PRASHA “VAIGASH” “Un poco de legumbre, pero con - TopicsExpress



          

PRASHA “VAIGASH” “Un poco de legumbre, pero con amor” El rey Shlomó escribe en los capítulos 15 y 17 de Mishlé respectivamente: “Es mejor comer una comida de legumbres con amor que la mejor carne con tristeza” y agrega: “Más vale un bocado de pan seco pero con tranquilidad, que una casa llena de festines con peleas”. De esta manera nos enseña que la felicidad no se encuentra en los manjares y ricas comidas, sino en la paz y en la tranquilidad del hogar. Al respecto, el Midrásh comenta que dos personas encontraron al rey Shlomo cuando había sido expulsado de su reinado y debió comportarse como mendigo para poder conseguir su sustento. Una de ellas lo llevó a su casa y le preparó la mejor comida, pero le recordó la época en donde había sido rey, toda la honra que había tenido y que ahora, lamentablemente, había perdido. El rey Shlomo se llenó de tristeza y lloró a su casa ofreciéndole sólo un poco de legumbre, pero lo consoló por el difícil momento que vivía diciéndole: “HaShem es como un padre que a veces debe castigar a su hijo, pero finalmente te regresará a tu reinado como lo prometió a tu padre David”. El rey Shlomo se reconfortó al escuchar esas palabras y dijo: “Fue mejor ese poco de legumbre en la casa del pobre, que la carne que me había dado el rico. Aplicando estos conceptos a nuestra vida diaria, podemos llenarnos de enseñanzas. Por ejemplo, aprendemos que el hombre no debe ser detallista y pretender que todas las cosas sucedan como él estrictamente desea, sino que debe ser tolerante y no ser exagerado en el control de los gastos del hogar (no como aquellos que piden una cuenta detallada número por número de los gastos diarios). Tampoco se debe pelear o protestar si la comida no está tan a gusto como se pretendía. En una oportunidad, el Jafez Jaim fue a visitar a una ciudad y se hospedó en la casa del Rav del lugar. La señora del Rav preparó una sopa para el ilustre visitante, pero se olvidó de avisarle a la mujer que la ayudaba en la cocina que ya le había puesto sal. La ayudante volvió a colocar sal en la sopa. Cuando le sirvieron la sopa al Jafez Jaim, la tomó en forma absolutamente normal. E l Rav dueño de la casa, al tomar la sopa y lo miró sorprendido al Jafet Jaim que había terminado su plato. El Jafez Jaim le dijo: “Debes callarte, seguramente la ayudante se equivocó. No debes hacerla sufrir criticándola. Quizás tu señora se peleará con ella, lo que sería más grave aún. Por eso – continuó el Jafez Jaim – debes decir que la sopa estaba rica, para así traer alegría y paz en el hogar”. Por otra parte, debemos tener presente que la comida es necesaria para estar sanos y fuertes para poder servir a HaShem. Si así procede la persona en cada instante en que se alimenta, cumple con una mitzvá porque come “Leshem Shamaim y no por un interés o provecho propio. Así se comenta sobre el Rabí Israel Abujazira Z”L a quien a terminar un ayuno, su esposa le acercó un plato de comida para que pudiera recuperarse. El Rav probó un bocado y no comió más. La señora le preguntó: “¿Acaso le falta algún condimento?” El Rav le contestó: “Por el contrario, está demasiado rica. Es por eso que no como, ya que sentiría un provecho y placer especial al comerla. Sólo debo comer para poder mantenerme físicamente. De lo contrario, no actuaría Leshem Shamaim”. Los comentarios que podamos agregar están demás ante la claridad de los conceptos: cuidar el Shalom Bait es lo más valioso que existe en un hogar. Que nunca la comida sea el motivo de una pelea o discusión. El Gaón Ribi Israel Meir Hacohen Z”L, conocido como Jafez Jaim, se casó con el Shalom. Sí fue el Maasé: el Jafez Jaim quedó huérfano de padre de pequeño. Su madre viuda, después de tres años volvió a casarse con uno de los alumnos de la yeshivá de Volozhin llamado Ribí Shimhon, quien había tenido en un casamiento anterior una hija, ala que quería casar con el “joven brillante”, su hijastro, quien en poco tiempo sería reconocido como el Jafez Jaim. La familia del Jafez Jaim se oponía a este casamiento por varios motivos. La joven era bastante mayor que él. Además, el Jafez Jaim era conocido por varios millonarios del lugar que pretendían casarlo con sus hijas, por la capacidad que tenía. Pero frente a todas estas cuentas, había otro razonamiento que el propio Jafez Jaim explicó: el Shalom entre su madre y su padrastro, puesto que seguramente negarse iba a traer discusiones entre ellos., El Jafez Jaim aceptó y fue a convencer a todos sus familiares, para que ellos también estuvieran de acuerdo. Aprendamos de este Maasé hasta qué punto los Jajamin de Israel se preocupan por el Shalom Bait, olvidándose de riqueza, honra o cualquier otro detalle, con tal de no provocar una pelea entre una pareja. Así como es de importante cuidar el Shalom entre el marido y mujer, se debe estar atento a no provocar discusiones entre ellos. Por ejemplo, si alguien comenta que su esposa lo hace sufrir con su comportamiento, quien escucha no debe decirle: “te compadezco por la vida que llevas” o frases similares, sino que debe buscar la manera de consolarlo justificando la actitud de su esposa: “Quizás fue sin querer, estaría nerviosa, no fue con intención, etc.” Para Tratar de apagar el fuego de la pelea y recibir así la Berajáh” de alcanzar larga vida con prosperidad (Midrásh Tanjumá Itró 17) Si queremos saber hasta qué punto es valorado el Shalom Bait a los ojos de HaShem, analicemos las palabras del Rav Abudarham ZW”L cuando explica el motivo por el que las mujeres están exceptuadas de los preceptos positivos que dependen de un tiempo fijo (Tzitzit, Tefilin, etc.): “Si estuvieran obligada a cumplir este tipo de preceptos, es probable que simultáneamente su marido le solicitará algo que necesita y ella no podría hacerlo por encontrarse ocupada con esa Mitzvá de tiempo fijo. Por eso, el Creador la exceptuó para que habite con Shalom con su esposo”. O sea, estrictamente la mujer debería estar obligada como el hombre a cumplir con estos preceptos, pero HaShem la exceptuó para que la paz reine n el hogar. Imitemos a HaShem en este punto de saber perdonar y exceptuar en áreas del Shalom. Aprendamos a cerrar los ojos ante muchas situaciones que se presentan diariamente y la dicha y la felicidad reinarán en nuestros hogares. Shalom Recopilado por Yaakov Nehmer del rabino Rafa´el Freue
Posted on: Tue, 26 Nov 2013 02:33:16 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015