Oberá. Un niño de tercer grado atacó con una navaja a su compañero El niño, de apenas 8 años, aparentemente reaccionó por los constantes episodios de acoso y burlas de sus compañeros y en un recreo del miércoles con un cortaplumas hirió en el cuello a otro alumno Un alumno que asiste a tercer grado del Instituto Privado Mariano de Oberá, atacó a un compañero con una navaja y le produjo un corte en el cuello. Si bien la lesión no revistió mayor gravedad, el hecho generó el airado reclamo de los padres del niño atacado, a lo que las autoridades escolares respondieron radicando la exposición policial correspondiente en la Seccional Primera de esta localidad. Al tratarse de dos conocidas familias obereñas, las partes acordaron bajar el tenor mediático y aclarar la cuestión a puertas cerradas. De todas formas, docentes y padres se mostraron preocupados por una situación que calificaron de “extrema violencia”, ya que tanto el agresor como el agredido tienen apenas ocho años. Más allá del hermetismo con que los directivos manejaron el caso, El Territorio pudo saber que el atacante habría argumentado que estaba cansado de las burlas de su compañero, por lo que se trataría de un nuevo episodio de bullying o acoso escolar. “Pudo ser una tragedia” “Estamos muy preocupados por el hecho de que un chico traiga una navaja al colegio, más teniendo en cuenta la edad y el coraje que tuvo para atacar a un compañero. Pudo ser una tragedia y todavía estaríamos llorando. No queremos llegar al punto de tener que revisar a los chicos en la entrada, pero estas cosas nos hacen pensar”, señaló una docente del establecimiento educativo. El hecho se produjo el miércoles durante un recreo. El agresor tenía un cortaplumas en el bolsillo del pantalón y, cansado de las burlas, atacó a su compañero de grado sin mediar advertencias o gestos que alertaran el hecho. Fueron testigos del episodio varios menores, quienes al ver el elemento cortante salieron corriendo del grado para dar aviso a la docente, que llegó y vio al agredido llorando y tomándose la zona del cuello y la oreja, donde recibió un leve corte. “Gracias a Dios la herida fue superficial y ni siquiera hizo falta realizarle puntos de sutura al chico. Pero resulta muy traumático para todos, no sólo para los niños involucrados, sino para todo el colegio y las familias. No hay que estigmatizar a los chicos, pero tampoco podemos decir que acá no pasó nada”, insistió un padre de la comunidad escolar. “Nada para decir” Contrariamente a la preocupación de los padres y docentes, desde la Dirección de la escuela se trató de minimizar el hecho y escudándose en la reserva de la identidad de los menores no brindaron detalles al respecto. “No fue tan grave ni tenemos por qué ventilar lo que pasa en la institución. Lo solucionamos puertas adentro. Convocamos a los padres, charlamos y se aclaró todo. También hicimos la exposición. No tengo nada más que decir al respecto”, fue la escueta explicación que brindó a este medio la hermana Martina, directora del Instituto Privado Mariano. Antecedentes de violencia escolar En abril pasado, el padre de un alumno de la Escuela Provincial de Comercio Nº 1 radicó una denuncia por amenazas ante la Seccional Segunda de Policía, luego de que su hijo fuera amedrentado en el baño de la institución por estudiantes del mismo colegio. “Te vamos a dar con un caño”, denunció que lo amenazaron sus pares. Muy asustado, ya que desde el año pasado venía siendo víctima de constantes agresiones por parte de la misma patota, inmediatamente el menor se contactó con su madre. “Vení a buscarme porque de esta no zafo, me quieren matar”, fue el mensaje que disparó la intervención de sus padres. “Él y nosotros tenemos mucho miedo, porque una cosa es una pelea, pero otra es que te amenacen con que te van a pegar un tiro. Es muy grave lo que pasó”, comentó la madre, Natalia Artichuk. La mujer confirmó la denuncia y comentó que desde el año pasado su hijo es amedrentado y perseguido por el mismo grupo. “Dos o tres veces ya vino con la boca reventada, y en la escuela me decían que los chicos son así y que ellos no pueden hacer nada, menos si las cosas pasan del portón para afuera. Y le agarran por el camino, porque si nosotros no le podemos buscar, se va caminando porque no hay colectivos para donde vivimos”, detalló. En tanto que, el año pasado, un alumno de catorce años del Instituto SOS, Hermann Gmeiner, también de Oberá, atacó con un cuchillo a otro menor a la salida de clases y le produjo un corte en el cuello, lo que pudo ocasionar una tragedia. Meses antes, trascendió que un alumno de la Escuela de Comercio Uno amenazó con un cuchillo a un compañero a la salida de clases, según el testimonio de varios testigos. El episodio ocurrió a la salida del turno mañana, cuando una discusión que se inició en el patio del colegio culminó en la vereda con un alumno que exhibió un cuchillo para amedrentar a un compañero.(territoriodigital - oberaonline.ar)
Posted on: Sun, 18 Aug 2013 11:52:43 +0000
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