TM advirtió que operadores deben asumir los sobrecostos. Subsidio de Petro ya cuesta 7 mil millones. Las demoras en la puesta en marcha del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) le pueden terminar saliendo muy costosas a Bogotá. En una reunión privada con pequeños transportadores, el miércoles pasado, el propio gerente de TransMilenio, Fernando Sanclemente, lanzó una preocupante advertencia: si no se corrige el rumbo, el subsidio que debe girar la ciudad subirá de 750.000 millones de pesos a un billón, aproximadamente. Ante semejante panorama, Sanclemente fue enfático en anunciar que el gobierno distrital no está dispuesto a asumir ese millonario sobrecosto, pues responsabilizó a los empresarios del SITP de no cumplir con los cronogramas pactados en este proyecto, que cumple un año y cuatro meses de funcionamiento. Ese subsidio quedó pactado en los contratos, adjudicados en noviembre del 2010, pues con los recursos de la tarifa no se pueden cancelar todos los costos de la operación del sistema. Para evitar subir los pasajes, figuras similares operan en la mayoría de los sistemas de transporte masivo en el mundo. La diferencia es que, por cuenta de las demoras, el desembolso que se planeó hace tres años se podría disparar, porque la implementación del SITP, que arrancó en junio del año pasado, debía concretarse en ocho meses, y dicho plazo no se cumplió. Ahora, la meta es estar listos en abril del próximo año. “Si no se honran los términos contemplados, la diferencia (en el subsidio) la tienen que asumir los operadores, porque no han incorporado la flota ni los conductores”, dijo Sanclemente. “Por problemas de los operadores no hemos podido ser más agresivos en esta materia”, agregó. El funcionario reconoce hoy que “los niveles de ocupación no son los ideales”, principalmente en las ‘horas valle’, cuando los buses azules se ven vacíos. Hoy, lo preocupante es que las demoras persisten y hay alarma por las dificultades financieras de operadores como Coobús y Egobús, que tienen a su cargo el 40 por ciento de las rutas del SITP. Ellos no han podido suministrar la flota de vehículos requerida, lo que impide que salgan de circulación los buses viejos tradicionales. Si los retrasos continúan, esta concesión de transporte público –la más grande de su estilo en la historia del país y adjudicada a 24 años– podría ver enredado el punto de equilibrio financiero, proyectado hacia el 2016. EL TIEMPO habló con uno de los grandes empresarios del transporte, quien se opuso al planteamiento de Sanclemente. “Los retrasos del SITP no se les pueden atribuir a los operadores, ya que hemos perdido tiempo en discusiones con la Alcaldía sobre asuntos como los buses eléctricos. Además no se han integrado las tarjetas de Angelcom y Recaudo Bogotá, y no hay tierra libre para construir los patios”, dijo. Sobre la posibilidad de que paguen los sobrecostos del subsidio, el empresario sostuvo: “No estamos dispuestos; todos tenemos saldos en rojo, y no hay de dónde”. A este subsidio del SITP, con riesgos de sobrecostos, se le suma el que autorizó Petro para reducir las tarifas en TransMilenio. Los dineros salen del presupuesto y son girados por Hacienda. Son unos 7.000 millones de pesos mensuales en promedio, según fuentes oficiales. No hay ‘salvavidas’ público para la calle 26 El gerente de TransMilenio (TM), Fernando Sanclemente, respondió a la propuesta de Yanod Márquez, exsubgerente financiero de TM, para salvar de la quiebra a Coobús, que opera la troncal de la 26. Márquez propuso que el Distrito le conceda créditos a Coobús y dijo que esa propuesta la hizo a título personal “y por solicitud del Distrito”. Sanclemente dijo que TM no tiene esos dineros para ese fin. Además, el secretario de Hacienda, Ricardo Bonilla, agregó que el Distrito “no es prestamista”.
Posted on: Fri, 04 Oct 2013 22:20:55 +0000