No.31 Cólicos renales. En días pasados tuve que acudir de urgencia a una clínica muy reconocida en mi ciudad, debido a un fuerte cólico renal producido por cálculos. Me aplicaron una inyección de Buscapina compuesta, pero el dolor continuó igual, finalmente el médico a las 4 de la madrugada, me prescribió una inyección de Tramal (que es utilizada para aliviar los dolores del cáncer), pero esta fue aplicada por error al paciente de la camilla de al lado, que estaba allí por una hipertensión arterial. Mi esposa se dio cuenta de la situación y protestó, al igual que los familiares del señor de la otra camilla, quienes formaron tal escándalo, que hizo necesario que viniera el jefe de urgencias, quien cínicamente calmó a los familiares del paciente, afirmando que el Tramal servía para relajar los músculos. En esos momentos y por haber asistido a una conferencia de urinoterapia en el Centro Anael, recordé que la orina me podría ayudar e inmediatamente fui al baño y me tomé un vaso y el dolor comenzó a ceder, al tomar otro vaso, ya no tenía ningún dolor y fui dado de alta sin que me aplicaran el temible Tramal. Giovanni. Barranquilla. No.32 Faringitis crónica Soy mecánico industrial, tengo 49 años, viví en Estados Unidos 10 y tengo 2 de vivir aquí en Barranquilla, que es la fortaleza de la urinoterapia en Colombia y en Suramérica. A la edad de los 18 años comencé a sufrir de faringitis granulosa, inicialmente y luego se me convirtió en una faringitis crónica, debido a una alergia. Visité muchísimos médmicos y especialistas en Estados Unidos, utilicé todas las terapias que me indicaron, hasta que finalmente un otorrinolaringólogo, prácticamente me desahució, afirmando que mi enfermedad era incurable, pues era debido a una alergia de tipo desconocido y me indicó que debía utilizar una mascarilla de manera permanente, al igual que siguiera usando el tratamiento que tanto tiempo había estado utilizando, o sea, aplicándome cada mes una inyección de Benzetacil de 1.200.000 UI, la cual sólo me mejoraba, pero no me curaba. Cuando cumplía el mes y pasaba el efecto de la inyección, me regresaban las fiebres, la inflamación y me veía obligado a aplicarme nuevamente la inyección. Durante una visita que realicé a mi hermana, encontré allí un folleto de urinoterapia y comencé con decisión a tomar mi orina en ayunas, orina milagrosa, porque en muy poco tiempo produjo la cura total a mi padecimiento, al igual que mejoró notablemente mi función digestiva.Actualmente tomo toda la orina que produzco en el día y la seguiré tomando toda la vida. Gabriel Moncayo. Barranquilla. No.33 Cáncer en la próstata. Después de una biopsia y del examen patológico, el médico me diagnosticó cáncer en la próstata y quería aplicarme radioterapia y quimioterapia, pero no acepté. Un amigo me recomendó tomar la orina y me regaló un folleto de urinoterapia. Comencé a tomarla diariamente y hoy estoy totalmente curado. Carlos, Colombia. No.34 Esguince y fuerte dolor en tobillo y pierna. Al bajarme de un bus urbano se me dobló el pie izquierdo y me caí. Cuando me levante no podía afirmarlo ya que se me habían encaramado unas venas. Esto me sucedió a las 7 de la noche. Me froté un ungüento y me acosté, al día siguiente y al levantarme, me dolía desde la rodilla hasta la planta del pie y no podía caminar, ya que me dolía demasiado. Fui al baño y oriné en un vaso y me la tomé, lo repetí a los 10 minutos, volví a hacerlo y comencé a sentir alivio del dolor. A la cuarta vez que la tomé, ya podía afirmar el pie y cojeaba, pero muy mínimo. Al día siguiente no tenía el dolor. Narly, discípula del Centro Anael de Barranquilla. No.35 Fuerte dolor de cabeza. Me dio un fuerte dolor de cabeza, tomé toda clase de pastillas y seguía igual. Al quinto día un amigo me dijo que la orina curaba todas las enfermedades y me tomé mi orina y mi esposo me frotó de su orina en mi cabeza y a la media hora se me quitó el dolor. Carmen de Colombia. No.36 Estreñimiento y capacidades físicas. Tengo 15 años, curso grado 11, desde que nací sufría de estreñimiento. Hace 11 meses consumo mi orina, inicialmente tomaba poca cantidad, pero actualmente consumo toda la orina que produce mi organismo diariamente y ésto ha mejorado significativamente mi vida, pues ya no sufro de estreñimiento, mi rendimiento académico es óptimo, pues soy el mejor alumno del curso, he desarrollado una gran capacidad de memoria, practico el fútbol y no me canso, no me deshidrato, manteniendo gran vigor y energía física. He aumentado de peso y no me enfermo de nada. Me la tomaré por siempre. Alexander. Barranquilla, Colombia. No.37 Presión alta, osteoporosis y alergia en los ojos. Mi madre tiene 70 años y padecía de hipertensión, por lo que debía consumir 3 pastillas de Captopril al día. Comencé a asistir a las conferencias de urinoterapia en el Centro Anael y se curó mi estreñimiento. Le recomendé tomarla a mi madre y a los 3 meses suspendió las pastillas y ya no necesita tomarlas, ya que mantiene una presión normal, también se ha curado de una alergia en los ojos. Ella se lava la cara con orina y se la aplica en los ojos. Ya no padece de los dolores de la osteoporosis y su salud ha mejorado notablemente. La orina ha sido una bendición para mi madre. Carlos Donado. Barranquilla, Colombia. No.38 Dolor en el brazo. Mi hermana tenía un fuerte dolor en el brazo y como muy amiga de la medicina alopática acudió donde un especialista; en medicina y exámenes, se gastó $400.000, pero el dolor continuaba. Le recomendé la urinoterapia, comenzó a tomarla y a untársela en el brazo y a los pocos días desapareció el dolor. No.39 Estrés. He sacado muchas copias de la Urinoterapia y las sigo repartiendo, pues tuve la suerte de aplicarla en mi persona y me curé del estrés. Tenía varios meses de estar en tratamiento en el Seguro Social de mi país, sin ningún resultado. Gracias a ustedes me siento con ganas de vivir. Antonio, Honduras. No.40 Cólicos menstruales. Hace 9 años aproximadamente, sufrí de terribles cólicos menstruales que me obligaban a estar acostada. Estos cólicos acompañados con dolor y pesadez en las piernas, en las caderas, etc. Concurrí a las conferencias de Urinoterapia en el Centro Anael y procedí inmediatamente a tomarla. Empecé con 3 dedos y luego llegué a un vaso en ayunas. En menos de un mes mis cólicos han desaparecido totalmente y me la tomaré toda la vida. Yeline Arrieta. Barranquilla, Colombia. No.41 Ciática. Durante más de 2 años padecí de un fuerte dolor que se iniciaba a nivel del glúteo derecho y bajaba por toda la pierna derecha, un dolor en el nervio ciático. Siempre en la noche, cuando me levantaba, debía agarrarme de las paredes para poder llegar al baño. En el transcurso del día se me mejoraba el dolor tomando Apronax u otros analgésicos. La última médica me dijo que era una lesión en la columna y que podía ser grave. Fue entonces cuando decidí asistir a las conferencias en el Centro Anael para escuchar sobre la Urinoterapia y desde la mañana siguiente comencé a tomarla. Eso fue hace 15 días y el dolor desapareció y me siento muy bien. La tomaré durante el resto de mi vida. José Anaya. Comerciante. Barranquilla, Colombia. No.42 Absceso. Mi nombre es Javier Cepeda, de profesión vendedor y tengo 54 años. Hace 2 meses se me presentó una protuberancia en la parte baja de la espalda, a nivel del coxis y de la columna; presentaba dolor intenso y fiebre, en tal forma que no podía dormir en la cama y sólo podía descansar sentado. También me había afectado el sistema linfático, ya que tenía los ganglios inflamados. Mi familia me llevó donde los médicos alópatas, pero ellos me dijeron que debía operarme. Comencé a asistir al Centro Anael y a escuchar las conferencias de Urinoterapia, donde me indicaron las dietas, el ayuno y la forma de iniciar el tratamiento, lo cual hice inmediatamente, comenzando con 2 vasos en ayunas y a los 12 días se me reventó, emanando abundante líquido morboso y mal oliente. El dolor y la fiebre desaparecieron. Doy gracias al Centro Anael por haberme ayudado a curar esta enfermedad. Barranquilla, Colombia. No.43 Tuberculosis e insomnio. Tengo 56 años y desde hace varios años padecía de tuberculosis pulmonar y durante 6 meses fui sometido a tratamientos alopáticos para curarla, pero la tos continuaba, además, sufría de insomnio y mi estado de salud cada día iba de mal en peor, por lo que mi hijo decidió llevarme a escuchar las conferencias en el Centro Anael; desde ese momento, que fue en el mes de junio del 2.009, comencé a practicar la Urinoterapia y me tomo 2 vasos en ayunas y si antes de comenzar la Urinoterapia salía positivo en las pruebas de laboratorio, a los 3 meses de tomarla me realicé la prueba y salió negativa, o sea, ¡estoy curado!, además, duermo toda la noche y realizo mis actividades con normalidad y con mucho vigor. Jesús Romero. Barranquilla, Colombia. No.44 Herida profunda. Hace 5 días tuve un accidente en mi moto, que me produjo una herida profunda a lo largo de mi pantorrilla en la pierna derecha y que de haber acudido a urgencia me hubiesen realizado muchos puntos de sutura. Conozco la Urinoterapia, pues he escuchado las conferencias en el Centro Anael y desde el momento en que sufrí el accidente comencé a limpiar la herida con un paño limpio empapado con mi propia orina; ésto lo realicé durante dos días. Al tercer día note que la herida estaba cicatrizando rápidamente, llamando carne y rellenándose nuevamente de tejido sano. Hoy, al quinto día, mi herida está completamente cerrada y la cicatriz está tomando el color de mi piel. Gracias a esta medicina natural no tuve necesidad de asistir a ninguna entidad de salud. Anuar, 28 años. Barranquilla, Colombia. No.45 Cáncer de Riñón. Soy vendedor de libros y de mucho me ha servido, ya que me sentía unas masas en la región de los riñones, fui al médico y después de una serie de exámenes, se me diagnosticó cáncer de riñón. La doctora que me trataba, me recetó unos fármacos o medicina indicada, pero como soy una persona de escasos recursos económicos no pude comprarlos. En mi puesto de libros tenía un libro de Urinoterapia, lo leí y comencé a tomar mi propia orina. A los dos meses sentí una gran mejoría, me repitieron los exámenes y el resultado fue negativo y ésto causó gran asombro a la oncóloga, quien me preguntó qué había hecho, porque la cura fue milagrosa. Le conté que por mis escasos recursos no pude comprar la medicina que me recetó y que siguiendo las indicaciones de un libro de Urinoterapia, me he estado tomando diariamente mi orina. A los pocos días se presentó en mi puesto de ventas la oncóloga y me compró el libro de Urinoterapia. Al mes se presentó con su esposo que también es médico a darme las gracias, porque ella también se había curado de una extraña enfermedad, pero no mencionó su nombre y para la cual nunca encontró la medicina que la pudiera curar. Enrique de Barranquilla, Colombia. No.46 Ingresé a esta página y quiero comentarles que practico la Urinoterapia desde hace 7 años, tengo 43 años y gracias a esta práctica gozo de buena salud, los felicito por la publicación de los testimonios. Gladis, Perú. No.47 Convulsiones – Hernia Hiatal. Yo sufría de convulsiones desde los 23 años. Visite varios neurólogos y usaba tegretol, epamin, pero me seguían las convulsiones, hasta que un día un buen amigo me invito a las conferencias de urinoterapia en el Centro Anael y desde ese día comencé a tomarme la orina y a los 3 meses me curé totalmente de las convulsiones, ya no tomo ninguna clase de medicamentos. Con el tratamiento de la orina también me cure de una hernia hiatal, la cual era palpable y desapareció totalmente, no siento ninguna clase de malestar. Además, el dolor en las piernas y todo lo demás desapareció, hasta un lobanillo que tengo en la frente está disminuyendo de tamaño. Gracias a Dios, a mi amigo que me llevo a las conferencias y al Centro Anael soy una persona nueva. Alberto Cudriz, 38 años, vigilante. Barranquilla, Colombia No.48 Hemorragia Vaginal - Presión Alta – Migrañas – Agotamiento Físico. Desde hace años padecía de hemorragia vaginal, la cual me obligaba a usar pañales desechables, sufría además de presión alta, migrañas, dolor en las piernas y agotamiento físico. Los médicos me recetaban Ibuprofeno, Captopril y otros medicamentos que me calmaban las molestias, pero nunca me curaban. A partir de noviembre del 2009, comencé a asistir a las conferencias de Urinoterapia en el Centro Anael y empecé a tomar mi propia orina, hoy, enero del 2010, ¡estoy curada! y se me desaparecieron totalmente mis dolencias. He mejorado mi alimentación evitando comidas chatarras o basura, gallinas y huevos alimentados con hormonas y siguiendo las indicaciones que se entregan en las conferencias. Sólo me que por agradecer a Dios y al Centro Anael por mi buen estado de salud. Ingrid, ama de casa, 38 años, Barranquilla. No.49 DIABETES MELLITUS – CÁLCULOS – HIPERTENSIÓN. Mi edad: 48 años. Hace 13 me diagnosticaron Diabetes miellitus y ésta me produjo hipertensión arterial y sufrí además de un pre-infarto cardíaco. Debido a que la diabetes no había sido bien tratada, tuve que someterme a intensos tratamientos. Lastimosamente, tuve que recurrir a la insulina y fui insulinodependiente durante 5 meses. Estaba desesperado con mis males y además, también tenía cálculos renales. Por todo ésto, estuve algún tiempo incapacitado. Afortunadamente, un amigo me invitó a las conferencias de urinoterapia en el Centro Anael, recibí todas las instrucciones y al día siguiente me inicié en esta terapia maravillosa. Inmediatamente comencé a sentir mejoría. Al mes me realicé el examen de glicemia y la tengo en 110, por lo que el médico me suspendió la insulina. Me realicé igualmente, una ecografía renal y ya tengo mi riñón derecho totalmente libre de cálculos, ya puedo trabajar. Gracias a Dios y al Centro Anael que me salvaron la vida. Antonio Orozco. Barranquilla, Colombia. No.50 CÁNCER DE SENO. Me detectaron cáncer de seno, no quise someterme a ningún tratamiento alopático y asistí a las conferencias del Centro Anael. Comencé a tomar mi orina, el tiempo pasaba y mi tumor disminuía. A los 2 meses me sometí al examen correspondiente y… estaba curada. Carmen de Barranquilla.
Posted on: Mon, 02 Sep 2013 06:13:38 +0000
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