VOLVERE Y SERE MILLONES En la plaza de armas del Cuzco, Perú, el 18 de mayo de 1781, Túpac Amaru fue obligado como lo señalaba la sentencia a presenciar la ejecución de sus aliados, esposa e hijos. Días antes de su crimen fue torturado para que informara acerca de sus compañeros de rebelión, atormentado expresó en lenguaje quechua su gran desafío frente a los criminales invasores europeos, antes de que el verdugo cortara su lengua y se ejecutara la condena: “volveré y seré millones”. Túpac Amaru fue el líder de la mayor rebelión indígena anticolonial que se dio en América durante el siglo XVIII, un héroe de origen mestizo descendiente del Inca Túpac Amaru y de criollos, durante su infancia recibió formación religiosa y posteriormente vistió como noble Inca hasta ser excomulgado de la iglesia católica, en el movimiento indigenista y libertario que encabezó tuvo notable influencia la lectura de “Los comentarios reales” del Inca Garcilazo de la Vega, se comprueba el alcance que pudo tener esta obra en su acción transformadora, así como también, la lectura de libros que circulaban clandestinamente de Voltaire y Rousseau. Nuestro líder indígena contrajo matrimonio con Micaela Bastidas, su fiel compañera y lugarteniente hasta su muerte, tiempo después fue nombrado cacique de los territorios que le correspondían por herencia, fijó su residencia en la ciudad del Cuzco desde donde viajaba para atender el trabajo en sus pertenencias, comenzó a sufrir la presión de las autoridades españolas que lo sometieron al pago de serios impuestos, procedió a demandar que los indios fueran liberados del trabajo obligatorio en las minas, nunca obtuvo respuesta a estos reclamos, buscó que se le reconociera su linaje Inca y sólo consiguió negativas o indiferencia, esta situación desencadenó la rebelión indígena a la que se integraron criollos, mestizos y negros, esta revuelta significó en su primera etapa la promulgación del famoso decreto “Bando de libertad”, liberación de los esclavos de todas las razas, adelantándose a los libertadores Bolívar y San Martín. Finalmente, la rebelión tupamara fue derrotada por fuerzas superiores, los españoles acudieron al mismo sistema que usaron siempre para dominar a los pueblos americanos: la traición, el engaño, la represión y exterminio de los pueblos indígenas, mataron a todos los indios que pudieron, se calcula cien mil en total entre 1871 y 1875. Esta insurrección se coloca como la más importante de las rebeliones que sacudieron América entre 1774 y 1789, en sus planteamientos por encima de los principios de la supremacía blanca de las revoluciones norteamericana y francesa que no abolieron la esclavitud, pues los planteamientos de Túpac Amaru proclamaban la supresión de toda forma de vasallaje y la eliminación de todo el poder colonial en América.
Posted on: Sun, 14 Jul 2013 15:14:55 +0000
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