discusión, y claro, en el idioma psicoanalista porque en este, nuestro primer idioma o idioma común o idioma entendible, no te sostienen la explicación de un síntoma ni locos. He escuchado unas conferencias en los últimos años que dan vergüenza, cómo es que cualquier palabra tiene el significado que relativamente se le ponga, entonces, cualquier conferencia también tiene el mismo significado que se le ensamble. Entonces, el que no repita que es brillante, según ellos, no sabe dónde está parado. Y “entonces” es mi palabra favorita durante la conferencia, como lo han notado o muletilla porque siempre habrá un “entonces” como el mismo extenso y casi infinito, pensamiento humano porque con mil palabras que posee el diccionario expresamos todas las ideas que usted durante toda una vida no alcanza a explicar, ¿me expliqué? Los buenos conferencistas de hoy en día, MILLER, LAUREN,OTRO, OTRO, tienen su verborrea lista y en la mano y apenas están comenzando a discutir si podría ser diferente TAL O CUAL RENGLÓN de Lacan o de Freud, ¡ahhh! y uno que otro filosofo que no le cae mal añadir a su título psicoanalista porque claro para graduarse en doctorado existe el pase, el supervisor, la aprobación social, los carteles, o sea, tiene que ser de los mismos hablar de lo mismo etc. porque la sociedad no les ha otorgado el derecho a graduarse oficialmente como profesionales en ninguna sociedad o academia donde desarrollen sus estudios, por ejemplo, Yo estudié 4 años psicología, 2 años psicoanálisis, 2 de filosofía, 2 años de doctorado y 11 años análisis diván y trabajo empresarial , conocí las mejores bibliotecas de México , España, Colombia, Roma, las nubes y casi que las de marihuana y casi que tampoco ubico ni entiendo nunca cuál era el bendito fantasma del que no les he hablado, ¡claro, claro, claro! El más sencillo = el espíritu. Y como si fuera poco con todo lo que acabamos de hablar, ustedes háganme el favor y me le suman la topología que viene siendo otro significante o sea, significante, cualquier cosa, topología, otra cualquiera cosa, entonces psicoanálisis… por eso no nos toman enserio (N A D I E), les doy la mala noticia. Después de esto, para cada pecado capital hay una conferencia igual a esta porque toda consecuencia tiene su causa, y claro, también está la del fantasma, la de lo sublime, la de lo real, la de lo imaginario, todo amarrado a nuestra hermana filosofía y todo esto en un todo, etc., etc…. ¡ahhh! y lo principal de todo o la mejor noticia de todas es que los que quieren ver esto, sólo desde el punto de vista lógico, pues tampoco se hagan de crespitos o de ilusiones porque el psicoanálisis como tal es una forma muy complicada de pensar y no es nada fácil y el pensamiento claro existe y el pensamiento claro que es difícil y a unos les toca ir a la escuela y a otros como Yo, que a los 22 años hice un análisis empírico, no sé cómo se llamaba en ese momento, pero fui a averiguarlo con 18 años de universidad, escuela, libros, academia, conversatorios, etc., etc., etc., que me dejaron vuelto un síntoma. Entonces, aprender a pensar a las escuelas Freudiana y Lacanianas y a pensar enserio al LABORATORIO, ¿cuál? escójanlo ustedes, yo escogí el mío y no por esto estoy arrepentido sino que al revelar esta verdad, para mí fue un tanto triste porque todo fue una fórmula matemática, escondido detrás de lo sublime, negándolo siempre y ridiculizándolo para hacernos un tanto más independientes y si quieren saber si yo soy católico ¡claro que sí! Pero hasta los 14 años fui totalmente ateo y ahí fue espirita y católico practicante, hasta el día de hoy. La razón por la cual logré descubrir que mi carrera, siendo tan intelectual, no tenía que ser atea y siempre me tocó esconder mi verdadera teología. Apartarme de la sociedad Psicoanalítica, ya a estas alturas muy poco me importa. Los viejos analistas no se atreven a enfrentarse con el psicoanálisis en una universidad, ya es tiempo que lo hicieran. Que en vez de estar repitiendo como loros y después de tanto estudio, practiquen pensar el pensar de pensar, lo siento colegas pero a ustedes también los espero en mi comunidad de psicoanalistas que curan, alivian y encuentran la solución, al fin y al cabo somos médicos del pensamiento graduados o no, a quién le importa que nos enfrenten que el más pensante y “verraquito” se nos enfrente, que los señores psiquiatras formuladores de medicamentos se acerquen por montoncitos pequeños, eso sí, que nosotros somos muy buenos profesores y les vamos a demostrar que pensando se puede hacer un tratamiento de terapias y recuperación, que los medicamentos también son necesarios pero con inteligencia, no con mercadeo. Que ellos estudiaron para preservar la vida, no para agotarla. Tenemos una misma función y ambos sin ningún título en la mano, ni ninguna arrogancia, ni súperYo “infladito”, podemos hacer de la carrera de ellos, grande y de la de nosotros, de respeto y que tendremos tiempo de luchar nuestras batallas políticas si lo queremos hacer ( la norma de distracción de Lacan) la cual dejó para que muy rápido y antes de que él se fuera, no saliera un pensante que le descubriera esto. Yo ya estaba y alcancé a darme cuenta del neurótico arrogante, ese como era que subía su voz tratando de hacer que nosotros los estudiantes le alabáramos mas su tremenda arrogancia, ¡CUIDADO! Lacan quería ser Dios y lo está logrando. Freud quería lo mismo en vida y casi que lo logra. Nietzsche murió amarrado por su propia hermana y loco porque no lo resistió y Yo soy paciente terminal, no por mi locura como Nietzsche y que Lacan, pronóstico que todos nos volveríamos locos, sino para tristeza de muchos por una ajena bacteria que no sabe de psicoanálisis y viene por mí, jajajajajajajajajajajajaja. Firma: Mis respetos Juan J Diaz T. NOTA (que no podía faltar): Que Dios y la Virgen me los proteja mucho…
Posted on: Mon, 24 Jun 2013 01:54:13 +0000