POMPEI Y EL CENTRO A LA OLLA, COCINARON EL CENTRO ATRAS… Una semana sin emergencia no es una semana argentina. El veranito terminó en un temporal de 4 días y va para más. Así fue que el fuego hizo desastres en Córdoba. Los maestros fueron invitados a no ser “amargos” por la Presidenta. En Corrientes se centró la expectativa política. Y hubo de todo. Desde piñas, hasta zapatillas, por un voto. Era una elección testigo bis. Y estuvo palo y palo. Y en medio de la calentura sobrevinó un frío polar. Parque Lezama para mí, Misa Ricotera, Springsteen, para otros. Y mucho calor de hogar para la mayoría. Estufas que se volvieron a encender. Y por T.V. La gran actuación de los Pumas, La Davis, la desunión, la derrota y “nunca una alegría”. A la noche Mathisse el dedo en el ojo de Danny garcía y su coraje, aún en la chance frustrada por el título Welter Jr. Antes la preocupación de ver otra vez a Messi en una pierna y ganando igual un partido sobre la hora. Sorpresas en Velez otra vez goleado. San Lorenzo que sin Cauteruccio no lastima. Newell¨s y una nueva revancha con el gran Maxi y David. Almeyda que ahora juega con linea de tres y le hace precio al Rojo. Y el domingo, la Davis, la desunión, la derrota y “nunca una alegría”. La buena actuación de Gago y de la contra. Y la nota trágica casi en simultáneo. La carta natal que no pudo predecir su propia muerte. Q.E.P.D. Lily Sullos. Y ahora a esperar a River con ilusión , en medio de la tempestad. Cuando Manu Lanzini apuntó tan bien que Campestrini no llegaba, yo estaba tan relajado – iba por la segunda empanada- casi ni cuenta me dí que su tiro dió en el poste y salió para adentro,. Pensé y le dije a mi sobrino. Tengo el el título. ¿Cuál es? –me preguntó. “La noche del centro atrás”- contesté. Tantas veces lo había esperado. Esta vez, primero Carbonero levantó la cabeza y convirtió a Mercado en goleador. Y después hubo una tercera, que el Manu enganchó medio pifiada de zurda y le salió mordida cerca del palo izquierdo. Todo parecía tan simple. River dueño absoluto del juego. Tocando corto, saliendo limpio. Lanzini cada vez más vertical. Carbonero que arrancó con un sablazo que besó el travesaño, se comió la banda derecha. Teo tirado más atrás todavía dando ventajas físicas impuso su calidad. A falta de velocidad jugó a un toque, siempre correcto. Facil. Y el Lobo a sus anchas. Rojas que le hace de estación. Y se la prestan de a ratos. Y un Bottinelli prolijo. Más quedado que de costumbre Vangioni, pero compensando con Mercado. Que esta vez sorprendió con oportunismo, presición y alguna diagonal. Atrás el arquero mejor parado que yo ví. No vuela, ni es tribunero. Está siempre en el lugar correcto. Paró una con una mano. Otra sin moverse la tiró por arriba con las dos. Impresiona, su capacidad de ubicación. Ni se ensucia. Maidana fue el más aspero. Pero a Pompei se le empezó a calentar el bolsillo y lo amonestó tempranito cuando los “yogures” que eligió Alfaro, aprovecharon del campo resbaloso para amedrentar antes que jugar. Por eso Rolle, sorpresivamente, quedó en el banco. Y esa exigua ventaja, que no se concretó en la red es ley de juego que se paga. Me voy a rectificar. Ayer dije, que River sobró el partido. Hoy creo que se confió. Y jugó toda la segunda parte con media cabeza puesta en Ecuador y la otra con el botón automático. Como si todo lo bueno en la primera etapa se debiera repetir. Como si el rival no iría a cambiar. Y cambió. Entró el zurdo ex Olimpo y con su zurdita lo complico.Para colmo metió a Furch y nos dió muestras del hervor que nos falta. Aprovechó su idea de raspar la olla. Y en una sola después de un rebote insólito.- absolutamente adelantado- desnudó la rigidez hasta allí no evidenciada por Bottinelli. Pareció Berkamp en Francia. La controló como el holandés y le metió un fierrazo -nada que ver con el fino ex Arsenal de Inglaterra- imposible para Trapito. Increíble. Volvía sentir escalofríos. Me morfé los puchos. Y pensé como se estaría puteando Ramón. Que se le veía venir. Y cuando iba a reforzar con Ponzio en el medio, donde todo era un ping pong sin sentido. Les cayó del cielo el empate. La cabeza del riojano también lo traicionó. Y si bien Arsenal nunca preocupó demasiado. El partido era otro. Los graníticicos gigantes que se desmoronaron ante el “toquecito” del primer tiempo, hicieron valer su potencia física. Y Pompei, árbitro permisivo si los hay, en ese escenario favoreció al local. No es excusa. River se empató solo. Cuando pudo mandar “ Al Faro del fin del mundo a los del viaducto les perdonó la vida”. Después desapareció. Una tibia reacción del final con el Malevo que no intimida a nadie y el pibe Simeone que entró tarde también. Volvió a quedar lejos la punta. Pero todo está abierto. Me quedó con el concepto del centro atrás. Igualmente volví a casa apesadumbrado- Crucé Cabildo congelado. Me cociné una sopa de “centros a los ollas” y como si fuera la borra del café cuando la revolvía vi la carita de yo no fui de Pompei, el River que se hizo Negro y se encapotó solito. Otra vez a remarla, de atrás. Mientras tanto, hoy, lunes reconoció su error – Ramón también… y sabiamente agregó-. “Esta bien pero ya basta de decir. Perdón, yo lo maté. Me equivoqué. Esa es la más facil. Son muchos fallos decisivos en contra ¿No?”. El jueves, dice el pronóstico vuelve el calorcito. A ver si nos sacamos el enojo por la copa. Y el domingo vuelve el desborde y el centro de la muerte al punto del penal. ¿Quién te dice?. Alguna vez hay que aprender. ¡¡¡Te quiero Riverrrrr!!!
Posted on: Tue, 17 Sep 2013 10:45:19 +0000
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