Menos menos! :/ jaja 5 DE MAYO DE 1977. EN ESTADOS UNIDOS. SE ESTRENA "LA GUERRA DE LAS GALAXIAS", UNA DE LAS MÁS SOBREVALORADAS PELÍCULAS DE CIENCIA FICCIÓN DE TODOS LOS TIEMPOS - desmitificado por BILL HISTORIAS. George Lucas, un tipo porfiado como pocos, consigue estrenar al fin su épica obra "La guerra de las galaxias". La película será saludada como revolucionaria en la ciencia ficción, y una de las más importantes películas de la historia. Además, generará toda una legión de fanáticos que no verán nada más allá de las narices de la aventura de la familia Skywalker. Nada mal para una película cuya historia en realidad es una tontería, la misma historia del campesino que por un golpe de suerte, termina embarcado en una aventura más grande que la vida, consigue rescatar a la princesa, y derrota a una tropa de villanos mientras tanto. Y este copiar y pegar de una serie de historias, de defecto los fanáticos lo convertirán en virtud porque dirán que justo ésa es la gracia de la obra. O sea, lo revolucionario de la película es que no es revolucionaria en lo absoluto. Por cierto, George Lucas no se ha inventado nada. Toda su galaxia no es más que una elaboración sobre las antiguas seriales dominicales de Flash Gordon, y su villano tiene una máscara de samurai japonés porque también le gustan las películas de samurai a lo Akira Kurosawa. Los fanáticos también alegarán que Star Wars es novedosa por los efectos especiales. Lo que demuestra lo poco que el fanático promedio exige. Porque eso es lo importante del cine de ciencia ficción, que haya buenos efectos especiales, que muera mucha gente y exploten muchas naves espaciales, y si explotan planetas tanto mejor, no que haya buenas ideas, conceptos, diálogos o personajes. Así es como los fanáticos de la ciencia ficción en general se irán embruteciendo con el tiempo, arrastrando de paso al cine comercial completo en su irrefrenable caída a los infiernos de la oligofrenia. "La guerra de las galaxias" abrirá de esta manera y poco a poco el camino hacia películas de ciencia ficción cada vez más pretenciosas y vacías como "Matrix", "El día de la independencia" o "Transformers". Por otra parte, George Lucas no es ningún santo. Al contrario de quienes postulan que Lucas es hombre de visión artística, en realidad es un director mediocre que no sabe sacarle buenas actuaciones a sus personajes ni escribir diálogos especialmente memorables. Lo único que redimirá a "La guerra de las galaxias" es haber elegido un elenco ajustadito, que le sacará las castañas del fuego, en particular Harrison Ford, que no por nada será el único actor que conseguirá rentabilizar la popularidad de este personaje en una carrera cinematográfica posterior digna de ese nombre. Lo que sí tiene de bueno George Lucas, es su olfato comercial para darse cuenta de que el negocio está en la mercadería. En años sucesivos, Lucas comenzará a montarse un enorme imperio basado en dos secuelas. Y cuando el mercado comience a languidecer y morir, se sacará una segunda trilogía de la manga para seguir manteniendo la atención y reclutar a una nueva generación de fanáticos. Y para cuando la segunda trilogía empiece a morir, porque será mucho más mediocre que la primera, se proyectará sacar las seis películas en 3D. Pero al contrario de lo que podría parecer, no tenemos por qué criticar a Lucas por esto: en realidad la culpa es de los fanáticos borregos que se compran cualquier idiotez que salga con el logotipo de Star Wars o con la cara de Darth Vader. Puede que George Lucas sea un tipo con una ética discutible en lo que a integridad artística se refiere, pero nadie podría acusarle de robar el dinero que los fanáticos voluntariamente ponen en sus manos, y con una sonrisa los muy tunantes más encima. Así, Star Wars ha abierto la llave para que año tras año, la civilización occidental sea invadida por blockbusters tan espectaculares e inflados por la maquinaria publicitaria de Hollywood, como en esencia olvidables, por no decir clónicos unos de otros. Cada uno acompañado de su correspondiente maquinaria de mercaderías y propaganda. Y todo eso, desperdiciando de manera frívola cientos de millones de dólares que estarían mucho mejor invertidos en financiar investigación científica, apoyar el desarme nuclear, aportar mecenazgo a artistas de verdadero interés, o combatir la hambruna mundial. Porque todas esas películas y todo ese mercadishing irá dirigido a los hijitos de papá del Primer Mundo, no para los esqueletos ambulantes que son los niños de las calles de Calcuta, que no valen nada y son invisibles porque no tienen dinero para pagarse ese nivel de consumo. Y al final, uno de los peores legados de Star Wars será la idea de que toda la ciencia ficción no es más que Star Wars, y por lo tanto, es estúpida, banal e insubstancial. Y los fanáticos reforzarán esa idea, porque siempre es más fácil hacerse fanático de algo simple y sin demasiadas ideas que entender, que de algo más filosófico que requiera pensar un poquito.
Posted on: Tue, 11 Jun 2013 00:11:21 +0000