Matt Damon el protagonista de “Elisyum” dice que le enseña a sus hijas que el dinero no compra todo. La industria lo adora, tiene millones de fans y una fortuna estimada de 65 millones de dólares, según celebritynetworth. Pero Matt Damon se rehúsa a comportarse como una celebridad. Por eso, en lugar de despilfarrar su dinero o vivir enfiestado en Hollywood, el actor se preocupa por apoyar causas altruistas y educar a sus hijos como personas humildes. “Los valores que tengo ahorita son los mismos con los que nací. Yo fui un niño de clase media y mi infancia transcurrió en un barrio común y corriente. Por eso lucho contra mis intereses egoístas constantemente”, puntualiza en entrevista el protagonista de la cinta Elysium, que se estrena. Se considera aburrido Originario de Cambridge, Massachusetts, Matt creció en una vecindad con su madre, Nancy, y su hermano, Kyle. Los bienes materiales no abundaban entonces, pero eso es algo que no lamenta. “Cuando creces con más dinero del que deberías tener, tus valores humanos son más escasos. Si naces con una cuchara de plata en tu boca, es seguro que crecerás pensando que no tienes que pagar impuestos”, manifestó. Pero aunque sus cuatro hijas sí tuvieron pañales de seda, el actor está determinado a que eso no las eche a perder ni que piensen que el dinero lo compra todo. “No puedo ignorar el hecho de que mis niñas nacieron privilegiadas, pero me alegra que no pidan más de lo que tienen. Mi esposa y yo vamos a trabajar muy duro para que no crezcan egoístas y prepotentes. Quiero que entiendan el mundo en el que viven, cómo funciona y cuáles son sus responsabilidades. Es difícil explicarles esto, y por eso prefiero que lo entiendan y lo vean con sus propios ojos”, señala. Para lograrlo, Matt planea llevar a Alexia (14 años), Isabella (7), Gia (5) y Stella (3) a ciudades que sufran los embates de la pobreza y las guerras, con la idea de forjarles un sentido de responsabilidad con el mundo. “Cuando estaba chico, mi mamá me llevó a México, a Guatemala y a otros lugares en donde las condiciones de vida eran difíciles para la gente”, recuerda el actor, de 42 años. “Experimentar eso y hablar con niños de mi edad en esas condiciones fue la mejor forma para que yo entendiera lo que sucede en el planeta. Eso fue lo que me hizo ser una persona responsable ahora”. Al tener un estilo de vida modesto, pese a su fortuna, el actor también tiene la ventaja de que los paparazzi no lo acosan. De hecho, se considera un tipo aburrido que no genera muchos chismes, caso contrario al de su amigo Ben Affleck, quien también es su vecino en Nueva York.
Posted on: Tue, 03 Sep 2013 16:26:57 +0000