[CERRADO| Jardines | I’m gonna die |Ejercicio y Sueño | El chat es malo] El día había comenzado realmente temprano para Tao, o al menos eso pensaba él, pues al momento de abrir los ojos, notó la habitación oscura y cubierta de sombras. Queriendo dormir un poco más, se envuelve en una de sus mantas, pero después de unos minutos de rodar sin sentido por toda la cama buscando acomodarse, se rinde y se pone de pie. Ya fuera de la cama se estira un poco, sintiendo como su piel se erizaba por la humedad y la baja temperatura que había en la habitación en ese momento. Con pasos algo torpes por su estado adormilado, se dirige al baño para lavarse la cara y los dientes, para de esta manera desperezarse un poco. Realiza su rutina matutina y sale, bostezando profundamente al hacerlo. Al parecer el agua fría no había logrado que el sueño abandonara su cuerpo por completo. Desordena un poco su cabello y le dirige una mirada a sus compañeros de habitación, quienes en ese momento dormían profundamente. Eran ChunJi de TEEN TOP y U-Kwon de BLOCKB, si no se equivocaba. Aunque nunca había hablado con ellos directamente desde que se mudaron a la habitación 320, intuía que eran buenos chicos –si es que la habitación ordenada era una buena señal de eso-. Como sabía que no podría regresar a dormir, decide hacer uso de ese tiempo que tenía antes de comenzar las clases en hacer un poco de ejercicio, nada realmente agotador, solamente unos estiramientos y correr un par de kilómetros. Dándoles una mirada nuevamente a las figuras en las otras camas, decide cambiarse de ropa ahí mismo, aunque en realidad no debía hacer mucho, pues solo vestía unos holgados pantalones de pijama. Rápidamente, se viste con un par de pantalones de gimnasia, una camiseta deportiva y una sudadera, sin olvidar una gorra para evitar que el sudor entrara a sus ojos –aunque más que nada se debía a que no quería peinarse-. Una vez listo, sale de la habitación y abandona el edificio a un leve ritmo de trote, sintiendo como sus músculos comenzaban a calentarse y estirarse. Después de tantos años, esa sensación molesta y hasta dolorosa para muchos, le era incluso placentera por la familiaridad. Sale con rumbo a los jardines, inhalando con profundidad el húmedo aire de la madrugada, mientras sentía como la suela de sus zapatos amortiguaba el golpe contra el suelo con cada paso que daba. En poco tiempo aumenta la velocidad, moviendo sus brazos con naturalidad a cada lado de su cuerpo, dejando que el ritmo de sus pies fuera el que controlara los movimientos del resto de su cuerpo. Cuando volvió a tomar en cuenta su entorno, notó que el sol ya había salido, no por completo, pero sus rayos eran suficientes para calentar su piel y hacerle saber que seguía siendo temprano, pero que ya pronto los demás estudiantes comenzarían a despertar. Decide descansar un poco antes de regresar a la habitación a tomar una ducha, sintiendo como sus piernas parecían rogar un descanso. Al parecer había corrido mucho más de lo que había pensado en un primer momento. Se acerca a uno de los árboles de los jardines, un poco oculto a la vista, y se sienta a sus pies, con la espalda recostada en su tronco, inclinando un poco la gorra para ocultar sus ojos de los rayor solares. Sin saberlo, en pocos minutos se quedó dormido, víctima del cansancio. “¿LuHan ge” Fue lo primero que pensó al abrir los ojos y ver la cara del vocalista. Parpadea un par de veces para asegurarse de estar viendo bien, pues según él, aun se encontraban en los jardines. Una mirada a su alrededor le hizo darse cuenta que no se encontraban ni siquiera cerca del IBS. Se encontraban en una sala de ensayo de la SM Ent. “Oh…no” pensó al aceptar que se encontraba soñando otra vez. Regresa su mirada hacia LuHan ge, quien ahora platicaba de algo, al parecer muy interesante, con Henry ge y SeHunnie, pero al parecer a éste último no le había agradado la idea y había abandonado la habitación. Sintiéndose algo perdido, se levanta del suelo y se dirige hacia ellos, decidido a saber de qué se trataba el sueño ésta vez; pero antes de poder preguntar, ve como Henry gege abandona también la habitación pero él lo hace con una sonrisa bastante…peculiar. Un poco temeroso por el extraño comportamiento de sus compañeros de empresa, se acerca más a uno de los mayores de su grupo, pero lo único que consigue es que éste lo tome del brazo y tire de él hasta que ambos se encontraron escondidos en uno de los armarios donde se guardaban algunos artículos para las coreografías. “Shh Tao. Henry las convencerá, les dirá que aquí es seguro” Escuchó la voz del mayor en un tono completamente nuevo. “¿Convencerlas?” Aún más perdido que antes, mira a su alrededor buscando una ruta de escape menos obvia, pero antes de poder hacer algún movimiento, escucha como un par de voces agudas se acercaban entre risas hacia la habitación de ensayos. Fue ahí cuando notó por primera vez que el lugar donde había despertado, era un colchón cubierto con algunas mantas suaves. ¿Qué rayos estaba pasando ahí? “Silencio Tao, no deben saber que estamos aquí” Escucha que LuHan le ordena, pero antes de poder preguntar sobre quienes se refería, la puerta se abrió revelando dos delgadas pero estilizadas figuras, algo tambaleantes. –¿Eonni? ¿Yul noona?- parpadea un par de veces para confirmar lo que sus ojos veían. Dudoso de qué es lo que estaban haciendo escondidos en el armario, gira para ver a su gege, pero se lleva la sorpresa de ver que éste se encontraba más que entretenido con la vista, con el rostro casi pegado a las persianas que les permitían ver el interior de la sala. Regresa su vista a la sala, y por un momento teme que sus ojos salgan de sus cuencas al ver lo que sucedía ahí. Yuri noona se encontraba sosteniendo a Ssica de la cintura, compartiendo lo que parecía el beso más suave del que había sido testigo, un leve roce de labios levemente humectados por el maquillaje, moviéndose suavemente en sintonía con el propósito de explorar, como si fuera un primer beso. O al menos, eso es lo que le pareció al chino menor, quien ahora tenía el rostro completamente enrojecido, pero sintiéndose incapaz de alejar su vista de la escena, su curiosidad tomando el control completamente. Lo que parecía un beso en extremo cariñoso y suave, en pocos segundos se convirtió en un beso hambriento y lleno de necesidad. Parecía que Yuri quería tomar todo lo que Jessica quisiera ofrecerle, y ésta se entregaba con gusto a todo lo que la morena hiciera y deseara. El control del profundo beso lo llevaba Yul en un inicio, sin embargo, parecía que eonni había decidido tomar las riendas del beso y ahora lo que fuera un beso lleno de ganas, se había convertido en una batalla por el dominio, donde sus únicas armas eran sus labios, dientes, saliva y aliento. Las manos de la pelinaranja escalaron hasta el largo cabello de la morena, enredando sus dedos en las suaves y largas hebras en un agarre posesivo, como si no deseara dejarla ir. Sintiéndose un…¿vouyerista? Cambia su atención a LuHan, pero éste se encontraba con la mirada completamente perdida en la escena, y, para su completo shock una de las manos del mayor se encontraba firmemente presionada contra su entrepierna, moviéndose a un ritmo…ni siquiera quería saberlo. Era obvio que los miembros recurrían a la masturbación, eran hombres jóvenes privados de toda clase de contacto de ese tipo con una persona fuera de su grupo, pero nunca se había encontrado conscientemente en la misma habitación con una persona autosatisfaciéndose. Aunque ahora que lo pensaba, tampoco se había encontrado nunca en la misma habitación con un par de chicas besándose de esa manera. Ese último pensamiento regresó su atención a la escena en la sala donde al parecer, las chicas no habían perdido el tiempo. Ambas se encontraban ahora sobre el colchón, en algún punto mientras se encontraba distraído mirando a LuHan ge, Yuri había perdido su blusa y ahora se encontraba sentada a horcajadas sobre las caderas de Jessica, con sus brazos a cada lado de la cabeza de la vocalista, encerrándola entre su cuerpo y el colchón. La pelinaranja no perdió el tiempo tampoco, pues en la espalda de la morena, se podían ver algunas marcas rojizas a lo largo de su espalda. Vio como de manera juguetona la vocalista metía sus manos bajo la suave tela del brassier, palpando y apretando lo que ahí se encontraba ganándose unos suaves y complacidos gemidos por parte de Yul. Poco después la morena introdujo sus manos bajo la delgada tela de la blusa de la mayor, levantándola hasta retirarla por completo del delgado cuerpo que descansaba bajo ella, dejando al descubierto una extensión de piel blanca y de apariencia suave y cremosa, completamente invitadora. Fue ahí cuando notó que la mayor no llevaba nada bajo la blusa. Sintiéndose sumamente abochornado, cambia el foco de su mirada a la piel de la espalda de la Black Pearl, pero nuevamente es sorprendido cuando un grave y gutural gemido se escucha a su lado, provocándole un estremecimiento. Al parecer LuHan gege estaba disfrutando mucho del espectáculo. Mirando de nuevo hacia la sala, siente como una corriente de calor se aloja en su bajo vientre, haciendo estragos con su cuerpo al ver como la morena baja el rostro con una sonrisa juguetona, e introduce entre sus labios un suave y rosa botón, provocando que la mayor arqueara su cuerpo, elevándose un poco del colchón. Entre suaves caricias, besos y mordidas la menor llenó de marcas el pecho de la pelinaranja, centrando sus caricias y besos en los erectos botones. “Ahora viene lo mejor” Escucha que dice LuHan, pero en ese momento no sabía ni que hacer o que ver, pues se encontraba dividido entre su bochorno, vergüenza, curiosidad y excitación, todo a partes iguales haciendo un desastre en su mente, desastre igual al que la escena provocaba en su aparentemente muerto líbido. Regresa su atención a la escena, pero se detiene por completo al ver como la menor comenzaba a avanzar con un camino de besos hacia el botón de los jeans de la mayor, provocando las risas en ésta. A los pocos segundos, la menor ya se había deshecho por completo de los pantalones de la líder del consejo, dejando a la vista la provocativa ropa interior que ésta vestía, robándole por completo el aliento al vocalista al lado de Tao –si el fuerte jadeo que escuchó era señal de eso-. Sin embargo, todo su autocontrol regresó cuando la chica comenzó a bajar el suave elástico con la intensión de dejar por completo al descubierto el cuerpo de la mayor. “Oh… no no no no…” Despertó sintiéndose supremamente incómodo y abochornado, sintiendo contra su rostro los cálidos rayos del sol que le indicaban que seguía siendo temprano, pero que la actividad ya había comenzado en el Instituto. Se levanta del suelo y nota la enorme erección que ahora portaba, aún más notoria a través de la delgada tela de sus pantalones, sabiendo ahora la razón de su incomodidad. Rápidamente se quita la sudadera, atándola a su cintura para de ésta manera cubrir un poco esa zona y que no fuera tan evidente, rogándole a todos los dioses que conocía que nadie se halla dado cuenta mientras dormía, rogando que nadie le escuchara hablar dormido. Con el paso de los segundos se sentía más y más incómodo y expuesto por lo que comenzó a correr lo más rápido que podía, sin un rumbo fijo. Necesitaba un lugar donde ocultarse y hacerse cargo del molesto peso en sus pantalones. En pocos minutos pensó en la respuesta: la alberca escolar. Nadie iba y el agua estaba siempre helada. Ya después pensaría en como ver frente a frente a LuHan sin convertirse en un tomate humano, o peor aún, a eonni. Pero ya tendría tiempo de atormentarse con eso, por ahora debía bajarle la emoción a cierta parte de su cuerpo.
Posted on: Thu, 12 Sep 2013 05:35:59 +0000
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