Un Alejandro Biondini muy diferente del conocido y difundido en las últimas décadas, se presenta como un peronista ortodoxo, de derecha inclusive relativamente moderada, no esconde sus orígenes cercanos a la "Tendencia" de la que se aleja el mismo día de Ezeiza en 1973. Pese a mi insistencia, corta toda conexión no sólo con el nacionalsocialismo alemán y el fascismo italiano sino inclusive con el falangismo español que siempre resultó más potable de ser vendido para el nacionalismo argentino. Afirma rechazar el racismo y el antisemitismo, y pese a dudar de algunos acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial en forma general, no niega el Holocausto nazi. La pregunta es, Biondini cambio? Asimiló las proscripciones que le impusieron por años para ser candidato? Habló especialmente de este modo porque fue invitado a Realpolitik por un judío de derecha liberal (que para el viejo fascismo era peor que ser judío de izquierda comunista)? Me cuesta mucho creer que es lo segundo, porque quedaría deschavado frente a su propia gente si su presentación fuese artificial para un programa radial. Yo no dudo que ha sido golpeado por la marginación política del sistema, periodismo incluído, ya que después de "La lista de Schindler" de 1993 es imposible hasta para un neonazi europeo reivindicar el proceso alemán de 1938 a 1945. Lo invité a mi programa, quise escucharlo, no dudo ha sido interesante para miles de oyentes. Está habilitado para competir como legislador el 27 de octubre con otros 29 que vienen debajo de él en la lista de titulares. Dió la impresión de que votaría en blanco para diputados y senadores en el mismo comicio. Debo confesar que a mi no me resulta complicado hablar con personas como Biondini, vengo de la educación pública y desde chico traté con gente de su ideología. Simplemente te parás frente a ellos y les decís que estás en contra y listo. Estamos en el siglo XXI y no se animarán a abrir fuego. Además soy del Medio Oriente, no soy de Europa Oriental. La postura típicamente europea tardía y culposa de proscribir a mi no me sirve. Pero más importante que esto, que es personal, en el Estado de Israel existen partidos políticos de la ideología derechista de Biondini y en los partidos árabes, legales que compiten por sus bancas en el Parlamento de Jerusalém, hay expresiones muy duras contra el sionismo y el pueblo judío y lo mismo las dejan pasar. Además en los países árabes, y en Irán, hay continuas apologías públicas del nazismo y los representantes de esos estados luego terminan cerrando con Estados Unidos y Europa en la cumbre. Es así, porque la política internacional es extremadamente flexible y las partes que conversan y negocian archivan sus deseos de venganza por hechos del pasado con miras a lograr acuerdos que reputan beneficiosos o rentables y prefieren mirar sólo hacia el futuro. Las cosas son como son. No como a uno le gustaría que fuesen. https://soundcloud/carlos-maslat-n/carlos-maslat-n-entrevista-22
Posted on: Fri, 27 Sep 2013 15:46:57 +0000
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