REGLAS DE CONVIVENCIA. TOMO UNO FERMÍN Llegamos a casa luego de una tarde extensa en la escuela: Fermín y yo, su madre maestra. La escena en mi casa: Mi hijo Matías de 20 años adoleciendo cronicamente, incansablemente, desconsoladamente.....se encuentra estudiando en la mesa del living. En la cual esparció todas sus pertenencias: medias, sifón de soda, lápices, apuntes, papeles de chocolate, tazas de té y café, boletos de bondi, botellitas vacías de agua ya tomada y evacuada, etc. Entré en cólera, muy fácil para mí, en un estado de climaterio y premenstrual. O sea, un funcionamiento casi hormonal que no sirve para nada, sólo molesta. Mi descarga: -Mirá Matías (20 años): limpiá y ordená todo. Si no aceptás las normas de convivencia, ya te dije varias veces, buscate otro lugar para vivir. Esta casa tiene reglas claras- le dije con un tono que invitaba, sugería....."tomarse el palo". Fermín miraba atento, mientras comía uno a uno los chizitos que había empezado a saborear en el auto durante el viaje de regreso al "dulce hogar amargo hogar". Parado , con la mochila aun colgada de los hombros, Fermín, que tiene una complicadísima relación con su hermano veinteañero, concluye: -Por favor, no las aceptes. rO
Posted on: Thu, 19 Sep 2013 11:50:44 +0000
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