Ni la llegada de militares a los mandos policiacos, ni la famosa "certificación" de los policías y ni las millonarias cantidades que dicen las autoridades que se han invertido para mejorar la seguridad, han frenado la ola criminógena que azota a esta capital. Los robos con violencia (asaltos), los "cristalazos", los hurtos de vehículos (diario se roban 17 autos en Morelia), los saqueos a casas habitación, las acciones de los "retinteros, paqueros, zorreros y hasta mariposeros" van alarmantemente en aumento y nadie, absolutamente nadie, ni el Soberano de Wilylandia, Wilfrido Lázaro Medina, hacen absolutamente nada para frenar esta grave situación. No pretendo ser fatalista sino realista. Con simples declaraciones, falsas posturas y cifras maquilladas pretenden manipular nuestras conciencias para que percibamos, al menos en los sueños, que las cosas mejoran. Es cierto que la policía carece de equipo, estímulos, patrullas, de promociones, pero acaso tiene la culpa el ciudadano de esto?. La incapacidad que estamos viendo para frenar la delincuencia en Morelia es manifiesta. Quizá haya hasta una red de complicidades entre la autoridad policiaca (Procuraduría, Secretaría de Seguridad Pública y Municipal) y los que parecen amos de la capital Michoacana: los ladrones.
Posted on: Tue, 03 Sep 2013 11:36:29 +0000