La tensión establecida en un sector del cuerpo conforma un hábito que implica acomodar el resto a ese centro de dolor. Es lo que se puede observar en los órganos articulatorios, por ejemplo, donde casi como un fiel reflejo nos propone una visión sobre lo que sucede en una persona. “La tensión crónica en los músculos de la mandíbula no es un fenómeno aislado, señala Lowen, a la mandíbula contraída la acompaña siempre una garganta contraída, que constriñe la capacidad del individuo para dar voz a sus sentimientos” Es decir que una pequeña o gran tensión en alguna zona del cuerpo genera por derivación una contracción mayor en otra. (del libro La psicología de la voz)
Posted on: Mon, 25 Nov 2013 12:23:45 +0000