Ya en el siglo XVI el arte imaginero se desarrolla en toda Europa, nombres como Juan de Juni preceden a la expolison iconografica que tiene su máximo exponente en la imagineria barroca de las escuelas castellana, andaluza y murciana. Consecuencia de la Reforma y la Contrareforma, y fomentada por el Concilio de Trento la imagineria religiosa tendrá un marcado carácter devocional en contraposición con el carácter iconoclasta del protestantismo. Uno de los imagineros mas reconocidos será Gregorio Fernandez, de la Escuela Castellana. Su obra se reparte por toda Castilla y una buena muestra se recoge en el Museo de Escultura de Valladolid, ubicado en el Colegio San Gregorio, un edificio plateresco, una joya arquitectónica que ya por si solo merece una visita. El Cristo Yacente que se presenta en la Exposición Credo, es uno de los muchos que tallo el escultor convirtiéndose en un icono de su producción absolutamente inconfundible por su realismo y dramatismo. Este en concreto es el de la Catedral de Segovia.
Posted on: Fri, 07 Jun 2013 09:39:43 +0000
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