Roma, que había perdido su poderío político y militar a consecuencia de la invasión napoleónica, después de muchos siglos de persecución, masacre y martirio de millones de cristianos y gente inocente —por la mano de los sanguinarios emperadores romanos, y posteriormente por el despiadado papado religioso de Roma con sus horrendas cruzadas y su diabólica inquisición—, resurgirá nuevamente con gran poder a manos del Anticristo, y muchos se asombrarán en gran manera al verlo reaparecer. (Ver Apocalipsis 17:6-8.) Sigue diciendo la profecía, que las siete cabezas representan también siete reinos de los cuales cinco han caído —Egipto, Asiria, Babilonia, Medo-Persia y Grecia— y uno de ellos gobierna en la época en que se recibió la profecía: el imperio de Roma. El reino que viene después de éste —el imperio capitalista— no durará mucho, comparado con la duración de los imperios anteriores. La Bestia que antes existía, y que ya no existe, es el octavo reino y es también uno de los otros siete imperios, el cual se había debilitado, pero que en el momento señalado ganará fuerza otra vez, restaurándose así la supremacía de Roma. (Ver Apocalipsis 17:9-11.) [Del artículo: ‘Grandes cambios se avecinan’] mmilagrosenaccion.blogspot/2013/05/grandes-cambios-se-avecinan.html
Posted on: Fri, 28 Jun 2013 19:53:20 +0000
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