Mira de Frente Tú, que miraste cabeza abajo la luz y lloraste nomas al mundo llegar. Tú, que pequeña supiste del bien y el mal e inclinaste la mirada ante la sierpe y el chacal. Tú, la para muchos un casi-objeto, mujer, la del soslayo al mirar, la del silencio por voz. Tú, del rostro oculto al llorar para enjuagar el dolor y conjurarlo en los más a costa del propio mal. Tú, que has encorvado tu ser bajo el peso del bregar y del mucho padecer. Tú, del silencioso dolor al ver la muerte pasar y al ser amado partir. Tú, imprescindible cincel que al modelar te consumes dejando en la obra tu ser. Ama y sonríe a la vida que no es pecado ninguno venir al mundo y llorar. Alza la vista, pequeña que no es verguenza el caer si se sabe levantar. Llora sin pena mujer que hay más valor en tu llanto que sal y agua en la mar. Mira de frente ya al mundo que no es verguenza el cansancio producto de la labor Mira serena el camino que no es afrenta ninguna ver los polluelos volar y es el destino del hombre nacer, crecer y morir. Y si a la eterna aflicción de pequeña, pobre y mujer se agrega el reproche cruel o el insolente desdén por ver tu sangre en la lid. Tú, la del mirar con temor, la nunca en primer lugar la del cariño verdad y apoyo incondicional. Tú, la imprescindible, pero invisible a la vez, que no haces ruido al andar, y dejas huella sin par. Miralos, madre, de frente, que no es verguenza pelear por defender la verdad y es un orgullo la sangre repleta de libertad. Levanta, madre, tu rostro mira gallarda, señora que has aportado una gota al mar de la dignidad.
Posted on: Thu, 22 Aug 2013 02:55:47 +0000