LA NOCHE OSCURA DEL ALMA Ministerio Profético del Mover del Espíritu Santo en España Hoy. Roger Elliott Para cada uno de nosotros, que quiere seguir a Jesús con corazón sincero, viene una experiencia en el desierto. ¿Cuánto durará?, no lo puedo decir. Es diferente para cada uno de nosotros. Para algunos, meses, para otros años. Quizás depende del trabajo para el que el Señor nos ha llamado. El desierto es un lugar solitario, donde una persona tiene que cuidarse a sí misma. No hay nadie para proveerte, tu supervivencia depende de ti. Puede que clames por ayuda, pero nadie escucha. La reserva de agua quizás esté casi agotada, y no sabes dónde encontrarás el próximo sorbo. El panorama parece cruel y duro, sin sombra donde guarecerse del ardiente sol del día. Los días y semanas y meses pasan sin signo alguno de fin de esa desagradable experiencia, pero recuerda, tu supervivencia depende de tu voluntad de seguir adelante. La tentación supondrá encontrar un camino de escape, quizás ir atrás o hallar otra salida. Para muchos de nosotros, no ha habido forma de escapar. Hemos aprendido a confiar en el Señor en crueles y duros lugares donde no había signo alguno aparente de Él. Es posible que nos hallamos sentido olvidados y abandonados incluso. Pero Él está con nosotros. Él nunca, nunca nos deja, no importa nuestra percepción de las cosas. Aquellos que han estado en el ejército; saben que tienen que pasar por un duro entrenamiento antes de ser comisionado. El Señor está preparando a Sus soldados para ser oficiales y líderes en los últimos días, antes de Su retorno. Vivimos tiempos difíciles y excepto que estemos preparados, no sobreviviremos a las batallas. El Señor está contigo y está preparándote, Él no te ha abandonado. Tu paso por el desierto tiene su tiempo para terminar. Recuerda, nuestro Señor pasó 40 días en el desierto. Lucas 4: 1, dice que “Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán y fue llevado por el Espíritu al desierto”, más tarde, dice (vers 14) “Jesús regresó a Galilea en el poder del Espíritu”. Él entró en el desierto lleno del Espíritu Santo, y salió de él en el poder. Si quieres el poder de Dios en tu vida, confía en Él con todo tu corazón durante el periodo de entrenamiento y nunca “tires la toalla”, no abandones. Él es fiel. Saludos, Roger Elliott
Posted on: Sat, 26 Oct 2013 12:42:24 +0000
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