Lucas 13, 18-21: “El grano de mostaza crece… y los pájaros - TopicsExpress



          

Lucas 13, 18-21: “El grano de mostaza crece… y los pájaros anidan en sus ramas” Compartimos la Palabra Somos “coherederos de Cristo”, “glorificados con él”, nos dice San Pablo. Y se pregunta cómo hacérselo saber al hombre, cuyo sufrimiento le ofusca la mente, impidiéndole ver la gloria de Dios. La solución de Pablo es que el hombre se deje transformar por el Espíritu. En el Evangelio, se nos proponen dos parábolas, comparando el Reino con una semilla, la de mostaza, y con la levadura y su comportamiento en la masa. El proceso de ambas es similar al del Reino, humilde al principio, frondoso al final. El grano de mostaza: compromiso con el tiempo presente Quizá la tentación sea proyectar de forma inmediata la parábola hacia el futuro. Y la proyección es válida, siempre y cuando no invalide la fuerza de la semilla en sí misma. El árbol frondoso donde pueden anidar los pájaros, el Reino de Dios extendido por el mundo entero, están ya presentes, aunque no en todo su esplendor, en la semilla y en las palabras y anuncios de Jesús. Un respeto y un aprecio, lo primero, para esa semilla que va a crecer más por su potencialidad que por los desvelos que yo pueda tener con ella. En segundo lugar, lo nuestro es sembrar con generosidad, con prodigalidad, semillas de mostaza, de justicia, de verdad, de paz, de fraternidad y de solidaridad. Dejemos, luego, al sol y al agua que hagan lo suyo; dejemos al Señor que convierta esas actitudes, esos valores, en forma de semillas, en árboles donde puedan anidar y convivir los creyentes y seguidores de Jesús. Y no hagáis caso de los que quieren inmediatez y eficacia garantizada. Hay que sembrar como el maestro desbroza la mente del niño, con entusiasmo pero a sabiendas de que lo normal es que él no vea los resultados y, además, sin constancia alguna de la eficacia de cuanto enseña. Así nosotros. La siembra en sí misma tiene su valor. Los gestos de justicia, transparencia, fraternidad y paz, aunque no logren extender y dilatar toda la potencialidad que llevan dentro, ya tienen su valor, y merecen la pena. Lo nuestro, repito, es sembrar. La levadura y la mostaza: mensaje de confianza y esperanza Jesús, por medio de estas parábolas, nos da un mensaje de confianza. La semilla está plantada. El Reino es una realidad. Ciertamente no somos mayoría, no es precisamente aprecio lo que abunda en los medios hacia Dios y su pequeño Reino, pero la levadura está mezclada con la masa. Confiemos, no en nosotros, sino en el sol, el agua y el Labrador. El tiempo presente es decisivo. Sembrado el Reino, ya está creciendo y desarrollándose. Con dificultades, con fracasos momentáneos, la historia del Reino sigue su curso e inexorablemente llegará a ser la realidad soñada por Dios. El Reino de Dios está dentro de nosotros. Ignoramos quién la ha sembrado, pero la semilla está depositada y crece aunque a veces no nos demos cuenta. Esto nos ofrece esperanza para el futuro, atención para el presente y, en todo momento, acción de gracias al dador de tanto bien. Fray Hermelindo Fernández Rodríguez La Virgen del Camino
Posted on: Tue, 29 Oct 2013 12:11:49 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015