Meditación diaria para hoy June 29, 2013 Meditación: Mateo 16,13-19 San Pedro y san Pablo, Apóstoles Hoy celebramos a los dos pilares más importantes de la Iglesia primitiva, san Pedro y san Pablo, que encarnaron los dos aspectos más importantes del cristianismo: el pastoral y el misionero, aunque desde el primer Pentecostés, se puso en evidencia el liderazgo de san Pedro en toda la Iglesia. La norma de la fe de san Pedro y la roca firme de su apostolado como jefe de la Iglesia fue su confesión: “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.” Esta es la misma fe que celebraba san Pablo cuando decía: “El único cimiento válido es Jesucristo y nadie puede poner otro distinto” (1 Corintios 3,11). San Pablo fue uno de los últimos apóstoles que confesó la fe en Cristo, pero puede decirse que él fue quien desarrolló las doctrinas de la fe que llegaron a ser la base de nuestro Credo y que continúan definiendo a la Iglesia hasta el día de hoy. La Iglesia universal habla con una sola voz cuando declara que “Jesús es el Señor”. Estos dos santos, san Pedro y san Pablo, han establecido clara y enfáticamente que nuestra fe no ha de ser algo individual ni aislado; no se trata solamente de “yo y Jesús”; es en realidad “Cristo y su Iglesia”, porque Dios jamás quiso que cada uno viviera aislado de sus semejantes; jamás quiso que el cristianismo fuese una experiencia individual de cada uno. La dimensión que le dio a nuestra fe es colectiva, y por eso la experiencia que tengamos de la vida en el Espíritu se pone en acción poderosamente y se apoya con gran esperanza en el fiel y continuo testimonio de muchísimos otros creyentes. Somos salvados por la fe y esta fe es un don que nos concede nuestro Padre celestial. Demos, pues, a conocer, por medio de la Iglesia, la multiforme sabiduría de Dios, porque todos estamos llamados a ser pilares de la Iglesia, a proclamar a Jesucristo como Señor. De esta manera, asumiendo nuestra vocación cristiana y profesando la majestad de Jesucristo también participamos en forma práctica, mediante las obras de la fe, en la edificación de la Iglesia que comenzó con el liderazgo de san Pedro y la obra misionera de san Pablo. Oración: “Jesús, Señor y Salvador mío, te doy gracias por llamarme a ser uno de tus discípulos. Lléname de tu amor y de fe, Señor, para que yo siempre proclame que tú eres el Señor en comunión con todo tu pueblo.” Amén.
Posted on: Sat, 29 Jun 2013 14:56:06 +0000
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