Namaste Namaste en nuestro día a día La palabra "Namaste" se ha vuelto muy conocida en los últimos años, principalmente si te mueves en un "mundo yogui". Seguramente la has dicho alguna vez, y es probable que ya hayas escuchado hablar del significado que te comenté antes. Sin embargo, lo que quiero comentarte en este artículo de hoy, más que el significado, que a veces se queda solo en palabras, es la vivencia real, en nuestro día a día, de este saludo. ¿Te imaginas la diferencia que veríamos en el mundo, si cada vez que decimos Namaste, sentimos desde lo más profundo de nuestro ser que nos estamos reverenciando ante otra alma, sin juzgar, sintiendo a esa otra persona que es una, contigo y con el universo? Es posible que te identifiques con muchas de las experiencias que has vivido: numerosos atardeceres disfrutados, la brisa del mar que has respirado, los amigos que has hecho, el amor que has compartido, las veces que has reído y que has llorado. Ten en cuenta entonces, que a las demás personas les suele suceder lo mismo. La persona que te atiende en el supermercado, la que te trae la correspondencia, tu pareja, incluso, ese "molesto" compañero de trabajo... todos ellos llevan consigo sus propias experiencias vividas, tienen su propia historia de amor y desamor, sus propios lugares hermosos. Es fácil ver la superficie de una persona y juzgarla solamente por lo que te muestran en una situación dada. Hoy te animo a que hagas un ejercicio, que te sacará de esta inercia que llevas, de las creencias que te limitan a mirar con los ojos del amor. La próxima interacción que tengas con alguna persona, no la etiquetes, no le pongas un nombre, no la alejes de ti con tus palabras. No digas: la cajera, el cartero, mi pareja, el molesto compañero de trabajo. Simplemente observa a la persona, sin juzgarla para bien ni para mal. De esta forma simple, ¡pero que lleva mucha práctica!, podrás conocer un poco más de los que te rodean, ver un poco más allá de lo que has visto hasta ahora, que posiblemente ha sido lo que has querido ver, y no lo que realmente son. Cuando vuelvas a tropezarte con alguien, trata de ser consciente de que somos únicos, diferentes. Pero que esto no te aparte de la otra persona, sino que sientas la unidad que tienes con ella. Esta práctica sin duda alguna te hará perdonar, aceptar, y expresar tu amor con mayor facilidad. Para mí Namaste significa que te "veo". Entiendo que somos dos (o más) almas que transitamos nuestro propio camino, y agradezco esta interacción que tengo contigo, AQUÍ y AHORA. Es por eso querid@ amig@, que ahora, una vez más, "saludo el lugar donde tú y yo somos uno". Y tú... ¿qué significado le das a la palabra Namaste? ¡Namaste! Naylín
Posted on: Mon, 23 Sep 2013 22:49:30 +0000
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