LaTijera Director Responsable Fernando Campot A PUTEADA MAS DULCE Desde hace ya unos cuantos años, el basketball de nuestro club se ha convertido en un verdadero semillero. Y no nos referimos al aspecto deportivo donde, al igual que el fútbol, continuamente surgen valores que nos llenan de orgullo. No, en esta ocasión nos referimos al semillero de Hinchas. Desde un tiempo a esta parte el curso acelerado de Fanático de la Academia se dicta en las gradas de las canchas de basket, en los borbollones de las salidas, en el coro constante, seguidor y atrevido que no afloja en ninguna cancha ni con ningún rival. Ese cardumen de incondicionales que hace latir cada rectángulo donde cinco leones visten la verde y blanca. Y no ha sido barato ser parte de “la pesada”. El amor por estos colores nos ha dejado más de un ojo negro como medalla de honor. Algunos dientes se perdieron en la noche sin que el Ratón Pérez se diera por enterado. Y más de un incondicional se puso la remera más linda, el vaquero nuevo y los championes de cábala para ir a ver a la academia, y los terminó llevando a pasar la noche al hueco frío de un calabozo. Todo por la acadeeee...!!! Y ya nos conocemos. Y está el “boca sucia”, el que tira el chiste justo, el que se arremanga a la más mínima, el que se quiere tirar adentro de la cancha con un “no te metas con el gurí”, y el que confunde el pitazo final con la campana de comienzo de un round. Todos locos lindos. Probablemente mucho más locos que lindos, pero locos por la acadeee...!! Y la tribuna es como un mural con todos los colores. Pero claro, los tiempos y la necesidad de buscar horizontes le han ido restando colores a ese hermoso mural. Y los que nos quedamos la seguíamos llevando adelante, tal vez sin darnos cuenta como, de a uno, se nos habían ido yendo varios de esos codos que saltaban al lado nuestro. Ni cuenta nos dimos de que éramos un poco menos para abrazarnos al final de un triunfo o para la trasnochada serenata cantinera. Hasta quizás uno se comió alguna piña que, seguramente, alguien que se encontraba a miles de kilómetros no hubiera permitido. Hoy es época de fiestas, de familia, de reencuentros. Y cuando fui a la cancha me pareció que “la pesada” rugía más que nunca. Miré alrededor y me di cuenta de que estábamos todos, los de siempre. Pensé si no habría estado soñando porque volví a escuchar una vieja voz repitiendo la misma puteada de siempre. Para mí fue la puteada más dulce que podía escuchar. Miré hacia atrás mío y, realmente, estaban TODOS . Pensé, “capaz jamás se fueron, tal vez yo lo soñé”. Y me entusiasmé de que fuera así. ¿ Sería todo un juego de mi imaginación y los vagos seguían aquí , viviendo en el barrio? Me ilusioné y pensé que siempre estuvieron, que no se irán más. Estaba tan contento que, a pesar de haber perdido, fui a abrazar a uno de esos locos lindos para desengañarme del todo de mi mal sueño. Le dije “¡¡ cómo marchamos !!” y me contestó: “ ¡¡ Coños !!, ¡ es que el puñetero referee nos ha anulao una canasta totalmente lícita, chaval ! Se me escapó un tremendo lagrimón. Fui a la cantina, me agarré un pedo de puta madre y me marché para mi casa más mareado que torero nuevo y silbando un pasodoble. Por las dudas, ¿vió? ¡¡ Gracias por volver muchachos ¡! Esta es su casa ¡! “ La Tijera”
Posted on: Fri, 28 Jun 2013 00:18:06 +0000
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