L a historia de un millonario Hace algún tiempo en una - TopicsExpress



          

L a historia de un millonario Hace algún tiempo en una conferencia de negocios en Houston, Texas en Estados Unidos, uno de los panelistas, representante de una empresa multimillonaria dedicada a la importación de cítricos, comentaba su experiencia sobre cómo pasó de ser un muchacho que trabajaba en un supermercado de su natal Brasil, y que pese a ser ateo, siempre entendió que el no creer en un “dios de yeso” no era una justificación para no ser una buena persona , y que al paso del tiempo terminó siendo multimillonario en dólares. En su relato nos comentaba que él nunca recibió una instrucción religiosa, que su familia era de las más pobres de los pobres, y que él desde niño entendió que las limitaciones eran algo con lo que tendría que lidiar. Al tiempo que fue creciendo él siempre recordaba que si tenía algo que comer, siempre buscaba a alguien que no y lo compartía… “Misteriosamente” siempre le regalaban comida y algo que “picar” mientras caminaba o cuando trabaja en el súper mercado. Un día lo ascendieron a supervisor en el supermercado y con sus salarios siempre ayudaba a la iglesia de su pueblo, porque “el sacerdote siempre me dio pan después de misa cuando no teníamos comida”, y siguió creciendo, y un día el gerente del supermercado murió, y él fue nuevamente ascendido. Cuando fue gerente conoció a muchos empresarios; y él siempre, aun sin conocer a Dios Padre, él siempre quería hacer el bien, y entonces les pedía a los empresarios que sí tenían regalías se las entregaran y él las repartiría entre los niños del caserío… Pasó el tiempo; y uno de los proveedores que casualmente era el que trabaja con cítricos (jugos derivados de naranja y etc); le dijo que dejara el trabajo y que se fuera a trabajar con él… 10 años después de aquel día él nos contaba que su cuenta bancaria tenía tantos ceros que no podía contarlos con los dedos de su cuerpo; su capital ascendía a millones de dólares y él quería revelarnos el secreto: “Aunque nunca fui instruido para creer en Dios Padre; siempre he reconocido que la ley natural de la humanidad es ayudar para ser ayudado, y el día que deje de diezmar, que deje de ayudar, ese día mis negocios terminaran”. Prospera tu vida al diezmar El Diezmar, glorifica la abundancia que Dios padre trae día a día a nuestras vidas, y pretende llevar bendición a todos aquellos que cumplen con este mandato. Es increíble la prosperidad que atraemos al cumplir con el diezmo, pues estamos consagrando nuestras finanzas a Dios padre. “Así pues, todo el diezmo de la tierra, de la semilla de la tierra o del fruto del árbol, es del Señor; es cosa consagrada al Señor.” (Biblia; Levítico
Posted on: Wed, 30 Oct 2013 18:16:36 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015