Se prenden las alarmas por adjudicación de millonaria licitación en el Magdalena. La ministra de Transporte, Cecilia Álvarez, y la Procuraduría hicieron sonar sirenas de incendio por la inminente adjudicación de una millonaria licitación para mejorar la vía Palermo-Plato, en el departamento del Magdalena, cuyo costo supera los cuatrocientos mil millones de pesos, la mitad de los cuales serán aportados por la Nación y la otra mitad, con regalías. En el proceso de estructuración de la licitación, la ministra de Transporte detectó algunas cosas que le dejaron mal sabor: ajustes en el valor del contrato, cambios en el pliego que no se reportaron oportunamente a los interesados y el hecho de que la obra no se incluyó en el plan de gastos de la Gobernación a comienzos de este año. La ministra trasladó las inquietudes a la Procuraduría, en donde también había dudas; por eso, el ministerio público emitió una alerta temprana frente a todo el proceso de licitación. Pero el asunto se complicó en materia grave cuando, a pesar de todas las advertencias de la ministra y de la Procuraduría, el gobernador del Magdalena, Luis Miguel Cotes, decidió seguir adelante con la licitación y hace 24 horas cerró el proceso dejando dos firmas precalificadas para ejecutar el contrato. Parece que se está empollando un nuevo escándalo en contratación. Se prenden las alarmas por adjudicación de millonaria licitación en el Magdalena. La ministra de Transporte, Cecilia Álvarez, y la Procuraduría hicieron sonar sirenas de incendio por la inminente adjudicación de una millonaria licitación para mejorar la vía Palermo-Plato, en el departamento del Magdalena, cuyo costo supera los cuatrocientos mil millones de pesos, la mitad de los cuales serán aportados por la Nación y la otra mitad, con regalías. En el proceso de estructuración de la licitación, la ministra de Transporte detectó algunas cosas que le dejaron mal sabor: ajustes en el valor del contrato, cambios en el pliego que no se reportaron oportunamente a los interesados y el hecho de que la obra no se incluyó en el plan de gastos de la Gobernación a comienzos de este año. La ministra trasladó las inquietudes a la Procuraduría, en donde también había dudas; por eso, el ministerio público emitió una alerta temprana frente a todo el proceso de licitación. Pero el asunto se complicó en materia grave cuando, a pesar de todas las advertencias de la ministra y de la Procuraduría, el gobernador del Magdalena, Luis Miguel Cotes, decidió seguir adelante con la licitación y hace 24 horas cerró el proceso dejando dos firmas precalificadas para ejecutar el contrato. Parece que se está empollando un nuevo escándalo en contratación.
Posted on: Sat, 27 Jul 2013 00:03:16 +0000